CÓMO ESTUDIAR MEDICINA Y NO MORIR EN EL INTENTO

REGLA 5: EL QUE SOLO DE MEDICINA SABE, NI DE MEDICINA SABE.

- Santiago Yue, por favor pase adelante, la directora la espera. – Mencionó la bonita secretaria rubia, la cual tenía un nuevo look.

- Buen día, permiso. – Mencioné mientras entraba a la oficina. Aunque no era la primera vez que venía, aún no podía dejar de admirarla.

- Yue. ¡Bienvenida! Siéntate. – Dijo la directora Meriam sonriendo. – Sin embargo no te tengo una buena noticia...

- Dígame por favor, estoy preparada. – Ya sabía lo que venía.

- Verás... - Agregó tras una pausa. - Han pasado más de 2 meses desde que iniciaron las actividades curriculares y por lo tanto se acercan los exámenes trimestrales. – Asentí con la cabeza para que prosiguiera. – Luego de que eso ocurra, ustedes comenzarán a observar las actividades que se realizan en los centros asistenciales de atención primaria en salud. Sin embargo Yue, tu aún no tienes el uniforme del colegio.

- Sin el uniforme... no puedo asistir a esas prácticas, ¿cierto? – Pregunté aunque sabía la respuesta.

- Estás en lo correcto Yue. Pero eso no es todo – Continuó dándome malas noticias. – La junta directiva ha decidido que para que los 5 estudiantes becados mantengan la beca, deben estar entre los 20 más sobresalientes.

- La clase A... - Agregué deprimida.

     Yo era la estudiante 21.

- La buena noticia es... - Levanté la cabeza de inmediato y miré a la directora expectante. – Aunque no es lo correcto, si quedas en el top 20 en el examen trimestral de la semana que viene, te introduciré en la clase A.

      No tenía palabras para expresar mi gratitud con la directora, no solo encontró la manera de salvar mi beca, sino que también me dio algunos consejos para aprender a estudiar. Instintivamente me incliné; una reverencia de gratitud que se usa en el país natal de mi madre. La profesora Meriam lo merecía, es una excelente directora.

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      Tras pensarlo un rato, decidí irme a estudiar a la biblioteca del colegio; la habitación estaba bastante ruidosa ya que las 3 chicas, incluida Sara, conversaban sobre chicos. Tomé mi libreta de notas y una chaqueta; el aire acondicionado por lo general era bastante fuerte. Antes de irme, una de mis compañeras, Stephany, conocida en los bajos mundos como Tephy, me preguntó.

- Yue, tú quienes crees que son más sexys ¿Los gemelos Field o los hermanos Shewder?

- ¿Quiénes son? El apellido Field me parece conocido. – Agregué con desinterés aunque en mi cabeza aquel apellido hacía eco.

- ¿No lo sabes? ¡Erick y Alek! Ambos están en la clase A. – Agregó la otra compañera de habitación, Ella.

- También están los Shewder. – Respondió Tephy molesta. Estaba bien informada sobre todos a pesar de estar en la clase D – Matías e Isaías Shewder. Ellos también son de la clase A.

- Pues... - Respondí mientras que con la mirada le pedía ayuda a Sara, la cual, solo se limitaba a reír. - No conozco a ninguno pero si están en la clase A, entonces voto por todos. – Sonreí antes de marcharme.

      Todo el camino a la biblioteca pensé en la fama que Erick y su hermano se habían ganado en menos de 3 meses. Desde el incidente en el armario no había vuelto a ver al gemelo malvado; y a Erick, lo espiaba de vez en cuando en la clase de deporte. Si me descubren haciéndolo probablemente vaya a la cárcel.