Mi última Coca Cola del desierto.

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Narrado por Dylan.


Salí hacia mi casa pensando en como respondería  a todas las preguntas que mi madre tendría. Ya en la entrada, giré la perilla y de un solo entré. Mi madre se encontraba sentada en el sofá viendo televisión.




-¡pero miren quien apareció! El pobre enfermo- me molestó.





-hola, lo siento por lo de ayer- dije mientras fingía un bostezo.





-¿cómo está Mike?- preguntó cerrando la revista de la cual leía.






-deprimido, enamorado y estúpido- conté tomando del cartón de jugo.





-ya encontrará a alguien que le quiera- pensó en voz alta -¿cuándo entras a exámenes?






-la próxima semana, creo.-




Y se me habían olvidado, los malditos exámenes que ahora son algo más frecuentes de lo normal.





-y cuando piensas estudiar?-





-no lo sé, de seguro estudie con Mia.





-jmm, a Mía- dijo mientras levantaba su ceja derecha





Las malditas cejas ¡todo el mundo puede! Y yo sigo aquí, pareciendo un viejo estreñido cuando lo intento.




-no empieces- le pedí cansado. Mencionar el nombre de una persona del sexo contrario en mi casa es más dramático que cualquier cosa.




-solo digo que parece que te gusta esa chica




-yo, no, ¡no me gusta!- exclamé. ¿Acababa de tartamudear? ¿Enserio? O'Brien, acabas de cagarla imbécil.





-¡Dylan O'brien! ¡Invítala a cenar! ¡Almuerzo familiar!  ¡O por Dios!




Bufé desesperado y la interrumpí, pero ya no podía hacer nada.




-creo que me conoces demasiado bien como para saber que yo no me enamoro.




-te conozco como si fueras mi hijo- bromeó -sé que esta chica te gusta, a mí no me engañas.-




Entré a mi habitación y me acosté en el colchón. En parte tenía razón, Mía me gusta, pero yo no enamoro, nunca me enamoro.





Narrado por Mía


-A si que Dylan quería ayuda con su tarea...- dijo mi madre acercándose a la cafetera



-si... Ya sabes que le cuesta un poco Ciencias y, y Mate- empecé recordando la escena.



Diciendo estupideces en situaciones incómodas desde 1998.



-¿y dónde está Jake?- preguntó -no ha bajado




¡Maldición Jake! No sé dónde está, mucho menos en qué estado...




El chico de al ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora