Lost Márquez (Sister of Champions)

Capítulo 71

No sé que es peor, viajar con un bebé de 6 meses o mi novio. Me ha vuelto más loca Edgar que Àlex, y mira que no ha estado el niño muy calmado que se diga. Y yo tampoco es que esté muy calmada. Con un niño de 6 meses trabajando todo el día. Y aquí el padre tampoco tiene tiempo que digamos para cuidarlo. Y ya estamos en Qatar, como echaba de menos esto. Estar encerrada en casa no es lo mío. Lorena y Àlex están de lo más felices. Y mi ahijado se fija en todo. En lo que más en la moto. Cada vez que la ve se le salen los ojos y la señala como loco. Futuro piloto en la familia, ya lo veo. Aunque he de decir que el mío también se fija mucho en la moto de su tío. La de su padre ni le hace caso, pero la de Àlex parece llamarle la atención. El azul al poder. Jajjaja.

-¿En que piensas enana?
-En que tu moto parece gustarle más a los niños que otra.
-Claro, la mía es la mejor.
-Àlex pasa de la de Edgar, aunque la tuya parece llamarle la atención. Y tu hijo directamente parece que quiera subirse a ella.
-Ya lo subiré, hay mucho fin de semana de por medio.
-Vale hermanito.
-¿Y mi sobrino?
-Con Edgar. Ya me lo estarán volviendo loco al pobre niño.
-¿Quiénes?
-Los mecánicos. Y ya que estamos, el abuelo.
-No lo ha visto mucho, ¿verdad?
-Creo que no. A lo mejor en Valencia que se lo estuvieron rulando todo el fin de semana. Y en el bautizo creo que no lo vi. Así que a lo mejor viene a saber de su existencia ahora.
-Tranquila Nicole.
-Estoy tranquila.
-Lo digo en serio. Va a ir todo bien. El trabajo, la temporada y Àlex. Va a estar todo en orden hermanita.
-¿Papá no se puede quedar con él verdad?
-Puedes con todo Nicole, tranquila. Yo mismo cuido de él o Marc cuando no tengamos que estar en pista.
-Da igual, intentaré trabajar con él y si veo que no puedo ya me pensaré que hacer.
-Estoy aquí para lo que sea Nicole.
-Lo sé Àlex.

Me voy a trabajar y veo a Lorena hablando le a Izan que la mira muy fijamente.

-¿Qué ha hecho?
-Nada. Intento que hable.
-Tiene 8 meses, no te vuelvas loca aún con eso.
-Tienes razón.
-¿No tienes nada que hacer?
-Hoy no creo que nadie tenga mucho que hacer. Dentro de unos días ya sí.
-Vale. Pues me quedo por aquí contigo y el principito.
-Mira que me lo mimas.
-Le quiero mucho.
-Sí, no digo que no.

Seguimos un rato hablando y cuidando del niño hasta que llega Edgar con nuestro hijo Àlex. Y es entonces cuando Izan se vuelve loco. Se pone a moverse aún en mis brazos. Edgar se acerca con Àlex y cada vez está más animado Izan. Le tiene un cariño a Àlex que es increíble.

(Marc)
No sé mucho de mi hermana desde que se fue a Barcelona con Edgar. Al menos he tenido a mi pequeña y a Leli. No mucho tiempo. Pero las tenía. Ahora que estoy en Qatar no puedo tenerlas conmigo. Así que poco después de llegar llamo a mi prometida que me responde enseguida.

-Hola amor.
-Hola nena. ¿Como estáis?
-Bien amor. Vera está más o menos tranquila.
-¿Me la pasas nena?
-No sabe hablar amor.
-Lo sé pero puede oirme hablarle.
-Vale. Espera que te la paso.

Espero un momento y entonces la oigo. Gritando sus alegatos. Muero con sólo oir a mi niña.

-Papi quiere hablar contigo princesa, dile hola.
-Ahhh.
-Mi princesa bonita.
-Ah.
-Vera mi niña, papi te quiere mucho mi bebé. Muchísimo princesita. Ojalá estuviera ahí contigo. Te echo mucho de menos bebé.
-Ahhhh.
-Marc... Al final me voy a poner celosa de la niña.
-A ti también te echo de menos mi niña. Claro que sí.
-No lo parece.
-Amor no estés celosa de tu propia hija. Sabes que no quiero perderme como crece mi hija. Ya me perdí mucho embarazo. No quiero que mi hija pregunte quien soy al verme en casa.
-Lo sé. Yo tampoco quiero que la niña se crié sin su padre. Pero es tu trabajo y tienes que estar viajando y entrenando y ya está amor.
-Vale. Tengo que cenar amor. Mañana te llamo antes de ir a entrenar.
-Vale. Dile adiós a papi Vera.
-No creo que diga nada Leli.

Y entonces la oigo diciendo algo. El que vete a saber, habrá que conseguir un traductor para bebés.

-Traducido podría ser un buenas noches papá.
-Me vale. Buenas noches amor.
-Te quiero.
-Y yo a ti.

Colgamos y me voy a cenar. Al llegar veo ya a Àlex con Lore e Izan. Y también están Nicole, Edgar y Axel que tiene al pequeño Àlex en brazos. A ese niño no le van a sobrar brazos en los que estar nunca.

Me siento con Àlex y Lore y esta última me pasa a mi sobrino.

-A falta de tu hija bueno es un sobrino, ¿no?
-Ahijado. Es mi ahijado.
-Pues a tu ahijado parece no hacerle mucha gracia estar contigo.
-Vete con tu padre anda. Que a mi no me quiere nadie.

Y entonces me aparece por detrás mi concuño con mi otro sobrino.

-Al verte se ha querido ir contigo. Hasta te estaba llamando.
-Ahh. Pues ven aquí con tío Marc, enano.

Axel me pasa al niño y se me queda tranquilo. Se me cae la baba con él. Y se me queda dormido en mis brazos. Vaya cosita más mona que es mi sobrino. Vera no es mucho mayor, incluso diría que es más pequeña en tamaño. Se ha quedado todo encogido. Vaya niño más gracioso.

-Déjamelo que yo me ocupo de él. Tú come tranquilo.
-Vale hermanita. Cuidado que se despierta.
-Tendré cuidado.

Se lo paso y el niño ni se inmuta.