Alex no sabía como reaccionar, sus labios se movían inconscientemente, sin saber cómo negarse. Soltó un suspiro, abrazando aquel cuerpo fuertemente.
Alex: ¿Qué haces aquí?- preguntó con una tonta sonrisa en su cara.
Ally: Tenía necesidad de verte.- murmuró escondiéndose en su cuello.- Al escuchar a esa chica contestando tu teléfono… Me dieron demasiados celos.- admitió, sonrojándose.
Alex: Mm, me alegra que hayas venido.- sonrió, volviendo a unir sus labios.-Te he extrañado, mucho.
Se hizo a un lado, dejándola pasar a su pequeño departamento. Sonrió cuando vio que Ally estaba usando una camiseta que ella misma había dejado, al propósito, en su casa, acompañado de unos simples jeans y converse, negras.
Alex: Estás muy hermosa.- sonrió.- Mi camisa no te queda mal. Me gusta.
Las mejillas de Ally se tiñeron de un color rojo fuerte, haciendo reír a Alex.
Alex: ¿Dónde dejaste a la torre?- vio como la pequeña hacía una mueca.- ¿Te hizo algo?
Ally: No. Digamos que me di cuenta que es un idiota.- rió.- En realidad, el y yo nunca volvimos. Sólo lo hacía para darte celos.
Alex: Funcionó a la perfección.- agregó divertida.- ¡Necesitaba verte!- exclamó sincera.
Vio como las mejillas de la pequeña se teñían de un tono rojo.
“Sonrojo dos veces seguido. Me gusta.” pensó Alex.
Se sentaron en el mueble a pasar el rato, después bajó Melo con sus “pulseras” seguida de su novia; Maria Cadepe.
Alex: ¿Segura que serás capaz de cuidar a los cuatro?- preguntó por octava vez.
Maria: Te ha dicho que sí, por Dios.- rodó los ojos, divertida.- Terminen de irse. Me tienen cansada.- murmuró esto último.
Melo: Ya viene Rush y Holly.- avisó entrando al departamento.- ¡Hemos abierto una hermosa guardería!
Alex y Ally se miraron dudosas de dejarlas aquí, más por el hecho de que, simplemente, Melo era muy infantil.
Ally: No quiero ver a mi hijo con un solo rayón.- le murmuró a Melo.- ¡Cuidado con las puntas! Está pendiente si se mete algo a la….
Alex: Si, si, relajate.- rió sacándola del lugar- Adiós, Melepe.
Las dos chicas se miraron entre sí, preguntándose en qué rayos se habían metido al ofrecerse a cuidar a cuatro niños.
Por otro lado, Alex, intentaba sacar a Ally del edificio, ya que se les haría tarde para ir al aeropuerto. A la ojiazul no le quedó de otra que cargarla como saco de papas en su espalda, así llevándola hasta su automóvil.
Ally: Eres una salvaje.- susurró cruzándose de brazos.- Me he golpeado la cabeza con la puerta de ésta cafetera, ¿Te parece poco?- cortó a la menor, quien se estaba riendo.
Alex: No te veo sangrando.- se encogió de hombros.- ¡Vamos! Ya son las… ¡Doce y cincuenta! ¡Normani va a matarme!
Ignorando la risa de la más baja, arrancó el auto directo al aeropuerto. Sería más fácil si Normani no hubiese traído consigo a las gemelas, ya que podría irse en tren, pero, en ésta ocasión, la morena tuvo que pedirle el favor.
Alex: No entiendo qué hacen ustedes aquí.- murmuró cuando las chicas se subieron a su auto.- ¡Nos vimos hace dos días! Se suponía que tenía que pensar bien las cosas y eso.
Las chicas la miraban incrédulas, y luego se encogieron de hombros.
Normani: ¡Las niñas te extrañaban!- se excuso.
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Tan Solo Recuerdos• Ally Brooke°
FanfictionHan pasado tres meses desde la muerte de Alex. ¿Estará Ally dispuesta a olvidar a Alex? ¿O será Alex Tan Solo Recuerdos? Aquí, podrás encontrar la respuesta a todas esas preguntas. Historia completamente mía. No se aceptan adaptaciones ni copias.