Me Llaman Pistolas (MLLP 1)

Capitulo 69: Jerez, ansiedad y mucho reposo.

Los días en Jerez siguieron pasando con Marc algo más relajado con el tema y más centrado en el fin de semana. Y ya estamos a sábado. Falta la Qualy de Moto2 y Marta está de los nervios. Àlex lleva todo el fin de semana quedando 1°. Pero ahora queda lo más importante. Marc no ha tenido tan buenos puestos hasta este mismo día que ha quedado 4° en el FP3, 1° en el FP4 y 2° finalmente en la Q2.

Marta no puede mirar a la pantalla. Cada vez que mira tiene miedo a ver caer a Àlex. Y no es que no confie en él, es que nunca sabes lo que puede pasar.

Y tras mucho sufrimiento de Marta, Àlex consigue su 1ª pole en Moto2.

Marta no se siente del todo bien después de tantos nervios y en vez de ir a felicitarlo se va al motorhome de los chicos a esperarlos porque ahora tienen la rueda de prensa y para poder calmarse un poco.

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e tantos nervios ha empezado a marearse. Y acaba vomitando lo poco que le obligó Marc a comer. Se tumba un rato y llega Àlex a saber cuánto tiempo después preocupado enseguida.

-¿Estáis bien?
-Sí. Solo estaba un poco nerviosa con la Qualy. No quería que te pasara nada.
-Vale mi amor. Hazme sitio que quiero pasar un rato contigo y el peque.
-Claro. Por cierto, felicidades por la pole amor. Te la merecías mucho.
-Tuya.
-No. Yo no me merezco eso ni nada.
-Pues tuya pequeñín.

Y es decir eso y Marta echarse a llorar de la emoción.

-Marta. Marta no. No me llores amor.
-Lo siento. Me he emocionado. Ya dejo de llorar.

Àlex la abraza a él y consigue calmarla. Pero Marc acaba rompiendo el silencio sepulcral que había a gritos.

-¿Pero que te ha pasado a ti ahora? ¿Estás bien?
-Siii. ¿Tú?
-Más o menos. ¿Os apetece hacer algo?

Àlex le mira con cara de mala ostia y pasa de Marc.

-Ahh, que ibais a celebrar la pole... Os dejo tranquilos entonces.

Y no da tiempo a decirle nada más a Marc. Decide desaparecer y dejar solos a su hermano pequeño y a su cuñada. Bueno y a su pequeño y diminuto sobrino. Ese al que ya está buscandole moto. Y eso que le quedan bastantes meses aún para nacer.

Mientras aún en la cama tumbada Marta mira a Àlex preguntando que tiene de verdad lo que ha dicho su cuñado.

-Eso que ha dicho Marc...
-No quiero hacer nada de eso Marta. Solo quiero estar contigo y mi hijo tranquilamente. Sin que nadie me moleste.
-Te quiero.
-Y yo a ti princesa. Muchísimo.

Marta intenta no llorar de nuevo. Que Àlex le diga esas cosas le hace ponerse sencible a la mínima de cambio.

Y entre mimos y lágrimas llega la noche y tras cenar se van ambos a la cama temprano. Mañana será un gran día para todos. O eso parece.

Por la mañana Àlex se despierta y le da pena despertar a Marta pero lo hace. Quiere tenerla cerca antes de salir a pista.

Y cuando se va acercando la hora de la carrera le pide a Marta que vea la carrera con Marc por si pasa algo con los nervios.

La carrera empieza bien. Pero a Marta cada vuelta se le hace eterna viendo a Àlex en la 1ª posición. Prefiere no mirar a la pantalla o qué no le enfoquen a él. No quiere verle caer como en Argentina. No podría aguantar algo como eso de nuevo. Verle tan destrozado y justo en el último momento de la carrera.

Marc no se separa de ella ni un solo momento aunque tendría que estar más atento a su carrera que es en nada. Pero su hermanito le ha dejado a su cargo a Marta y a su sobrino y tiene que ocuparse de calmar a su cuñada para que no pase nada malo.

Marta no está bien. Lo nota. Casi no puede respirar. Pero intenta tranquilizarse para que Marc no lo note y no se la lleve a ningún sitio. No quiere perderse la victoria de su chico.

Y una vez que Àlex pasa por meta como ganador del Gran Premio Marta consigue quitarse un peso de encima pero sigue mal así que cuando Marc la intenta arrastrar con ella a parque cerrado le dice que vaya él que ella prefiere quedarse ahí.

Marc hace caso sin preguntar y va a felicitar rápido a su hermano. 1ª victoria en Moto2 para su hermanito. Le ha costado, pero al fin está dónde tiene que estar.

Pero al volver ya más tranquilo al Box se da cuenta de que su cuñada no está bien para nada. Le cuesta mucho respirar y al entrar le ve un gesto de dolor en la cara.

-Tú no estás bien.
-Qué sí.
-No me mientas. ¿Me crees idiota? ¿Acaso crees que no veo que no puedes respirar bien y que algo te está doliendo? Cómo le pase algo a ese niño Àlex me mata. Así que tú te vienes conmigo a la clínica móvil.
-Marc que no hace...
-¡QUÉ NO ME RECHISTES MARTA!

Y así era imposible decirle que no a Marc así que le hace caso y le sigue hasta dónde la lleva y ahí no la deja hasta que se asegura de que está en buenas manos y no sin antes intentar contactar con Àlex para que se de prisa después de la rueda de prensa. Él tiene la carrera y no puede tardar mucho más. No quiere dejarla sola pero no le queda de otra.

Àlex sale de la rueda de prensa de la carrera de Moto2 y al llegar al box ve el mensaje de Marc y ni cambiarse. Se corriendo a dar con Marta. A la que encuentra llorando.

-¿Qué ha pasado? ¿Estás bien?
-Sí.
-¿Y el...?
-Ahora sí.

¿Ahora sí? Àlex empieza a darle vueltas a la respuesta de su chica. Se acabaron las carreras en directo para Marta. Los nervios no le vienen nada bien.

Y como Marta ya no es capaz de decir una palabra más acaba enterándose de otro modo que por poco no se queda sin hijo y que a Marta más le vale tener un reposo importante. Lo malo es que justo ahora empiezan los exámenes en la universidad. Y eso son más nervios para ella. A último remedio se quedará con ella en Madrid para que no se agobie por los exámenes.