CÓMO ESTUDIAR MEDICINA Y NO MORIR EN EL INTENTO

REGLA 2: CONTESTA SOLO LO QUE TE PREGUNTAN Y CUANDO TE LO PREGUNTAN.

      Es tan temprano en la mañana y ya tengo que estar bien despierta. Sin embargo, ayer me acosté a dormir muy tarde estudiando para el examen de hoy, por lo tanto, siento que me desmallaré del sueño.

- Señorita, me da un sándwich de jamón y un jugo de fresa por favor. - Mencionó esa pequeña chica que venía a comprar todas las mañanas. Le digo pequeña no porque sea una niña, sino porque su estatura no es la gran cosa. Y ya eso es mucho decir para una enana como yo.

- Aquí tienes. - Le entregué su pedido con una sonrisa. Ella compraba en mi tienda todos los días, por lo que me era imposible ignorarla.

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      Luego de estar casi toda la mañana tras la caja registradora, me despedí de mi madre y salí de la tienda. Hoy presentaría el examen para ingresar al colegio de medicina más importante del país, el Dra. Elizabeth Geist. No solo me preparé en conocimientos sobre ciencias básicas, sino que también me aprendí de memoria la biografía de la fundadora; después de todo, si obtengo la beca, este será mi hogar por 6 años. Perdida en mis pensamientos caminé hacia el aula designada que ya se encontraba llena de personas. Me senté en uno de los pocos asientos vacíos y me dediqué a esperar mientras analizaba el ambiente. Sin embargo, una conversación llamó mi atención.

- Y tú ¿Por qué quieres la beca en este colegio? - Le preguntó una linda chica de cabello largo y naranja a la otra que se sentaba detrás.

- Sinceramente no me interesa la medicina. - Contestó. - Pero es el sueño de mis padres. Así que por lo menos para divertirme, vine a este colegio de niños ricos.

     Es cierto. Aunque este lugar tiene pocos años de haber sido creado, la gran mayoría de sus estudiantes son hijos de personas adineradas, por eso las personas como yo, debemos luchar para obtener becas.

- Buenos días señoritas. - Mencionó una señora bastante pasada de años, canosa y de ojos oscuros, mientras hacía ruido con un objeto sobre el escritorio. Apenas habló, mire a mi alrededor y en efecto, solo habían mujeres. - Mi nombre es Beatriz Orbegoñez y seré la profesora guía durante el examen, además de la encargada de manejar los nuevos ingresos. Quiero destacar que las plazas disponibles son 2 femeninas y 4 masculinas. Esto se debe a que es la cantidad de espacios disponibles en el dormitorio.

     Con tanto alboroto dejé de prestar atención a las instrucciones hasta que tuve el examen frente a mí. Había preguntas de todo tipo, hasta de historia, y yo que imaginaba que solo serían ciencias duras. Tras 2 horas y 24 minutos logré terminar el largo examen que más bien parecía libro de texto. Como aún faltaban 6 minutos para terminar, decidí entregar el examen y caminar por el colegio. Si no apruebo, quizás sea la única vez que lo vea, así que tras una exhaustiva inspección a la vitrina de reconocimientos, continué mi paseo. Es increíble que a tan solo 8 años de fundado, este lugar ya sea tan reconocido. Al levantar mi cabeza vi la puerta del baño de mujeres y decidí entrar a lavar mis manos. Un hermoso baño blanco con espejos enteros desde la pared hasta el suelo, cerámica resplandeciente y mesones de madera para colocar la cartera o bolso. Realmente increíble. El grifo del lavamanos soltaba agua al pasar tus manos por debajo y se detenía al alejarlas. La tecnología no para de sorprenderme. Me miré al espejo y decidí recoger mi cabello que ya comenzaba a molestarme en la cara; una de las cosas que no me gusta de mi ascendencia japonesa es que es tan liso que se hace realmente difícil el mantenerlo amarrado. Salí del baño y me incliné por el balcón para observar el piso de abajo. Se veía una hermosa fuente en el centro y a su alrededor algunas personas conversando. Sin embargo, no pude continuar explorando porque algo me haló hacia atrás. De inmediato pensé que mis 6 minutos se habían acabado y que un guardia venía a sacarme. Lo se, un pensamiento extremista, pero de esta escuela puedo creerlo todo. Me giré completamente decidida para enfrentar a cualquiera, pero no me esperaba encontrarlo a él.

- Lo siento si te interrumpí, pero si seguías inclinándote podías caerte. - Esos ojos. El color verde nunca había tenido tanto sentido hasta que lo conocí. Este chico había sido mi primer y único amor. Unilateral, cabe destacar. Erick Field. Por supuesto que un hombre como él estaría estudiando en un colegio como este.

- Gracias. - Dije en voz baja y me fui del lugar, ahora con más esperanzas de estudiar allí.

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- Yue, ¿Ya terminaste la maleta? El chofer ya vino a buscarte. - Escuché la voz de mi madre y bajé rápidamente arrastrando el equipaje por las escaleras. Hoy me mudaría a los dormitorios.

- Aquí estoy madre. Te visitaré seguido. - Tras un abrazo me despedí y me subí al auto. La escuela me había mandado un chofer.

      Mi madre me despedía con lágrimas en los ojos, aunque en realidad vendría a verla los fines de semana.

      Al llegar al colegio el conductor se llevó mi equipaje y me señaló el camino al despacho de la directora, lugar donde debía reunirme con los otros 5 estudiantes becados. Al entrar, una sala de espera minimalista con paredes blancas y un enorme sofá vino tinto me sorprendieron. Tomé asiento junto a los únicos dos estudiantes, de los cuales reconocí uno, la chica de cabello largo que hablaba el día del examen.

- Santiago y Jackson. - Mencionó una mujer joven, rubia y con una falda negra ajustada.

      La chica de mi lado y yo nos levantamos. Si yo soy Santiago, asumo que ella es Jackson.

      Al entrar al despacho una hermosa mujer de no más de 30 años estaba sentada tras un escritorio de madera oscura. La enorme pantalla de su computadora apenas me dejaba ver su rostro. Al parecer se percató y la giró

- Bienvenidas. Mi nombre es Meriam Geist y soy la directora del colegio. Ustedes dos fueron las únicas que alcanzaron más de 80 puntos en el examen por lo que fue muy fácil la elección. - El tono de la directora no era rudo pero aún así emanaba un aura oscura. Te hacía respetarla inconscientemente. - Vivirán juntas en la habitación 140F. Nuestro colegio es muy estricto, sin embargo, por ahora hay 3 cosas que deben saber:

1. Todos los estudiantes después de las 6:00 pm deben estar en su torre correspondiente.

2. Está prohibido que mujeres y hombres se mezclen en los horarios comprendidos entre 6:00 pm a 6:00 am, a excepción de las guardias del hospital.

3. Contesten solo que les preguntan y solo cuando se los preguntan.