vacaciones de medio año!

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Abrí mis ojos y eran las 8:02am. Después de una semana de exámenes intensa, por fin podía despertar hasta tarde! Al fin llegó la semana que todo adolescente espera con ansia, las vacaciones de medio año. No entiendo de donde surgió mi emoción ya que, que yo sepa:

1. No tendré fiestas...

2. Dylan no me invitará a salir.

3. No viajaré...

4. No haré nada interesante.

5. Probablemente me quede en casa viendo Netflix y comiendo oreos...

Y seamos realistas, por mas emocionada que esté, siempre pasará lo mismo: me emociono, pienso que saldré de la rutina, que me divertiré! Y todas las vacaciones son tipo: leer novelas de "tu y Louis Tomlinson" en Wattpad. Lo sé, patético.

Eran las 8:10 cuando llegó la llamada que esperaba. Era Marisabel, que como todas las vacaciones de verano, me llama para hablar sobre el baile de verano.

-aló?- pregunté.

-hola hermosa! Puedes creer que faltan tan pocas horas para el baile?!-

-si, que emoción...- dije lo mas entusiasmada que podía aunque me valía un pepino.

-crees que los manteles deben ser estampados?-

-buen...-

-las esculturas de hielo ya pasaron de moda?- me interrumpió -ponche! Tengo que ordenar el ponche! Y crees que pongo vestido largo en la invitación? Uuu o vestidos cortos y sexys! Un tema animal print! Oo neón! Si!-

Después de los primeros 20 minutos solo empecé con mis típicos "ajá, uh! Buena idea! Mjm" por que la conversación me daba suficiente motivos para suicidarme. La amo, es mi mejor amiga, pero cuando hablas con ella, ella solo quiere que la escuches y estés de acuerdo con ella.

Con el teléfono en la oreja, caminé hacia mi pequeña ventana rezando por que Dylan estuviera en su cuarto, pero no lo estaba... Bajé la mirada y lo vi. Estaba lavando su auto, bueno, el hermoso auto de su padre. Un convertible negro magnífico. Llevaba una camisa sin mangas que en unos minutos desapareció, sentía que mi barbilla tocaría el suelo en cualquier segundo! De arriba para abajo un cuerpazo, y encima lleno de agua y de espuma. Verlo es orgásmico.


Seguía viéndolo de la manera menos disimulada del mundo, pero la verdad ya no importaba. Estaba hipnotizada hasta que recibí un chorro de agua en mi ventana. Mis ojos se abrieron como platos al ver que el agua provenía de la manguera con la que Dylan lavaba su auto. Solo me guiño el ojo y rió  al suelo. Sentí como mis mejillas se ponían coloradas y lentamente empecé a agacharme riendo.


-Mía! Me estás escuchando?!- me gritó Marisabel.


-que? Yo? Sisi estaba admirando, digo, escuchando-


-bueno, esque lo que pasa es que no entiendo para que darle tanta importancia a este baile si no tengo con quien ir, a veces siento que nadie me...-


El resto de la conversación no lo escuche... Solo recordaba esa sonrisa pícara del chico de alado. Era, es, perfecto. Y yo sigo aquí, tirada en el suelo viendo al techo pensando en él.


Tendrá compañera para el baile...? Ahj, la tenga o no, por qué me interesa?!

El chico de al ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora