Capítulo 48

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Pov Kimberly

Las horas corrían tan rápidamente como si se tratase de un maratón. Mi maleta color rosa estaba lista esperándome en una esquina cerca de la puerta de salida en la habitación. Mirando mis manos cuáles temblaban con el móvil entre mis dedos volví a mirar la hora.

Justamente el reloj marcó las siete en punto a la vez que tres golpecitos en la puerta avisaron su llegada. ㅡ Ya es hora. ㅡ Susurré para mi misma. Ya no había marcha atrás, al abrir esa puerta tendría qué olvidarme de Wade, enterar todo lo que una vez fue un "nosotros" y con ello también olvidaría mi trabajo. Una vez recupere a Brittany buscaré otro trabajo y seguiría mi vida, olvidando todo sobré la familia Tomlinson.

Nerviosa pase mis manos en los mangos de la maleta, mis piernas temblaban incapaces de moverse unos pasos más hacía adelante.  Tres golpes se volvieron a escuchar en la puerta de la habitación seguido de la ronca voz de Nicolas tras ella. - Soy yo. Sal ya, se hace tardé. - Tome el pomo de la puerta, antes de abrir está suspire varias veces intentando tomar el valor para salir lo antes posible y darle la mejor cara a Nicolas.

Mis manos sudaban pero aún así me di el valor sin saber de dónde sólo giré él pomo cerrando mis ojos en la acción. Olfatee rápidamente su olor varonil y el aire frío de la casa hizo efecto de inmediato erizando mis vellos en los brazos. Abrí mis ojos de golpe al sentir sus manos sobre las mías las cuáles aún sostenían con fuerza la maleta. -Llevaré esto por ti. Bajemos. - Susurró para luego hacer énfasis hacía las escaleras.

Asentí acercándome a la escalera y bajar estás con cuidado, estaba nerviosa, moría del miedo sin saber muy bien porque exactamente era. Quería solo correr y alejarme de todos pero si lo hacía no resolvería nada además lo único que importaba era mi hermana, Nicolas era la única manera para tener la esperanza de traerla de nuevo a mí lado.

Al llegar a la planta baja esperé por Nicolas ya que no sabía exactamente hacía dónde dirigirme. Me fijé en las ventas en cristal qué daban hacía el jardín, estaba lloviendo la llovía se veía caer y varías gotas se deslizaban por él cristal. Una de las ventanas abiertas qué daban caminó hacia la cocina estaba abierta por lo que el aire entraba moviendo las cortinas de la puerta en cristal qué daba a la piscina.

Donde estaba parada obtenía una buena vista de la casa, podía ver desde la biblioteca, el despacho hasta la cocina y la salida hacía la alberca. Todo el tiempo que llevó trabajando en esta casa y nunca había observado la mansión desde el ángulo en que lo hacía.

Iba a extrañar todo lo qué mis ojos observaban con tristeza, pues se sentía realmente lamentable marcharme de la casa de esta forma y sin ni siquiera despedirme de los chicos. Pensando en ellos recordé que Nicolas iba a encargarse dé ellos ojalá y los alejara de Wade y los llevará con él.

ㅡ Vamos ya. ㅡ Hablo al estar aún lado de mí y caminar hacia la salida. Sonreí con tristeza dándole la ultima mirada a los adentros de la casa. Nicolas abrió él pomo dejandome salir antes que él. El frío azoto rápidamente en mi cuerpo, la navidad ya estaba cerca por lo que era obvio que el invierno sé estaría haciendo notar. Me arrepentí inmediatamente por haberme puesto una camisa de tirillas en una noche tan espeluznante.

- Espera aquí traeré el auto. - Antes de obtener una respuesta él salió corriendo bajo la llovía subiendo a su flamante coche negro. Aparcó el auto justo en frente dónde yo estaba por lo qué rápidamente tomé la maleta para avanzar hacía el auto cayendo las gotas heladas sobre mi cuerpo. Nicolas abrió la puerta desde su lado dejándome entrar al coche después de dejar la maleta en el piso del asiento del copiloto tome asiento pero antes de cerrar la puerta escuché alguien llamar mi nombre por lo qué rápidamente miré hacia la puerta principal. Maite estaba allí.

¿Me enamoré de un narco? FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora