El chico de al lado

Noche de películas

Narrado por Mía

Me besó! No lo puedo creer! Cada centímetro de los labios de O'Brien son perfección, confirmado. Lástima que el beso fue interrumpido, casi muero de la vergüenza!  El punto es que me beso! Todavía siento sus labios contra los míos, Dios que perfección.

-no puedo creer que estés aquí!- dije abrazándolo de nuevo.

-te extrañaba demasiado- dijo mientras ponía su barbilla sobre mi cabeza. - no estoy nada feliz con ese tal Dylan...- dijo terminando el abrazo.

-no somos nada!- dije usando la misma excusa de siempre.

-no son nada?! Los vi compartiendo saliva intensamente en la entrada...-

-ahj fue solo un beso, no tenemos tres hijos...- dije rodando los ojos.

-yo solo sé que no me gusta para nada.- añadió.

-y donde está mi madre?- dije cambiando de tema

-no está, salió a comprar el almuerzo.

-prométeme que no le vas a decir que nos besamos.- dije mientras me sentaba en el sofá.

-tranquila, no diré nada. Total, ese chico se ve que es un idiota.- dijo acostándose en el sofá y poniendo su cabeza sobre mis piernas.

-no es un idiota! Es super dulce y romántico y tiene esa sonrisa que uff y sus pestañas son..-

-shhh- me tapó la boca - dejemos de hablar del idiota, mejor hablemos de a donde me llevaras esta noche.- dijo con su blanca sonrisa.

-estoy muy cansada como para salir...- dije quejosa.

-cansada de besuquearte? No me vengas con excusas estúpidas!- dijo cerrando levemente sus ojos verdes.

-no, cansada de estudiar...- dije rodando los ojos.

-no te creo... Además, yo quiero salir! Conocer chicas! Sexo...digo... Diversión-

-que te parece una noche de películas?- dije sonriente.

-solo si comemos oreos con mantequilla de maní...- añadió

-no sería noche de películas sin oreos...- dije parándome del sofá.

-esta bien, me convenciste- añadió - le diré a tu madre y tía Elaine que salgan a conocer la ciudad.-

-genial!-

Dios, lo extrañaba tanto. Es el único que me entiende, el único con el que puedo pasar haciendo estupideces, estudiando o simplemente comiendo oreos juntos el día entero y nunca aburrirnos.

Subimos a mi cuarto a ver unos álbumes viejos llenos de nuestros mejores recuerdos.

-no puedo creer que usaras pelo hongo!- dije mientras mis lágrimas de risa salían por el costado de mis ojos.

-y tu? Con tus lentes tipo Chilindrina?- dijo riendo intensamente.

-hay no, estas fotos hay que quemarlas!- añadí mientras terminaba de secarme las lágrimas. - y que tal las chicas universitarias- pregunté.