PROHIBIDO. Inocente Pecado

~Capítulo 50~

Creo que había llegado cinco minutos tarde, mi corazón latía con fuerza y respiraba entrecortado, pero jamás me había sentido tan viva. Miré a todas partes buscando a Kyuhyun. "Necesito verlo, necesito abrazarlo y estar con él"

Un cosquilleo se apoderó de mi vientre, causando más alegría de lo normal.

-Buenos días doctora, Jones—Me saluda una de las enfermeras tal vez dos años menor que yo. De inmediato sonreí y devuelvo el saludo. Me dirigí hasta mi consultorio, encontrando todo tal y como lo había dejado ayer.

Hoy se terminaba y me marcharía con Kyuhyun, y mañana estaríamos casados... solos los dos. Nunca nadie nos volverá a separar.

Mi primer paciente fue un niño de ojos cafés claros, bastante travieso logrando cuestionarme ¿Cómo fue Kyuhyun cuando era un niño? Quizás inquieto, o quizás, bastante serio. No, quizás fue una mescla de ambos pero bastante travieso. ¿Cómo hubiesen sido nuestros hijos?...

Un golpe en mi pecho ante el recuerdo. No, (TN). No seas negativa. Los tratamientos para tener hijos existen y no porque un médico aseguró que no tendría hijos, signifique que sea cierto. Mi ovario es débil, pero no soy infértil, o al menos eso me gusta pensar. Aun conservo la esperanza de algún día poder tener un niño.

Respiré y continué con mi trabajo. A la hora de almuerzo fui directo al consultorio de Kyuhyun, sin embargo, él no se hallaba. Ya se había marchado hace quizás unos minutos.

-¡Eh!—la voz de Donghae a mis espaldas-- ¿Buscando a tu hermano?—Su brazo cruzó por mi hombro, causando que volteara en estado de alerta. Donghae sonrió ladeando la cabeza—

-Tranquila—Agregó—Tu secreto está seguro conmigo... si es que colaboras—Sonrió ladeando la cabeza en un gesto petulante. Apreté los labios pero me obligué a alejarme—

-¿Me estas chantajeando?—cuestioné sonando más severa de lo que pretendí, ocasionando un gesto de sorpresa y vacilación en los ojos de él—

-Claro que no, (TN)... solo te estoy ayudando a darte cuenta que quien te conviene soy yo, no Kyuhyun—Su rostro se tornó más serio— Aunque quizás y te resulta divertido acostarte con tu hermano. Quizás por eso haces lo que haces—Apreté mi puño. "No lo hagas, (TN)"

-Me tengo que ir—Logré decir aparatándome de Donghae—

-¡Te veo luego! ¡Paso por tu consultorio, amor!—Se despidió sin impedir que continuase mi camino. No seas débil, (TN)" ¿Qué vas a lograr sediento a su chantaje, si una vez que acceda no creo que pueda detenerse? Las personas como él son así. No... no quiero más dolor para mí, quiero sonreír.

Al llegar la noche, estando recogiendo mis cosas, lista para marcharme a casa y encontrar a Kyuhyun para poder decirle que deseo irme con él, que deseo estar solo con él.

-¿Ya te vas?=-- cuestionó Donghae ingresando a mi consultorio; sin embargo era algo que ya tenía previsto. Solo me quedaba enfrentarlo, llegar a casa y largarme con Kyuhyun. Nunca nadie más tendrá la posibilidad de hacerme daño.

-Sí, ya me voy—Respondí tomando mi bolso—

-¿A mi departamento?—cuestionó con una sonrisa de satisfacción en el rostro—A cenar a la luz de las velas conmigo.

-No voy a ir contigo—Respondí con la mayor normalidad que pude, logrando ver su expresión de sorpresa en los ojos—

-¿No?—arqueó las cejas-- ¿No iras, (TN)?... – Se acercó más a prisa hasta quedar enfrente mío-- ¿De verdad crees que bromeo (TN)?—