Será cosa del destino. | Rubius y tú |

Capítulo 43. Vuelo adelantado.

Me quedé en casa de Cris a pasar la noche.

-Oye... ¿Y cuándo os vais? - Preguntó ella.

-En dos días...

-¿Tan pronto?

-Si...

-Bueno tranquila, seguro que les caerás bien.

-Me da miedo que me comparen con alguna de sus ex-novias.

-Eso no pasará.

-Rubén nunca me ha hablado de ninguna de sus ex-novias. Pero... sé que hay una que le ha jodido.

-¿Y tú como lo sabes?

-Oh vamos Cris, esa barrera suya de duro, de cada noche con una distinta, yo eso lo conozco muy bien. Finalmente tendrá que contarmelo.

-Puff... - Ella suspiró. - Hay una ex, yo la conozco...

-¿Qué? ¿quién?

-Se llamaba Lucía, era una amiga mía. Estuvieron juntos una temporada y salieron ambos muy jodidos de la relación.

-¿Qué pasó?

-Yo se la presenté. Al principio se llevaban bien, igual que vosotros dos ahora. Rubén le pidió salir y ella aceptó. Estaba claro que iban a salir, pasaban mucho tiempo juntos. 

-¿Y por qué lo dejaron?

-Empezaron a distanciarse. Ella no estaba acostumbrada a ser la novia de un youtuber tan famoso. Pasaban menos tiempo juntos y finalmente rompieron

Me quedé boquiabierta.

-Y perdimos el contacto después de su ruptura, ella era una muy buena amiga pero en esos momentos yo estaba con Mangel, y no le iba a dejar por nadie.

Sabía que había alguien. Conocía muy bien ese tipo de personas. Cada noche con una intentando olvidar a la que te hizo daño. 

-No le digas que te lo he contado.- Dijo Cris.

-No tranquila. 

El resto de la noche fue mejor. Trajo dos tazas de chocolate caliente y echamos unas partidas en la wii. Ella me ganó en casi todas pero bueno... la intención es lo que cuenta. Aunque... debería aceptar que era un poco competitiva. Y cuando ganaba se lo echaba en cara.

-¡He ganado! ¡he ganado! - Comencé a chillar y a saltar.

-Que si pesada. - Dijo apagando la consola. - Anda, vamos a dormir.

Ella tenía una cama de matrimonio y al ser una chica me daba igual dormir con ella. Aunque tardamos bastante en conseguir dormirnos ya que no dejábamos de decir tonterías.

*****

-¡Baja las persianas! - Chillaba yo tapándome con la almohada.

-¡_____, despierta de una vez! ¡tengo que ir a trabajar!

-Ah es verdad, que tú trabajas. - Comencé a reírme.

Ella me lanzó un cojín. Comencé a sacar ruidos de ''ballena pariendo'' mientras daba vueltas por la cama. Finalmente me caí y me levanté.

-Voy al baño. - Me metí en su baño.

Me lavé un poco la cara, y me peiné el pelo. Cogí mi teléfono del bolsillo y tenía cinco llamadas perdidas de Rubén. Le llamé.

-¿_____? - Dijo sobresaltado.

-Si, ¿qué?

-¿Dónde estás?

-En casa de Cris, ¿qué pasa?

-Pues que no me coges las llamadas y que vives en el piso que tengo al lado, y casualmente no estabas en casa. Y tu novio, osea, yo, estaba preocupado

-¡Oh, que mono! - Chillé de golpe. - Ya voy pesado.

Colgué.

-¿Qué pasa? - Preguntó Cris.

-Nada, que me reclaman. - Sonreí. - Después te llamo si eso, ¡adiós!

-¡Adiós!

Volvi a mi piso sonríente, muy sonriente. Me encantaba que se preocupen por mi, es un sentimiento que no sentía muy a menudo. No tardé en llegar, y no pasé a mi piso, llamé al suyo. Me abrió rápidamente.

-Tu novia, osea yo, ya está aquí.- Sonreí.

-Podrías avisar y eso...

-Bueno, ya estoy aquí. ¿Qué pasa?

-Eh... - Se rascaba la nuca.

-Rubén... - Cambie mi sonrisa por una cara seria. - ¿Qué pasa?

-El vuelo se ha adelantado...

-¿Adelantado? pero si era mañana.

-Ya... pues es esta noche.

-¡¿Qué?! - Chillé que me oyeron los vecinos.

Él me cogió del hombro y me hizo un gento para que pase dentro, ya que estaba en la puerta.

-No me puedes hacer esto Rubén. ¡No-no puedes!

-No es mi culpa. Me han llamado de la compañía de vuelos, al parecer mañana no pueden y era hoy o dentro de dos semanas.

-¡Pues dentro de dos semanas! - Chillé.

-No digas tonterías. 

-Joder Rubén...- Dirigí mi mirada hacía la ventana.

-Mírame. - Dirigí mi mirada a sus ojos. - Les caerás bien, creéme. 

-Vale... - Sonreí. Él me besó.

Me contó algunas cosas sobre su familia, sinceramente, a la que quería conocer era a la hermana pequeña. Me encantaban los niños, pasaba mucho tiempo con niños en el orfanato. 

-Iré a hacer mi maleta.

-Vale.- Sonríe. - Date prisa, en un par de horas tenemos que ir al aeropuerto.

-Vale.- Le di un último beso corto.

Me dirigí a mi habitación. No estaba enfadada, estaba nerviosa. Y no dejaba de pensar en Lucía, su ex-novia. Seguramente sus padres ya la conocían, ¿y si me comparaban con ella? Rubén no podía enterarse de que yo sabía quien era ella, con suerte no se me escapaba.

Saqué la maleta que tenía en el armario y la puse encima de la cama. Esa misma maleta la usé meses atrás cuando salí del orfanato, cuando me independicé. Llegué a ese piso sin nada, y en ese momento sentía que lo tenía todo. Sonreí inmediatamente, era increíble ver lo rápido que pasaba todo. 

Guardé dentro la ropa que más solía usar, incluído el jersey del bigote. Cuando iba a salir de la habitación para ir a la casa de Rubén vi la gorra que él me había regalado. La cogí y la metí en la maleta, ¿por qué? ni idea.

Fui a su piso y llamé al timbre, no tardó en abrirme.

-¿Preparada? - Preguntó él.

-No. Pero no puedo hacer nada.

*****

Ya estábamos delante del avión, entregando nuestras maletas. Ambos subimos, cogidos de la mano. Nos sentamos en nuestros asientos. 

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Holaaa holitaaa vecinitos (?) okno... 

Bueno, decidí adelantar el vuelo ya que también quiero adelantar la novela. A ver, ya voy por el capítulo 43 y no quiero decir que quede poquísimo, pero debo ir pensando si haré segunda temporada o no, ya que el final sería totalmente distinto. No quiero hacer cien mil capítulos así que tampoco queda tanto. Pero aún queda, no os alarméis e.é.

Bueno, en el próximo capítulo _____ conocerá a los padres de Rubius, ¿qué creéis que pasará? ¿le caerá bien a los padres de Rubius o no? Dejadlo en los comentarios de allí abajo :3

Voten, comenten y corazones gays ♥