Capítulo 19-"¿Te creías que te iba a besar?"

5.7K 506 29
                                    

Pulsa la 🌟 y ¡disfruta del capítulo!

Sophie.

Me desperté debido a los rayos de sol que atacaban mi cara con fuerza. Los recuerdos inundaron mi mente del peor tsunami que podía haber: dolor de cabeza. El hecho de que casi acabo con mi vida por un maldito arrebato de celos o yo que sé que es lo que pasó por mi cabeza para subirme a la moto de un desconocido.

Hice la famosa"croqueta" en la cama. No quería levantarme, quería quedarme durmiendo para siempre.

-¡Buenos días cariño!

Mi madre entró con una enorme sonrisa en su rostro y una enorme, también, bandeja con tostadas, café, zumo de naranja y fruta.

No iba a decir que me impresionaba, pues, cuando mi madre se levantaba de buen humor me traía el desayuno a la cama y se pasaba mañana enteras charlando conmigo.

-Buenos días mamá.

-Uy, uy. -dijo mi madre sentándose delante de mi, dejando la bandeja encima de mí-. Pareces muy cansada.

-Lo normal por las mañanas...-le quité importancia, cogiendo la manzana que reposaba sobre la bandeja.

-Tu hermano está abajo con los niños y Kate. -me informó mi madre-. No hace falta que te diga que hay que comportarse ¿verdad?

Rodé los ojos, y mi madre me miró con cara de advertencia.

-Bien, intentaré poner mi mejor sonrisa para Theo.

-Y para Kate.

-Y para Kate. -repetí.

(...)

-¡No me tires agua, Patrick!

Mis preciosos sobrinos se rieron y siguieron. Me gustan los niños, sobre todo mis gemelos preferidos. Juro que no lo digo de ironía. Amo a mis sobrinos. Es lo único bueno que puedo ver en la relación de Kate y Theo.

-Venga chicos, todos a la ducha ¡Pronto estará la comida!

Dijo mi madre, apareciendo por la puerta del jardín. PP's * se quejaron, y a mala gana, salieron de la piscina.

-Mamá cada día está más reguñona. -se quejó arrugando su nariz Patrick.

-¿Por qué cada día esta más reguñona?-quise saber. Yo siempre llevo la razón, algo malo hay con mi hermano y Kate, aunque se vean felices juntos.

-Ellos cada vez discuten más, siempre les oímos decir "el maldito contrato". -hizo comillas Pool con sus dedos.

Estaba claro que "el maldito contrato" se refieren al porqué de su casamiento. Los niños no sabían absolutamente nada de eso, y iba a seguir siendo así. Yo lo descubrí cuando tenía 16 años, y fue por mi hermano, que por aquel entonces era mi mejor amigo.

Cogí una toalla y me envolví en ella para secarme un poco antes de entrar en casa. Pasé por delante de donde estaban mis padres y mi hermano y Kate, pero no les hice caso. Entré a mi habitación pensando en las razones de las peleas de mi hermano y Kate.

Cerré la puerta, y al darme la vuelta, me llevé un susto, pero de los buenos.

-¡¿Qué haces aquí?!-grité/susurré a Justin, que estaba apoyado en mi ventana, fumando un cigarro.

Me miró y sonrió, mirando todo mi cuerpo. Me olvidaba completamente de que estaba en un bikini de flores, y Justin, que era un descarado, no se cortó ni un pelo en mirarme.

-Mis ojos están más arriba.

Ahora sí, me miró a los ojos, y sonrió, seguidamente, tiró el cigarro por el balcón.

-¿Que te pasó anoche?-preguntó, dándose la vuelta.

-Me encontraba mal y me fui.

-No me refiero a eso. -negó-. Te subiste a la moto de Andrew ¿Por qué?

Estaba totalmente intimidada y nerviosa por la mirada que tenía puesta en mí. Era una mezcla de lujuria con muchas cosas más. ¡No estaba en un momento para describirla!

-¿No podía subirme?-un toque de desafío, para que no viera que me podía nominar.

Se acercó a mí. Demasiado. Su mirada nunca apartó mis ojos, y en ese momento, no podía estar más intimidada y nerviosa. Mis piernas flaqueaban, en cualquier momento me iba a caer. Sus ojos te daban tanto miedo y te podían poner tan nerviosa, que no era normal.

A unos pocos centímetros de mí, alzó su mano, y acarició mi costado, acercándome aún más a poder. Iba a besarme, y está vez no era imaginación mía. Giró un poco la cabeza, y yo ya estaba preparada para recibirlo con mucho gusto.

Pero eso nunca pasó.

Su mano abandonó mi costado, y se escuchó una carcajada.

-¿Te creías que te iba a besar? -rió.

Yo, para ese momento, no podía estar más avergonzada, y cabreada. Había sido toda una humillación en mi cara. Mi cara debía estar roja de la furia que sentía e impotencia.

-¡Vete a la mierda! ¡Fuera de mi casa!-lo empujé por el pecho, iba a ponerme a llorar como no se fuera de toda la humillación, vergüenza, cabreo, etc, que tenía.

Me giré, pero rápidamente, el me tomó del brazo, y juntó, por fin, nuestros labios.

Sus labios eran maldita gloria, eran exquisitos. Se movían de una manera tan lenta y sensual, que me hacía querer más y más. Sus labios tomaron los míos, llevando él, completamente, el control del beso. Me tomó de los muslos, a debido que la cosa se ponía más caliente. Me cargó en su cadera y me llevó hasta la cama, acostándonos en ella. Tocaba mi cuerpo de una manera descarada, y me hacía sentirme deseada. Este chico era un sex-simbol, completamente.

-¡Sophie! ¡¿Te queda mucho?!

Nota: PP's* significa sus dos sobrinos, Patrick y Pool. Por cierto, he creado una novela que se llama "Pokemon Go." Es una pequeña historia corta, no tendrá más de 10 capítulos. Siento que hay muy poca actividad en los capítulos, y me preocupa, ¡pero nunca hay que desanimarse!

¿Juegan a Pokemon Go?

¿Juegan a Pokemon Go?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
dangerous ♤ j.bDonde viven las historias. Descúbrelo ahora