Capítulo 70: 1...2...¡3!

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Observo con cuidado a cada persona en el aeropuerto, con esperanzas de ver a Nicole, me desespero al no verla, coloco cara molesta.

-¡Hija, no te preocupes, ya vendrá!-Mi madre sin preocupación me mira con un poco de gracias, lo cual no logro entender porque, si esto es algo serio.

-No la veo-Murmuro-¡¿Y si no viene?!-Mi madre echa a reír, la miro seria sin entender la razón de sus risas, dejo de verla y prosigo en buscar a Nicole entre las personas. Mi celular vibra, veo la pantalla, y el "Mensaje nuevo de Nicole" hace que llame mi atención para luego desbloquearlo y abrirlo rápidamente.

Nicole: ¿Me ves?, estoy con una blusa color naranja.

Observo de nuevo en busca de algo naranja, no veo nada, me molesto, casi parezco Hulk, hasta que una chica corriendo con una sonrisa se nos acerca, entrecierro los ojos para ver el color de su blusa...

¡Naranja!, es Nicole.

No tardo en correr, e ir a abrazarla, cuando nuestros cuerpos chocaron no faltaron las lágrimas y las sonrisas, enserio la extrañaba. No nos separamos después de cinco minutos, observo su rostro, que reflejaba sus ojos cristalizados, tenía las mejillas rojas, eso sucedía cada vez que lloraba, y en sus labios, tenía una sonrisa que nadie se la quitaba. Un tiempo mirándonos, nos volvimos a abrazar, pero más fuerte.

-Te extrañé-Murmura Nicole en mi oído.

-Yo también-Nos separamos-¡No me vuelvas hacer esto estúpida! me abandonaste por meses-Ella ríe y asiente mientras limpia el rabillo de sus ojos.

-Hola señora Cheilers-Nicole se acera a mi madre con los brazos abiertos, y al llegar, la abraza, pero fue corto.

-Nicole, querida, bienvenida-Muestra una sonrisa dulce como siempre.

-Muchas gracias.

Nos fuimos del aeropuerto directo a casa, en el camino no pudimos contarnos nuestras cosas, ya que mi madre estaba, y nos sentiríamos incómodas, mi madre aprovechó e realizó miles de preguntas del país, y Nicole, respondía con afirmación.

Al llegar, antes de que la puerta se abriese, cerré los ojos de Nicole con mis manos, y al pasar, caminamos para dejarla en un lugar dónde pueda ver con firmeza toda la decoración que hicimos para ella.

1...2...¡3!

-¡Oh!-Nicole cierra su boca con sus manos, su mirada se abrió de manera sorprendida, y observó todo a su alrededor.

-¡Sorpresa!-Agito mis manos en posición de jazz, algunas risas se me escapan y Nicole no paraba de sonreír.

-¿Esto es para mí?-Asiento con la cabeza y emoción-¡Gracias! no tenían que hacerlo.

-Sabes que si-El hecho de tener a mi mejor amiga aquí conmigo es emocionante, creía que nuestra relación se iba a perder, ya que siempre es así, pero esta vez no sucedió, porque nos mantuvimos en contacto, y no dejamos atrás lo que siempre teníamos-Eres y serás bienvenida siempre que quieras-Nicole mira por última vez toda la sala decorada y se lanza a mi con un abrazo-¿Sabes qué te hice?-Se separa de mi para preguntarme con su mirada-Un pastel de fresa, tu preferido.

-Te pasas, pero te amo.

(...)

-Oye...-Llamo la atención de Nicole con la boca llena de pastel-¿Lee cuando viene? ¿no iba a pasar la navidad con nosotros?-Nicole asiente mientras traga su pedazo.

-Viene el 23-Mastica por un rato-¿Y qué hay de Gerardo?

-Nada, no lo he visto desde lo que te conté-Nicole no tarda de colocar una mirada pervertida.

-¿Qué ha pasado con el tierno Hendrik?

-No lo sé-Conduzco mi mirada al suelo, y la vuelvo a subir-La última vez que hablé con él estaba raro-Nicole coloca una mirada confusa-Si...está...seco.

-Échale agua-Río mientras golpeo su hombro.

-Enserio, me preocupa su actitud.

-A lo mejor extraña a su abuela.

-Eso es lo que pensé.

Seguimos comiendo pastel mientras hablábamos de nuestras cosas, y luego de haber terminado todo, decidimos salir por unos batidos de frutas, también invitamos a Estela, ya que Nicole quería resolver su malentendido. Nicole me pidió que no la dejara a solas con Estela, ya que estaría muy incómoda, porque su relación nunca fue tan cercana, todo era gracias a mi.

-Si quieres nos sentamos allá-Apunto a la mesa de la esquina-Mientras esperamos a Estela-Nicole se encoje de hombros y nos sentamos en la mesa señalada,  miro a mi mejor amiga, sonaba sus uñas sobre la mesa, esa era una de sus reacciones al estar nerviosa-No tienes porque estar nerviosa, no te dejaré a solas con ella, te lo prometo-Nicole sonríe y deja de hacer lo nombrado; la campanilla ubicada en la parte de arriba de la puerta suena, indicando que una persona ha entrado a la tienda, era Estela, y al vernos sonrío y se fue directo a nosotros.

-Hola chicas-Murmuró-Que alegría verlas.

-Igualmente-Respondo con la misma expresión.

-¡Nicole, pero que cambiada estás! y lo digo por la manera buena.

-Gracias. Felicitaciones por lo de tu boda.

-Muchas gracias, fue una lastima que no hayas podido asistir-Nicole asiente. El camarero trae los batidos-¡Oh chicas, que bueno que estamos juntas de nuevo!-Estela nos abraza a las dos al mismo tiempo, Nicole y yo nos hemos mirado confusas y sonreímos.

Estamos juntas de nuevo.

Ella es ValeriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora