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¡Hola! Yo por aquí publicando un capítulo atrasado lol por si se preguntan, sí, me encuentro mejor y un poco más descansada, por ello terminé de escribir este capítulo así que, espero que lo disfruten. 

Pd: ¡Mucha gracias por las más de 10k de lectura y el 1k de voto! La oportunidad que le están dando a esta historia es mucha, en serio lo aprecio demasiado. 

¡Besos para todos! 

Disfruten su lectura

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Disfruten su lectura

~*~

Ella es la más mala, y le quiero dar de todo.

Llevarla de compras, ya sabes, Yves Saint Laurent.

Pero no, ella no quiere.

Grace ft G-Eazy ~ You Don't Own Me

—¿Puedes parar? —Pregunto, dejando de lado lo que parecía ser una buena hamburguesa. Meghan me observa con una de sus cejas arqueada. Sé lo que piensa, pero simplemente no puedo dejar que mi pensamiento se dirija a ese lugar—. Grant no me gusta, te lo dije. No es mi tipo.

—Lo sé, lo sé —ríe—, tu tipo empieza con Scott y termina en Harford.

Pongo los ojos en blanco, pero el parpadeo de lo que parece ser una cámara me hace soltar un gruñido. ¡Odiaba eso! Tiro de las mangas de mi chaqueta, cubriendo los tatuajes que se asomaban en la piel de mis brazos.

—Detesto todo esto —digo, observando mi hamburguesa—. No puedo comer tranquila desde que ese idiota se marchó de mi casa.

—¿Desde cuándo te molesta la atención? —Ella pregunta—. Oh, espera, ¿desde cuándo te avergüenzas de tu tatuaje? Sé que te molesta el mío, hasta yo lo odio, pero el tuyo tiene un significado.

—Desde que tengo cámaras para cada ángulo de mi rostro —Empujo el plato lejos de mi. Lo que parecía una buena idea, terminó siendo una de las peores. Habían pasado cuatro días desde que Grant se abandonó mi casa, dejando tras su rastro un reguero de periodistas—. No haré el trabajo de Grant, fue suficiente.

—¿Estás loca? —dice, observándome con sus ojos abiertos a tope—. Si el trabajo con la mocosa esa era importante, esto lo sobrepasa por mucho, ¡Es el maldito Grant Harrison!

—Sí, y realmente no me importa —remuevo mi gaseosa con la pajilla que hay en ella, haciendo que el hielo en el interior choquen—. Desde esa noche mi vida ya no tiene momentos personales, Meg —suelto un suspiro—. Tú viste en persona como se puso mi padre cuando me catalogaron como la nueva puta de Harford.

>>No quiero que todo por lo que he luchado este tiempo se vaya abajo por un par de corredores.

Meghan suelta un suspiro, sabiendo que no daría mi brazo a torcer por solo una súplica de ella. Mi trabajo con Grant Harrison había terminado desde el primer instante en que lo encontré en la oficina de Rachel.

BAD GUYS II: DRIFTING. ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora