CÓMO ESTUDIAR MEDICINA Y NO MORIR EN EL INTENTO

REGLA 4: LAS ABREVIATURAS SE CONVERTIRÁN EN TU NUEVA FORMA DE ESCRIBIR.

- ¿Sabes por qué nos hizo venir la secretaria de papá?

- No hables así de ella Aleksandr. Por más estúpida que sea, ella es nuestra nueva madre. – Me regañó mi hermano menor por milésima vez.

- Ninguna nueva oportunista que se case con el viejo enfermo que llamamos padre, merece que la llamemos mamá. – Le reproché a Erick, que a pesar de nacer 6 minutos después de mí, me trata como si él fuera mayor.

- En eso te apoyo. – Dijo sonriendo. – Ahora finge felicidad y entremos a ver que quiere la secretaria.

      Al abrir la puerta, nuestro padre se encontraba sentado en el mueble tras su escritorio, mientras que Faith, su nueva esposa, le servía una taza de café.

- Gracias por esto. – Dije acercándome para agarrar la taza. Le di un sorbo y sonreí mientras me sentaba frente a mi padre. Erick me acompañó.

- ¿Me devolverías mi café?, Shura. – Odiaba que me llamara así. Mi madre era rusa, y allí el diminutivo para las "Aleksandra" era ese. Lo normal sería llamarme Shurik pero a él le gustaba tratarme como niña y eso me enfurecía.

- Beber esto no le hace bien, señor Field. – Contesté en el mismo tono.

- ¿Piensas que un neurocirujano no lo sabría? Sin embargo, dejarlo en este momento no haría mucha diferencia.

- Él tiene razón Aleksandr. – Añadió Erick, nuevamente pensando que era el mayor.

- Dejemos de perder el tiempo. La directora solo nos permitió una hora. Padre, ¿para qué nos llamó?

- Eres un digno hijo mío. – Dijo entre risas. – Los llamé a ambos porque quería que fueran los primeros en enterarse. Faith está embarazada. Van a tener una hermana.

      ¿Qué? ¿Hermana? ¿Cómo se le ocurre a este viejo embarazar a una mujer de esa edad? Esa secretaria bien podría ser mi novia, ¡tenemos casi la misma edad!

      Erick rió y se levantó de la silla. Yo lo seguí. No podía entender la situación, o mejor dicho, no quería.

*~~~~*

      Las clases ya habían terminado, fue terrible, odio que repitan temas que ya sé. Por el resto del día no hubo más actividades porque le darían un paseo por el colegio y el hospital afiliado a los nuevos estudiantes. Yo decidí dormir un rato; después de todo, conozco el hospital de mi padre desde que nací. Ya en la noche, luego de despertar, busqué mi balón de básquet y bajé al patio, sin embargo, el lugar ya estaba ocupado. Me quedé un buen rato observando quien jugaba, mucho más de lo que pretendía. La persona se detuvo para arreglar su cabello y fue allí cuando me di cuenta de que era mujer. Reí. Aunque parezca machista, debo admitir que esperaba que fuera un hombre. La chica miró alrededor, por lo que fingí que acababa de llegar y caminé hasta el aro mientras rebotaba el balón.

- Disculpa, ¿Puedo unirme? – Pregunté mientras detenía el rebote. Era de noche y como se suponía que todos estábamos en los dormitorios, había poca iluminación. No se distinguía el rostro de la chica pero si veía su silueta.

- ¿Por qué no? Me contestó alzando los hombros.

      Comenzamos un 1 vs 1. La mujer jugaba muy bien, a pesar de su baja estatura logró robarme el balón varias veces, sin embargo, por ser más alto, yo pude hacer algunos puntos más que ella. Cuando nos detuvimos para tomar agua, vi mi reloj, marcaba las 11:42 pm. Si no corríamos a los dormitorios tendríamos que quedarnos a dormir en la cancha, pues a la media noche los cerraban. Con una mano tomé mi balón y con la otra el brazo de la chica, la cual me siguió luego de reclamar un poco. Entramos por el pasillo trasero de los edificios para evitar los policías, sin embargo, el profesor Henry venía en dirección a nosotros.

       Halé a la chica hasta el incómodo almacén de productos de limpieza, en el cual, apenas había espacio para respirar. Ella me daba la espalda y yo intentaba concentrarme en la situación, pero sus glúteos chocaban contra mí. La mujer se giró en el reducido espacio y me miró a la cara. Pude ver su rostro, esos ojos rasgados los conocía. De inmediato bajé la mirada y me percaté de que había sucedido lo que intenté evitar, mi miembro estaba erecto. Maldije en mi mente.

- Perdona, normalmente lo controlo mejor. Supongo que estoy produciendo demasiada adrenalina.

      Cuando vi que pretendía mencionar algo, tapé su boca y señalé la entrada. Se escucharon los pasos del profesor alejarse. Empujé la puerta y ambos salimos. Le guiñé un ojo, introduje mis manos en los bolsillos y me fui a mi habitación. Definitivamente una situación muy incómoda.

      Luego de un baño, recordé que había dejado mi balón en el almacén, y automáticamente, recordé lo que sucedió.

      Debía desahogarme con alguien.

*~~~~*

      Entré nuevamente al aula, el día de hoy teníamos clase de bioquímica. Miré a mí alrededor en busca de la mujer, sin embargo no la vi. Reí inconscientemente. El aula era enorme y solo éramos 20 personas. Mi hermano se sentó a mi lado y segundos después una extraña se me acercó.

- Ustedes son lo hermanos Field ¿cierto? Yo soy Rena Meyers, la hija de René Meyers, el cardiólogo del hospital afiliado al colegio. – Dijo con un tono de superioridad.

- Alek Field. – Aunque lo dije con una sonrisa, en realidad siento pena por ella. Necesita mencionar a su padre para lograr sobresalir. Sin embargo me reservé mi comentario y sonreí, quizás ella serviría para pasar el rato.

- Erick. – Mi hermano contestó riendo luego de mirarme. Sabía lo que planeaba.

- ¿Estarán ocupados hoy en la tarde? Es que mi amiga y yo organizamos una P.P. – Las iniciales P.P (Private Party) era una fiesta ilegal en las habitaciones del dormitorio.

- ¿Cuál es tu amiga? - Pregunté mientras miraba alrededor.

- Se llama Zoe. Aún no ha llegado. – Dijo mientras se apoyaba en la mesa de mi escritorio.

- Yo tengo planes. – Dijo mi hermano levantándose de la silla. – Gracias por la invitación.

- Yo si voy. ¿Cuál es la habitación?

*~~~~*

      Salí del dormitorio de mujeres a las 5 de la madrugada. El policía de pasillo estaba dormido, por lo que no fue ningún problema llegar a mi habitación. Decidí recostarme un rato hasta que llegara la hora de ir a clase, pero un mensaje de texto me lo impidió.

Hija del cardiólogo

5:06 am

"Estuvo increíble. T.A.M :*"

      Las abreviaciones pueden traer malentendidos. Algunas veces hay que dejar claro cuando solo quieres sexo casual.

05:10 am

"No opino lo mismo. Ve al hospital, allí pueden medirte la T.A.M (Tensión Arterial Media), pero no te enseñarán como moverte en la cama."

      A veces abreviar las palabras puede causar malentendidos, los cuales, debo aclarar enseguida con la sinceridad que me caracteriza.