Danger

Capítulo 16 ''Esperando su reacción''

HARRY NARRA.

Después de estar casi dos horas dándole al puto saco decidí volver a casa. No tenía nada interesante que hacer hoy, el maldito de Connor se había llevado a Lilly a cenar. Podría ir y arruinarles la cena pero mejor no hacerlo. Cogí mi teléfono y veo algunos mensajes de chicas invitándome a una gran fiesta que se celebraría esta noche con motivo del cumpleaños de una de ellas. Eran niñas buenas de papá así que sería divertido ir y si había suerte, acostarme con alguna, esas chicas eran tremendamente sexys. Me vestí, más o menos arreglado, lo normal para ir de fiesta y cogí mi coche para ir hasta allí. La casa era enorme, con piscina y varias plantas, esta fiesta tendría que ser increíble. Me bajé del coche y la gente me miraba, las chicas se mordían el labio y algunos se apartaban para dejarme paso. La música resonaba en toda la calle pero no importaba ya que no había muchos vecinos por la zona. . Fui directo a la barra y pedí un Vodka para empezar la noche. Miraba a la gente bailar y a las chicas moverse. Hacía mucha calor así que salí y fui al jardín un rato para tomar el aire. Las chicas estaban en bañador jugando con el agua de la piscina y me estaban poniendo a cien. Una morena se acercó a mi con una copa y la miraba de arriba a abajo, estaba buenísima, tal vez podría ser mi chica para esta noche.

''Hola cielo, gracias por venir a mi fiesta'' Se mordió el labio y yo hice lo mismo.

''Vaya, así que eres la del cumpleaños...Felicidades nena''

''¿Has traído regalo?'' La chica fue acercándose a mi y empezó a moverse provocativa cerca de mi entrepierna, zona peligrosa. Su pícara sonrisa no desaparecía de su cara y sus caderas se movían a un ritmo muy caliente. Mierda Harry.

''No, ¿quieres algo en especial?'' Puse mis manos sobre sus caderas acariciando un poco y animándola a que siguiera moviéndose de esta manera tan sexy, al final esto de la fiesta iba a ser mejor de lo que pensaba.

''Es posible, quiero ver como sabes'' Relamió su labio y el bulto de mi entrepierna aumentó notablemente. Me cogió del brazo y me llevó a un baño cercano. Le echó el pestillo a la puerta y me empujó para que mi espalda quedara pegada a la pared.

''No puedes decírselo a nadie o mi papá me regañará'' Desabrochó mis pantalones y estos cayeron y quedaron amontonados en mis tobillos. Joder, maldita chica, tan buena delante de sus padres y tan jodidamente sucia cuando estos no están, eso me ponía a mil. Puso sus manos en el filo de mis bóxers para bajarlos cuando su móvil sonó. Miró la pantalla y la expresión de su rostro cambió por completo. Se podía decir que era quien menos deseaba que fuera.

''Es mi padre, tengo que atenderlo pero en un rato te busco y lo terminamos, te lo prometo'' Suspiré molesto y me subí mis pantalones. Si ahora había desaprovechado su oportunidad, después que no viniera a buscarme. Me fui de allí molesto y volví a la fiesta, una chica menos. ¿Cómo se lo estarían pasando Lilly y Connor? La idea de que estuvieran disfrutando me ponía enfermo así que rezo para que estuvieran en un momento incómodo y ella esté deseando irse a casa.

LILLY NARRA.

La noche iba de maravilla, estaba disfrutando mucho de la compañía de Connor. Hablamos de los planes para este curso, de las asignaturas nuevas y hablamos un poco de su familia. Era el mediano de tres hermanos, su padre trabajaba vendiendo casas en  el barrio más rico de la ciudad y su madre era ama de casa. Por lo que me contaba parecían una familia feliz y sin problemas y en ese caso era bastante afortunado. Le dije que no quería hablar de la mía, nadie sabía de lo que había pasado en mi familia, nadie excepto Harry, ¿por qué él lo sabía? No debería de haberle contado nada, no confio en él pero en ese momento lo único que necesitaba era contárselo a alguien y él era quien estaba allí. Acabamos de cenar y estuvimos dando un paseo. Me invitó a un helado y paseábamos por unas calles por las que nunca había estado. A juzgar por las casas podía decir que era un barrio de buena economía. Pasamos por delante de una enorme mansión donde al parecer se celebraba una gran fiesta. Las luces de colores iluminaban toda la calle y la música a todo volumen hacía que te entrara dolor de cabeza en cuestión de minutos. Menos mal que era a las afueras de la ciudad, de lo contrario los vecinos ya habrían llamado a la policía debido a tanto escándalo.

''¿Quieres entrar un rato? No tenemos nada que hacer'y la entrada es libre'' Sonrió y la idea me pareció muy desagradable, no quería estropear la noche y tenía la sensación de que si aceptaba a entrar, toda esta perfecta cita iría a la mierda. Miré a Connor y su mirada me estaba convenciendo para entrar a la fiesta y pasar un rato, ¿qué podría salir mal?

Tienes mala suerte, seguro que vas a arruinar la noche. Mi subconsciente me recordaba pero intentaba hacerle el menor caso. De la mano de Connor, entramos a la fiesta. La gente estaba muy borracha, las chicas en la piscina, todos bailando, esto era un descontrol. Entramos al interior de la casa y todo era igual, miles de vasos por el suelo, botellas por todos lados, gente besándose en mitad del sofá, apenas llevábamos dos minutos aquí y ya me estaba empezando a arrepentir. Me cogió de la mano fuertemente y nos metimos en una habitación libre. Cerró la puerta detrás de él y rió un poco.

''Creo que esto no es de nuestro estilo'' Negué rápidamente con la cabeza y me senté en la cama que había. Me dolían un poco los pies de estos zapatos y me los quité soltando un largo suspiro de placer. Connor volvió a reír y se sentó a mi lado. El silencio reinaba en la habitación, pero no era nada incómodo, más bien relajante. Miré todo a mi alrededor, era un cuarto bastante grande y parecía de una chica.

''Me lo he pasado muy bien contigo esta noche'' Rompió el silencio y le di mi mejor sonrisa.

''Yo también, creo que tenemos que repetirlo'' La sonrisa de su rostro creció y se veía precioso.

''Sí, pero aún no ha acabado la noche'' Le miré y cada vez estaba más cerca de mi, a pocos centímetros de distancia. Iba a responderle pero no pude debido a que juntó sus labios con los míos. Lo seguí un poco y noté su fría lengua entrando en mi boca. Cada vez el beso iba subiendo más de tono y me avergonzaba un poco. Su mano iba a mis muslos levantando un poco el vestido. Un gemido salió de mis labios sin querer y la puerta se abrió lo que hizo que nos separáramos rápidamente. Mis ojos se abrieron de par en par al ver a Harry en la puerta mirándonos. En sus ojos se podía notar la rabia y sus puños apretados a cada lado de él le delataban, le estaba matando por dentro habernos visto y mi miedo volvía a crecer esperando su respuesta.

Esperando su reacción.