Capítulo 60 "Hogar"

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Antes de nada, quiero pediros perdón por haber estado sin subir estos meses y más al final de la historia, no he tenido mucho tiempo para escribir. Para intentar compensar este tiempo estos son dos capítulos que los he juntado en uno para que sea más largo y bueno quedan uno o dos para el final, aún tengo que escribirlos así que paciencia :( espero que comenteis aunque bueno sé que muchas habrán dejado de leerla o ni se acordaran. También decir que ya no pondré tweets avisando que subo capítulo, si alguien quiere que le avise personalmente que me lo diga y le aviso por dm de tw o algo pero no a todas. Otra cosa, en este tiempo me ha venido un poco la inspiración y tengo dos ideas para fanfics, una la estoy escribiendo y bueno supongo que cuando esté más avanzada la subiré. De momento en estos días subiré la portada y la sinopsis pero aún no la publicaré. Bueno os dejo él capítulo espero que os guste y siento tardar






HARRY NARRA.

Me desperté con un dolor de cabeza horrible debido al cansancio. El viaje de ayer de vuelta a casa me dejó más que agotado y si sumamos eso a que apenas pude dormir por la noche pensando en aquella carta, el resultado era este, un dolor de cabeza enorme. Si juntaba algunas piezas de este maldito rompecabezas llegaba a la conclusión de que mi padre era quien le había mandado algunos mensajes de texto a Lilly hacía unas semanas, y él mismo fue quien también la siguió hasta la cafetería y luego desapareció como si nada. Intentaba asustarla, pero sobre todo, intentaba que yo estuviera alerta de cada movimiento que daba y pista que me dejaba, para al final, volver a encontrarme con él, que era justo lo que mi padre estaba buscando. Por más que lo pensaba, no sabía cómo reaccionar cuando ese momento llegara. Se podría decir que estaba nervioso, confuso, intrigado y aterrado. Tenía miedo, pero no sobre lo que pudiera hacerme a mí, sino lo que podía hacer con Lilly. Juro que si llega a tocarla se arrepentirá de haberlo hecho.

Después de pasarme más de media hora tumbado en la cama pensando, decidí que lo mejor sería levantarme. Estiré algunos músculos de mi cuerpo y me dirigí a la cocina para tomar algo de desayunar antes de hacer algo productivo. Tenía una gran necesidad de llamar a Lilly y preguntarle qué tal había dormido, quedar con ella y verla de nuevo. Preparé mi café habitual de por las mañanas y me lo tomé mientras veía los informativos en la televisión, ya que prefería eso a tener que aguantar programas de teletienda o de cotilleos. Cogí mi móvil para revisar si tenía algún mensaje de Lilly pero me decepcioné un poco al ver que no tenía nada. Tal vez estuviera dormida todavía, al fin y al cabo aún era temprano. Subí al baño a asearme y me cambié para ir a comprar algunas cosas al supermercado. Al llegar allí, pude notar que, a pesar de ser temprano, había bastante gente. Fui directo a los estantes de chocolatinas y dulces y compré algunos paquetes, sabía cuánto le gustaban y me gustaba tenerlos para cuando viniera. Compré algunos alimentos que necesitaba y después volví a casa. Me paré a mitad de camino para observar un coche que se encontraba estacionado al otro lado de la calle. Era un vehículo de color gris oscuro y con los cristales tintados de negro, así que no me era posible ver quien se sentaba en el asiento del copiloto. Pero tuve una extraña sensación por todo mi cuerpo que no me daba buenas vibraciones. Así que no me detuve a mirar ni un segundo más y volví a casa. Dejé las compras en la mesa y cogí el móvil para llamar a Lilly, era casi mediodía así que debía estar despierta. Me estaba poniendo nervioso ya que, después de cuatro tonos, seguía sin cogérmelo. Por fin lo cogió y suspiré un poco aliviado.

''¿Sí?'' Por su tono de voz pude notar que se había acabado de despertar.

''¿Estás bien?''

''Sí, ¿qué pasa?''

''Sólo quería saberlo'' Me sentí aliviado de saber que estaba bien. Desde aquella carta, tenía miedo de que pudiera pasarle algo porque, como decía el mensaje, la venganza está cerca. Con el hecho de escuchar su voz hacía que mis preocupaciones se alejaran un poco, al fin y al cabo lo único que quería era que no le pasara nada.

DangerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora