La Diosa del río es un fanfic inspirado en la telenovela Doña Barbara, queriendo darle otro final a mi Doña, uno merecedor de una guerrera que toda su vida luchó contra el mundo, contra ella misma, y contra sus demonios, y que siempre luchó sola...
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-Es un secreto entre ella y yo ¿Verdad princesita? -agrego acariciando el cabello castaño risado, de la pequeña.
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-Con mami no habrían de haber secretos ¿Verdad pequeña? Pero bueno, ya es hora de la ducha... De los tres, mira nada mas como estan de sucios los niños, Santos... -se queja Marisela con las manos en la cintura-. Vamos todos adentro, es hora de la ducha -alega nuevamente Marisela al ver que ninguno de los tres niños se movieron de sus lugares.
-Pero mamá... -Félix fue el primero en protestar.
-Queremos seguir jugando. -ahora Lorenzo replica.
-Quiero quedarme contigo papi -la pequeña se aferra a mi, quien sabe por que razón, cosa que me extraña.
-Ya he dicho que a la ducha -dice Marisela, de forma tajante-. Vamos Edith -Marisela extiende su mano para llevarse a Edith ¿Cuál es su afán?
-La llevaré yo, Marisela -digo secamente, Marisela se niega rotundamente.
-¿No dijiste que tenias cosas que hacer? Deberías de terminar todo para luego escaparte...
-¡Marisela suficiente! -me levanto y la observo desafiante-. ¿En qué habíamos quedado en la mañana? -pregunto molesto.
-Yo no quedé en nada contigo. -vocifero, los niños algo asustados se refugian detrás mío.
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-Tranquilos, niños. -paso una mano y desordeno el cabello del pequeño Lorenzo y con la otra, acaricio la cabecita de la pequeña Edith, tratando de calmar la situación, Marisela suelta un bufido-. Vamos para adentro, yo les prepararé su ducha -aseguro, ellos rápidamente acatan mi orden, y se adentran a la casa grande. Marisela abre la boca para replicar, pero la interrumpo en seco-. Marisela, no quería llegar a esto, pero se esta saliendo de control... Estoy tratando de llevar la fiesta en paz, pero no pones de tu parte... No podemos seguir asi -fatigado paso mi mano por mi rostro y mi cabello-. Por los niños he tratado de mantener una relación tranquila contigo, pero la verdad... Me estas cansando, Marisela -agrego por último.
