Maratón 2/3
Ni me cambié de ropa ya que me daba pereza. Era un tanto raro de que por mensajes se puede decir que yo era más ''atrevida'' pues en la vida real nunca podría haberle dicho a nadie a la cara ''¿Y qué piensas hacer para volver a caerme bien?''.
Me peiné bien ya que tenía la coleta un poco despeinada. Y perdí un poco de tiempo comiendo algo ya que le había dicho a Rubén que me pasaría en su casa en una hora, no quería ir antes y parecer una desesperada o algo así. Di unas vueltas y me repetí a mi misma ''_____ no vuelvas a cagarla, no te marches corriendo y no seas una borde.'' Después me dirigí a su casa.
Me abrió en un rato y lo primero que vi fue que llevaba gorra. ¿POR QUÉ UNA PERSONA LLEVA GORRA DENTRO DE CASA?
-¡Hola! - Dijo él.
-Hola.- Contesté y después le quité la gorra.
-Eh, que eso es mío.
-Pues ya no. - Me la puse.
-Pues que sepas que te queda bien.
Tras oír eso me ruboricé y me la quité. La dejé encima de una mesa y ambos nos sentamos en el sofá.
-¿Qué película es? - Pregunté.
-Una de miedo. - Soltó y alzó las cejas.
-Mmmm... así que acabarás muerto de miedo eh.
Frunció el ceño.
-Eso ya lo veremos.
Puso la película y se sentó a mi lado. Yo intentaba hacerme la valiente ya que no me gustaba parecer una miedica al lado de la gente, pero en unos minutos ya apretaba un cojín con fuerza.
-¡No, no abras eso idiota, está detrás! - Chillé.
Ella entró.
-¿Pero por qué son tan idiotas? - Volví a preguntar.
-Mira quien acabó muerta de miedo.
Como todo estaba a oscuras sentí como algo saltaba encima de mi, entonces pegué un grito.
-¿Qué coño pasa? - Preguntó Rubén asustado.
-No-no sé, algo me ha saltado encima.
Él encendió la luz y tras ver que es lo que me saltó encima comenzó a reírse como un loco.
-Eh, que no tiene gracia.- Me defendí.
Cogí a la pequeña gatita que tenía encima de mi y comencé a acariciarla.
-Así que tú me has asustado enanita.- Le dije al gato.
-¡Bien, no soy el único que habla con los gatos! - Chilló Rubén.
No me pude aguantar la risa ya que hizo un gesto raro al chillar eso y cogió a su otra gata en brazos, pero esta empezó a arañarle.
-Yo creo que le caigo mal.- Soltó Rubén.
-No me sorprende, a mi también me caes mal.- Solté.
-Mentira.
-Verdad.
-Mentira.
-Verdad.
Seguimos así un rato hasta que nos cansamos.
-Vale... a lo mejor no me caes tan mal. - Sonreí.
-Lo sabía.
Nos volvimos a tirar en el sofá ya que la película no había acabado. La seguimos mirando, mientras yo abrazaba a la gatita más pequeña. Yo estaba muerta de miedo aunque Rubén también estaba un tanto asustado, seguro que se hacía el machito. Pensé en asustarle.
Rubén P.O.V.
-¿Dónde está el baño? - Preguntó ella.
-No se si te has dado cuenta pero mi casa es igual que la tuya... - Solté.
-Pues también es verdad, ahora vengo.
Ella se fue al baño. Yo quité la película ya que se había acabado. Tras un rato se oía un chillido desde el baño. Me sobresalté del sofá y corrí hacía el baño.
-¿Estás bien? - Chillé tras la puerta.
Ella no decía nada.
Decidí entrar, abrí la puerta y la vi tirada en el suelo. Mi corazón palpitaba rápidamente, yo no sabía que hacer.
-¡_____, dime algo! - Chillé.
-Rubén... ¡Tienes que ver tu cara en este mismo instante! - Soltó, y se levantó del suelo riéndose.
-Joder, ¿pero tú eres tonta? - Chillé. - Me has asustado.
-Esa era la idea, asustarte.
-Joder, que por un instante pensé que te había pasado algo. No vuelvas a hacer esto en tu vida.
-Vale, vale. Lo siento.- Dijo ella.
Yo ya estaba más tranquilo. Me dirigí a mi habitación y ella me siguió. Me senté delante de mi ordenador, mientras ella se tiraba en mi cama y jugueteaba con Raspby.
-Lo siento...- Soltó ella.
Entonces recordé nuestra conversación por mensajes.
-¿Y qué piensas hacer para volver a caerme bien? - Repetí sus palabras.
-Hmm... pues supongo que otro día la película será en mi casa. - Dijo ella.
-Me parece bien. - Solté y le sonreí.
*****
-Bueno, adiós Rubén, perdón por el susto. - Se despidió de mi.
-Adios muyaya. Perdón por el cabreo de esta mañana. - Le sonreí.
Ella me devolvió la sonrisa y se metió en su casa.
_____ P.O.V.
La noche había ido bien. Me acordé de su cara al verme tirada en el suelo y me entró la risa. Le di al interruptor ya que mi casa estaba a oscuras y me dirigí a mi habitación, la cual estaba desordenada. No era una chica muy ordenada que se diga, pero bueno... ya estaba acostumbrada a tener la habitación al revés. Lo único que limpiaba era el salón y la cocina, que es donde iba la gente que me visitaba.
La cama no estaba hecha, pero la deje así ya que era de noche. Me puse mi pijama y me meti en la cama. No me puse la alarma ya que al dia siguiente era domingo. Le envié un mensaje a Marcos.
''Ey Marcos, ¿estás? ''
Esperé un rato pero no contestó, comenzaba a preocuparme...
Rubén P.O.V.
Tras su visita mi salón estaba al revés. Había vasos, platos y el sofá estaba muy alborotado. Había una manta en el suelo, que fue la que tiré cuando oí a _____ chillar. Y bueno, mi cama también estaba algo desordenada ya que _____ se había tirado encima y había dado vueltas con la gata.
Decidí dejarlo todo tal y como estaba e ir a mi habitación. Encendí mi ordenador y me metí a youtube a ver las visitas del vídeo que había subido. Tenía un montón de visitas y comentarios, quería contestar a algunos pero eran demasiados, por eso muchas veces no podía contestar. Lo que si que hice fue contestar a un par de twits que me habían envíado.
Después mire la hora y eran las doce y media. Me metí en la cama, ya estaba bastante cansado.
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Este capítulo es más corto, no se ni siquiera si llega a las dos hojas, espero que si :D
Y bueno, que el siguiente lo subiré dentro de un rato, tardaré bastante ya que quiero darle intriga :D Gracias por leer y CORAZONES GAYS!
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Será cosa del destino. | Rubius y tú |
Fanfiction______ Suárez, abandonada por sus padres nada más nacer. Es criada por las monjas en un orfanato de Madrid. No sabe muy bien que es ser independiente, pero tiene que abandonar el orfanato al cumplir sus dieciocho años. Fuera de aquella cárcel solame...