De Mejores Amigos a Novios

2

Dos

Me sentía tan rara dentro de una escuela nueva. Lo único quiero salir de aquí, ir a casa, encender la laptop, ver unos doramas y necesito mis libros. Definitivamente los necesito para darme paz y tener paz interior.

Paz interior, paz interior. Repitiendo eso me calmo y decido ver mis horarios.

— Osea, escúchame...— escuché decir a una chica bien guapa — Yo le dije a Bryan que no quería salir con él... Porque es tan nerd y, porque no. ¿Te imaginas? ¿Yo, saliendo con ese raro? Pfff...

— Tranquila Ann —escuché un tipo diferente de voz —, tranquila que si te estresas puedes arruinar tu cutis. Recuerda lucir bella y hermosa.

— Tienes razón Rouse, tranquilidad tranquilidad...— veo como cierra lentamente sus ojos y al abrirlos éstos cruzan con los míos— ¡¿Se te ofrece algo?! ¿Quién eres tú?

¿Me estaba hablando? Mejor dicho, ¿me estaba preguntando?
Las miré, ambas estaban vestidas como si hubieran salido de las revistas de moda que mamá tiene en la sala, ¿esto era una preparatoria o qué?

— Eh, soy nueva aquí, y quería saber en dónde se encontraba ...— traté de consultar, pero se quedó en intento cuando ella me calló con su chillona voz.

— No me importa. ¿Sabes que no debes de andar husmeando sobre las conversaciones de otras personas? — la que habló me pareció que era la segunda, es decir Rouse.

— Ah, bueno, disculpa entonces... — lo que dije le pareció poco así que pasó de mí, y mejor me fui.

¿Quién se cree que es? ¿La reina de Inglaterra? Pues eso poco me interesa. Y mucho menos su vida, con quién sale, por qué y toda la cosa como para estar husmeando. Chs.

Mejor me ocupo de mis horarios ahora para irme lo más pronto de aquí. Casillero número 263. Número 263. ¿Dónde se supone que lo encuentro? Está muy en claro que en el buzón de sugerencias colocaré que en los horarios deberían de venir un croquis o un mapa de la preparatoria, así cualquiera se pierde. Aunque pensándolo bien, no soy muy buena con los mapas. Una ubicación por WhatsApp estaría genial, en definitiva.

De pronto, mi cabeza choca fuertemente contra lo que sea que haya estado ahí, un dolor se extiende por toda mi frente, eso fue lo que me quitó todo pensamiento sobre los mapas y las ubicaciones de WhatsApp. Cierro los ojos y suelto los libros que me acababan de dar y todo lo que tenía en las manos para sostener mi frente.

Creo que tu frente se dio contra el casillero de alguien.

— ¡Ay, no me digas!— me quejo con mis pensamientos— Mi día no puede ser peor, no puede— me quejo aún con los ojos cerrados y frotando con delicadeza donde me duele. Seguro que quedará marca, seguro que sí.

— ¡Ey! ¿Te encuentras bien? ¡Lo siento mucho de veras! No me fijé que estabas viniendo.

¿Acaso él era tarado o qué? Si alguien se golpea, ¿Se supone que está bien?

— ¡Auch! Mi frente.— mientras abría los ojos, me encontré con un chico de ojos verdes y cabello color azabache.

— Sí que te diste un buen golpe.— me dijo ayudando a levantar las cosas que dejé regadas por el suelo— En serio, discúlpame. Soy Jessey, Jessey Black. A veces suelo distraerme rápido, y a estas horas pocos suelen estar por los pasillos.

— Hola. Soy Maddie, Maddie West.— le extiendo la mano para que me dé mis cosas pero él entiende otra cosa y me la aprieta con fuerza y la sacude en forma de saludo. ¿Qué rayos?

— Eres la nueva, ¿cierto? — esta vez me suelta y me entrega mis cosas, revisando primero mi horario. — Creo que nos veremos muy seguido. Tengo Literatura, Álgebra, Química, Biología, Historia y Música contigo.

— Sí, supongo. —le respondo dudosa— Ya que te encontré, ¿Sabes dónde se encuentra el casillero número 263?

— Sí, justo ahí—señalándome los de al frente—, yo que tú, voy buscando hielo.

Él se ríe y yo no puedo hacer otra cosa que quejarme y soltar un— Oh, ya claro, deberías buscármelo tú, ya que fue por tu culpa que me golpeé.

— Creo que no deberías darme todo el crédito, también estabas distraída.— vuelve a reír y yo le doy la mejor de mis caras de molestia junto con un:

— Oh, ya vete.

Cosa que él hace, con un ademán de su mano, lo veo desaparecer de mi vista.

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