Dean
Abrí los ojos por décima vez y me removí en la cama buscando una buena posición para dormir, suspiré con fuerza y abracé una almohada, cerré los ojos y me quedé unos segundos así hasta que volví a abrirlos nuevamente. No podía dormir, llevaba casi dos horas sin poder conciliar el sueño.
Me senté en la cama y abracé mis piernas, miré hacia la ventana, por los pequeños espacios que las cortinas no cubrían vi que afuera estaba lloviendo, me levanté de la cama y tras ponerme mis pantuflas salí de mi habitación, en medio de la oscuridad caminé hacia la cocina, todos estaban dormidos, di un respingo al escuchar un fuerte trueno, me apresuré en llegar a la cocina, con rapidez prendí la luz, tomé un vaso de la encimera, saqué la leche de la nevera, llené el vaso y lo metí al microondas, en cuanto supuse que estaría tibia lo saqué y me la bebí rápidamente, me sobresalté al escuchar otro trueno.
—Dean —el vaso casi vacío cayó de mis manos por la sorpresa al escuchar a Dominik hablar detrás de mí, temblando levemente me giré y lo miré mal mientras me limpiaba la leche que se me había corrido por la barbilla, él se rió por lo bajo.
—Casi me matas —dije recogiendo el vaso del piso.
—Lo siento, ¿no puedes dormir? —preguntó comprensivo, asentí lentamente observando como tomaba el trapeador azul que había en una esquina y limpiaba la leche del piso.
—¿Y tú? —pregunté en voz baja, él suspiró y levantó su mano derecha, me fijé en que traía unos papeles.
—Además estoy preocupado, Dylan no ha llegado, dijo que saldría sólo un rato... —dijo frunciendo el ceño, arqueé las cejas y negué varias veces mirándolo con compasión. Estoy seguro de que no ha dormido por eso.
—A mí no me sorprende que no haya llegado, está con Will, así que deja de preocuparte y de esperarlo —respondí mirándolo a los ojos, él suspiró con fuerza y asintió forzadamente, negué, esta noche no dormirá nada. En cuanto Dylan dijo que saldría todos supimos que iría a casa del director.
Los dos nos quedamos en un extraño silencio, me removí un poco incómodo y nervioso cuando él se quedó mirándome de una forma rara, con disimulo tiré hacia abajo de mi camisón de flores, el cual me quedaba un poco más abajo del trasero, lo cual de repente me pareció demasiado corto al sentir la mirada grisácea de Dominik recorrer mi cuerpo.
—¿Qué? —pregunté enfurruñado, me sentí perdido al notar su mirada suavizarse cuando me miró a la cara, se rió un poco y negó.
—Sabes Dean... antes me gustabas mucho —abrí los ojos como platos al escucharlo y me quedé incrédulo, él me sonrió y asintió con calma. Habla en serio... pero, ¡¿cómo?!
—N-No lo s-sabía —susurré aún sorprendido y muy nervioso, él hizo una pequeña mueca y yo lo miré con arrepentimiento. —L-Lo siento... —me disculpé rápidamente, él se encogió de hombros.
—No importa, ya te superé, supe que jamás te fijarías en mí al notar como mirabas a mi padre...
Sentí que se me paraba el corazón y se me helaba la sangre, negué lentamente y me llevé una mano a la boca al verlo asentir, él estaba mirándome con curiosidad. No puede ser...
—Quizás los demás no se daban cuenta pero yo notaba cada cosa en ti, ¿crees que no me fijé en cómo te sonrojabas, en lo nervioso que te ponías y en lo ilusionado que te veías cada vez que él te hablaba o se acercaba a ti? —Dominik se había acercado lo suficiente como para hacerme sentir acorralado, estaba asustado y sorprendido por su confesión, retrocedí varios pasos al ver que seguía acercándose.
Pasé saliva con dificultad al sentir la encimera detrás de mí, Dominik se detuvo a unos pocos centímetros de mi cuerpo, en sus ojos grises había diversión, en cambio yo me sentía muy asustado.
ESTÁS LEYENDO
Mi Director [Homosexual/Gay]
Fiksi RemajaDylan Brown es un chico de 18 años, hijo del primer ministro de Reino Unido. Una noche, el mejor amigo lo reta a ir a un bar gay, en dicho bar, Dylan se pasa de copas y termina acostándose con Will Collins, un sexy hombre de 24 años. Dylan pensó que...