Capítulo Doce

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Narra Madison.

Una hora había pasado desde que se llevaron a Zach aproximadamente. Me canse de intentan abrir la reja eléctrica solamente ganándome salir volando hasta la pared. Hayden no deja de quejarse de su herida, lo que ya me tiene harta. Cuando de repente el sonido a pisadas acercándose se hacia presente hasta divisar el rostro de Theo entre las sombras.

Es la primera vez que me alegra ver su rostro.

- ¿Madison? -,Pregunta acercándose-, ¿Hayden?

- ¡Theo espera! -,Le digo antes de que trate de tocar las rejas eléctricas pero ya es tarde, salio volando hacia atrás-, Theo ¿Estas bien?

- Si...-,Oigo su voz en un susurro  mientras se levanta lentamente-, Si estoy bien.

- Traer ayuda -,Le gruño.

- Yo soy la ayuda -,Dice un un toque que egocentrismo en su voz.

Me hago para atrás encogiéndome de hombros para poder ver a Theo nuevamente salir volando por los aire pero eso no sucede, en cambio las rejas empiezan a chispas mientras se van abriendo lentamente hasta quedar abiertas. Este maldito tiene algo.

Yo trate de hacerlo. Una Alfa no pudo hacerlo. El es un Omega, un Omega pudo hacerlo. Maldito misterioso.

Narra Liam.

Al volver de los ductos en donde criamos que estaban Mad  y Hayden, todos nos vamos directo a la casa de Scott. En todo el camino todos estamos en silencio mirando hacia cualquier lado menos a los ojos de los demás.

Masón aparca el auto frente a la casa de Scott en donde todos nos bajamos. Scott abre la puerta de su casa y se queda quieto allí hasta que nos deja pasar a los demás.

Ellas están aquí. Ella esta aquí. Acostada en el sillón con una manta cubriendo su pequeño cuerpo mientras duerme. Los ojos se me cristalizan mientras miro a Lydia a su lado quien me regala una sonrisa señalando a Theo dando a entender que fue el quien las salvo. Sin mas que decir voy hacia el y lo abrazo agradeciéndole.

- Gracias...gracias Theo -,Le digo con la voz entrecortada mientras el solo asiente devolviendome el abrazo para después separarse y abrazar al resto.

Me acerco a Madison con la intensión de despertarla pero Lydia me lo impide poniendo una mano en mi pecho.

- Esta agotada. Dejala dormir -,Asiento lentamente antes sus palabras para después ocupar el lugar en donde ella estaba a su lado.

(...)

5 días después.

Sus labios se estrellan sobre los mios. Solo me dejé llevar, mi cabeza se desconectaba de todos los pensamientos coherentes cada vez que nos uníamos de esta forma, y el sabor de su paladar tibio a veces me dejaba sin razonamiento por horas, no me quejaba, se siente realmente bien. Mariposas en el estómago, aquel inquietante hormigueo en los pies, aquel escalofrío cada vez que su piel tocaba la mía...todo era una locura de esas grandes. Amaba a Madison... Amo a Madison, y el saber que ella siente lo mismo hacia mi es algo que termina por completarme.

Sus brazos rodearon mi cuello y los mios en su cintura, ambos quedamos en uno de los escalones de su Loff, donde ella no perdió tiempo y se sentó en mi regazo, ahora rodeando con sus pies mi cintura. Aquella opresión molesta en mis jeans comenzó a sentirse al instante y el gemido bajo que ella lanzó mediante el beso, me hizo saber que ella también sentía aquello.

Mis manos bajaron por si solas por toda su espalda hasta llegar a su trasero, apretando éste y causando un gemido suave de su parte y un gruñido de la mía.

- Llévame a la cama -,Mordió el lóbulo de mi oreja y se arqueó cuando volví a apretar su trasero causando fricción.

Me puse de pie rápidamente, sujetándola con fuerza y subiendo los escalones restantes para terminar por el pasillo oscuro hasta llegar a su habitación, no aguante e impulsado totalmente por el deseo que tenía de estar dentro de ella, la apoye contra la pared, haciendo a un lado la parte baja de sus shorts y desabrochando mi jean para luego simplemente entrar en ella como si mi vida dependiera de ello.

Su uñas se clavaron en mi espalda mientras un grito se escapa de sus labios causando un gruñido de mi parte, mientras entraba y salia sin piedad, azotándola contra la pared. Finalmente me decidí por ir a la cama saliendo de ella a regañadientes, tirándola sobre la cama para quitar mi ropa y viendo de paso como ella hacia lo mismo con rapidez. La miré unos segundos, extansiando mi mirada con la perfecta piel pálida que tenia, antes de tirarme a besarla nuevamente; estiró mi brazo hasta mi pantalón quitando un condón del bolsillo.

Me lo coloqué y simplemente no pude esperar mas.

Volví a adentrarme con brutalidad en su interior, sintiendo mi extremidad algo apretada y el sudor comenzar a descender de mi frente. Los ojos azules intensos de ella estaban cerrados con fuerza y su espalda se arqueaba con cada embestida, dejándome el paso libre a sus pechos. Sus unas rasguñaron mi espalda sin crepúsculo alguno y sus manos acariciaron hasta llegar a mi rostro cuando por fin abrió los ojos.

- Te amo...-,Su sale agitada y se nota s kilómetros que le cuesta hablar.

- Yo a ti -,Le respondo rápidamente dejando un beso salvaje en sus labios para volver con mis embestidas bruscas.










¡PERRAS PERRAS PERRAS PERRAS! ¡VOLVÍ AJA VOLVÍ!

Naa...mentira. Yo las amo! ❤ les traigo este capítulo para avisarles que dentro de unos 4 días no estaré actualizando por que estaré de vacaciones.

Nos vimo en Dysneylan wey!

Wolf © •Liam Dunbar•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora