"Capítulo 52"

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(No os asustéis si he cambiado algo xD)


Era el minuto 15. Había una falta, iba a tirar Toni Kroos. Estaba nerviosa. Casi rezando. Movía mi pie nerviosa.

Kroos tiró. Cayó en manos de Bale y luego a Ramos. Después todo sucedió rápido. Él marcó gol.

Di una patada a la valla que tenía delante y maldecí. Mi mente estaba bloqueada.

Miré a todos los jugadores. Estaban con la mano levantada indicando fuera de juego.

En las pantallas, estaban repitiendo la jugada y era verdad, era fuera de juego.

Me levanté y comencé a gritar. El árbitro no hacía nada. ¿No veía que era fuera de juego?

—¡Eso es fuera de juego! —grité—. ¡Eso es fuera de juego! —repetí en inglés, por si acaso el árbitro era bilingüe.

El juego siguió, hasta el minuto 47, por lo dos minutos de añadido que añadió el árbitro. Ningún equipo marcó gol, ni se hicieron una falta ni nada. Hubo un cambio, Augusto por Carrasco, así que jugaría en la segunda parte.

Acabó el partido, ganando el Madrid. Encima que el gol fue fuera de juego.

Cogí mi móvil y le mandé un mensaje a Carrasco.

Silvia: Como tú dices, todo va a estar bien. Seguro que tú vas a marcar un gol. Eres un buen jugador.

Se lo mandé y suspiré mirando hacia arriba. Las lágrimas inundaron mis ojos. Vibró mi móvil. Lo miré y era una llamada. Era él.

—Dime que quieres —murmuré.

¿Estás llorando? —dijo con el mismo tono que yo.

—Puede.

Rió.

Te necesito —susurró.

Me quité las lágrimas y suspiré.

—Vais a ganar. Tengo un presentimiento, y mi intuición nunca falla.

Puede que hoy sí.

—¿Por qué eres tan negativo? Todos habéis hecho mucho esfuerzo para llegar hasta aquí. Vencer a grandes equipos, sin ir más allá el Barcelona. Tenéis confianza en vosotros mismos y entre vosotros. Sabéis cuando necesitáis vuestro apoyo. Nunca dejéis de creer —remarqué bien lo del final

Me quedé en silencio, al igual que él.

Gracias Silvia por darnos esperanzas —dijo Gabi.

—¿Estoy en altavoz? —pregunté.

Se oyó un asentimiento de parte de todos.

—¿Habéis escuchado el discurso?

Enterito —dijo Koke riendo—. Gracias Silvia.

Todos me fueron agradeciendo.

—No es nada chicos. Sois mis ídolos, y bueno... Algunas veces me imagino diciendo algunos discursos como estos —reí avergonzada.

Rieron y sonreí.

—Bien, os dejo. Seguro que tenéis que hacer cosas.

Se despidieron y colgué. Minutos después, comenzó la segunda parte.

En el minuto 48, nada más empezar la segunda parte. Pitaron un favor del Atleti. Lo iba a tirar Griezmann.

—¡Vamos Antoine! —grité.

Amor por el fútbol   〈Yannick Carrasco〉Donde viven las historias. Descúbrelo ahora