Capítulo 23: Hormiga Atómica.

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Después de dejarse dormir nada más tocar la cama, el martes cuando llegaron, Marta ni se enteró de cuando Àlex volvio a la habitación.

Y hoy ya viernes se ha quedado en el hotel porque pasa de estar estorbando por el circuito.

Va enterándose de como van quedando los chicos por Twitter. Hasta que si hermana la llama ya casi a la hora de comer.

-Dime Cristina.
-¿Te has enterado de lo de Marc?
-¿Se ha caído?
-No que va. No ha podido hacer la FP2 por una gastroenteritis.
-¿Enserio?
-Sí. Lo acabo de ver. ¿Te he despertado?
-No. Ya llevo mucho despierta.
-No has dormido pendiente de los entrenos. Esa es mi hermana.
-Sí. Dejémoslo en eso. Luego hablamos Cris.
-Vale. No estudies mucho.
-No lo haré tranquila.

Y no lo va a hacer. A este paso la echan de la Universidad. Ya buscará como hacer para aprobar milagrosamente después las asignaturas. Pero ahora ya está aquí.

Tocan a la puerta. Supone que es Àlex. Aunque le parece pronto. Va a la puerta y abre. Y no se encuentra con otro que con Marc.

-Vaya pero si es La Hormiga Atómica.
-Hoy estás graciosa pistolera.
-Qué Àlex y yo no somos nada.
-Ya. ¿Estás aburrida?
-¿Has venido para eso hormiguita? ¿Para hacerme compañía?
-En verdad no. Pero ya que estoy aquí.
-Ya me ha contado mi hermana lo de la gastroenteritis. ¿Estás mejor?
-Más o menos. ¿Que hacemos?
-No se me ocurre nada.
-Mi habitación está vacía.
-No me voy a liar contigo.
-No iba por ahí tranquila.
-Vale.

Coge el móvil y sigue a Marc a la otra habitación. No sabe que diferencia puede haber de estar en una o en la otra. Pero prefiere no protestar y hacer caso al pentacampeón del mundo.

Pasan la tarde hablando y haciendo tonterías. Àlex no hace aparición ninguna durante la tarde y cuando llega la noche y la hora de cenar tampoco hay señales suyas. No saben dónde se ha metido. Aunque tampoco lo echan en falta.

Cenan ahí en la habitación entre risas y fiestas también. Como llevan haciendo toda la tarde.

-¿Sabes algo de Àlex?
-No. No me ha hablado ni nada. Pero si te aburres  puedes ir con él. Es tu...
-Amigo.
-¿Te gusta?
-Es buen chico y eso. Pero no quiero un novio ahora, Marc.
-Vale.

Siguen hablando y comiendo. Pasando bien el tiempo juntos.

-Ya sé porque no quieres nada con mi hermano.
-¿Sí? ¿Por qué?
-Porque no puedes olvidarte de mí.
-Muy buena esa.
-Eso es un "Es verdad Marc, me muero por ti", ¿no?
-No. No me muero por nadie.
-Vale, vale.

Marta se ríe. Vaya chico más... Vaya chico. Lo ve haciendo maniobras con el móvil y se lo quita de las manos.

-Deja que te saco yo la foto hormiguita.
-Vale.

Se coloca bien y Marta se ríe al ver como se ha puesto. Pero le saca la foto. Y una vez sacada de queda un momento mirando la fijamente. Algo le llama la atención pero no sabe el qué.

-¿Te has enamorado ya?
-No. No lo haría nunca cabra loca.
-Lo harás. Créeme.
-No estés tan seguro.
-¿Me devuelves mi móvil?
-Claro.

Le da su móvil y se tira en la cama del chico. Está cansada y Àlex no da señales de vida. Suena el móvil. Instagram y Twitter. Marc.

Recuperando fuerzas para estar al 100% mañana! 💪Regaining strenght to be at 100% tomorrow! #MalaysianGP

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Se queda un rato mirando la foto de nuevo. Con una cara de idiota increíble.

-Al final va a ser verdad que le quito la novia a mi hermano.
-¿Qué?
-Estás babeando. Y me supongo que lo que ves en mi foto.
-No estoy babeando.
-Vale. Pero te gusta la foto.
-No lo voy a negar. Soy buena fotógrafa.
-Será por eso sí.

Mira la foto y luego a Marc.

-Oye bicho.
-Dime cuñi.
-Estás fuerte, ehh.
-Sí tú lo dices.
-Lo estás. Bastante.
-¿Quieres que vaya ahí contigo?
-No vamos a hacer nada Marc.
-Claro que no. Àlex me mataría después.

Y sin esperar respuesta se tumba con Marta cuando está se está quedando medio dormida.

-Marc... No.
-No voy a hacer nada. Tú tranquila.
-Vale.

Siguen así. Hablando un poco. Marta con los ojos cerrados pensando en este tiempo desde que se chocó con Àlex. Nota a Marc cerca, cada vez más cerca. Abre los ojos para ver lo que está haciendo y lo ve.

Al otro lado de la puerta se encuentra Àlex. Está preocupado por Marc y por Marta. Supone que Marc estará mejor. Pero Marta no sabe donde está. No quiere molestar a Marc. Tiene que descansar. Pero también quiere y necesita hablar con él. Para saber como sigue y para hablar de algunas cosas. Pero no tiene manera de entrar.

Bingo. En cuanto ve a una de las de la limpieza les suelta la típica trola de que se le ha quedado la llave. Hecho. El tema está una vez entra. Él esperaba encontrarse a Marc sólo. Tranquilo y descansando después del día chungo que ha tenido. Pero no. No está sólo, y lo que se dice descansando tampoco.

Ni Marc ni Marta se dan cuenta de la presencia en la puerta de la habitación. Sólo están atentos uno al otro. El piloto tiene a Marta acorralada debajo de él. Aunque ésta no opone resistencia. Así que se deja llevar y la besa. Beso que ella sigue sin problemas. Hasta que dejan de besarse y puede ver a Àlex en la puerta. No aparta a Marc. Pero porque no sabe como reaccionar. ¿Cuánto lleva Àlex ahí?

-Marc para.
-¿Tan poco te ha gustado?
-Àlex está mirándonos desde la puerta y he de decir que no está muy bien.

Y enseguida se aparta y se levanta de la cama para ver que exactamente su hermano pequeño los está mirando.

-Àlex...
-¡NI SE TE OCURRA HABLARME MARC!

Y se va dando un estampid. Aquí va a arder Troya. Y esto no ha sido nada aun. Ha sido culpa de él. No debería fiarse de nadie. Ni de nada. Y menos de su hermano.

Me Llaman Pistolas (MLLP 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora