— Quisiera llamar al estrado a Jeon JungKook.
Y así fue como comenzó todo. Después de que la policía entrara con una orden de registro y me encontraran, a mi padre se le llevó a juicio por varias demandas, entre ellas: abuso de menor, violencia doméstica, estafa, soborno..., entre otras. Mi abogado había reunido a bastantes testigos, casi todos, personas que habían recibido dinero de mi padre. Se les prometió reducir sus condenas por declarar ante el juez y la mayoría lo hicieron, también hubo personas donde lo defendieron a él, pero la diferencia fue abismal.
Por supuesto yo también tuve que declarar, contando toda mi historia, porque era mi vida entera, todo por lo que había pasado empezó a una temprana edad.
Jimin no vino al primer juicio que hubo, dijo que no podía estar en la misma sala que mi padre y también porque Nana le pidió que se mantuviera al margen, más que nada para no buscarse un lío. Aún así siempre me esperaba afuera hasta que acabara y me llevaba al apartamento que habían alquilado él y Nana.
Era curioso como el señor que tenía de abogado venía tantas veces a vernos, la mayoría de las veces para saber como estaba yo y cuando parecía que se quedaba más tranquilo se marchaba. El resto del día me lo pasaba encerrado en la habitación de Jimin, él mismo me traía la comida y todo lo que necesitaba, no quería salir, me sentía extraño y desprotegido. Cada noche Jimin me pedía que durmiera con él, pero me daba miedo, varias veces lo intenté, despertándome en mitad de la noche y gritando corría bajo la cama y me acurrucaba allí. Él dejó de pedírmelo, me dejó dormir abajo, pero se negó a que lo hiciera solo, es por eso que cada noche dormía entre sus brazos y bajo la cama.
TaeHyung y los demás vinieron mucho a verme, me alegraba de verlos aunque me sentía agobiado, quería que se fueran y así volver a la habitación para encerrarme. Me había llevado largos meses encerrado, pero era la única forma de sentirme protegido y resguardado, sin decir que me había acostumbrado.
Todos los días Nana y Jimin me llevaban a ver a una psicóloga la cual frustraba bastante por negarme a dar la sesión sin Jimin a mi lado, al final terminó por desistir y dejar que el pelinaranja estuviera presente en todas las sesiones. Éste era uno de los temas que la psicóloga sacaba, el porqué me aferraba a él, y tras tres días, pudo entenderlo, dirigiendo sus palabras a Jimin:
Fuiste su pilar, su soporte, su fuerza, su única esperanza, pero también fuiste su miedo, tristeza, amargura, e incluso también su desesperanza. Lo fuiste todo, tanto lo bueno como lo malo. La única imagen que mantenía en contacto con su mundo y el exterior. E incluso ahora lo sigues siendo.
Jimin no pudo evitar sonreír débilmente y esconder las lágrimas que las palabras provocaron en él fuertes sentimientos. Tampoco pudo evitar abrazarme e ignorar que no estábamos solos, pero como diría él, "no me importa".
También me llevaban al médico, donde después de dar un pronóstico de mi salud, tuve que seguir tratamientos y seguimientos. Según el doctor tenía anemia; estaba desnutrido, tenía el húmero fisurado y estaba infectado con el HSV-2; herpes anales que me había contagiado mi padre. El doctor se sorprendió de mi resistencia al dolor, me había explicado sobre el tema y hablado del dolor que producían, así como molestia, y bueno, era verdad, pero se me hacía llevadero.
Una semana después la policía llamó dando la noticia sobre el resultado forense de mi madre. Sí, había muerto. La policía la encontró el mismo día que me sacaron de la casa, llevaba algunos días muerta y mi padre en el juicio declaró que se suicidó. La policía no muy segura se dedicó a estudiar el cuerpo de mi madre minuciosamente. Y ahora volvía a estar a su lado; con tan sólo una puerta separándonos.
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Tomorrow [JiKook] [BTS]
Fanfiction❝Jeon JungKook siempre ha sido un chico que ha estado viviendo en una especia de cárcel, donde ha guardado un oscuro secreto casi toda su vida y obedecido cada regla que se le han impuesto, pero un día decide romper con ellas y salir en busca de su...