La terrible discusión en casa de Wang Cheng trajo consigo complicaciones al estado de la adolescente gestante. Fue trasladada de urgencias al hospital, con la presión arterial baja por prevención se decidió que debía quedarse por una noche en observación. Sin embargo, la salud de madre y bebé están fuera de peligro.
El tiempo seguía su curso y el desarrollo del bebé llagaba a los cinco meses. Marinette no volvió a tener contacto con sus padres. Ya había asimilado la situación, así que sin más que hacer por ese momento siguió el consejo de su tío abuelo:
-"Continúa haciendo tu vida como siempre, sobrina. El tiempo es corto para el que piensa, e interminable para el que desea"
Su tío era sabio y el mejor para dar consejos, así que siguiendo sus palabras decidió concentrarse en lo el día de hoy y fiarse del mañana lo menos posible.
pero hoy sería especial. En el consultorio
-Qué pena que Wang no haya podido venir hoy, Marinette.
Como principal preocupación era su bebé, Marinette se encontraba en el consultorio de la doctora Mei, una mujer mayor amiga del señor Wang, ¡Hoy sabrán el sexo del bebé!
-Él era quien más entusiasmado estaba por saber el sexo del bebé- continuó la doctora dirigiéndose a la futura madre-. Decía tener la corazonada de que será una niña.
Las dos féminas miraban atentas el monitor, sin embargo, Marinette no podía entender cómo esas imágenes distorsionadas en blanco y negro podían significar algo.
-Desde ayer se está lamentando por eso, dijo que su restaurante esta corto de personal así que el trabajo se acumula- respondió Marinette con los ojos entrecerrados mirando el monitor.
-Bueno cuando lo veas dile a ese viejo que su corazonada fue cierta.
Marinette parpadeó varias veces evocando una sonrisa de sorpresa por la repentina noticia -¡No! ¿¡Es en serio!? -soltó un grito emocionado- ¡Es una niña!
-¡Marinette! ¡Me acabas de dejar sorda! - rió sintiendo ternura de la joven emocionada-. ¡Y si! Es una niña, una pequeña Marinette como dice el viejo.
Al finalizar la consulta, la doctora abrazó sincera a la azabache. Mei se había comprometido a atender a la joven, sin juzgarla y aconsejarla en todo, incluso haciendo más de lo que su relación profesional le obligaba. Marinette para la profesional de la salud era como una sobrina.
-«Hoy le diré la noticia a todos los que se han preocupado por mí»- pensaba Marinette mientras caminaba por la calle.
En su mente iba recreando como podría ser la expresión de su tío al enterarse de que el bebé sí iba a ser una niña, tal como él lo soñaba. Siendo sincera esa tarde era la primera vez en meses que se sentía feliz de corazón, sin fingir estar bien, sin sonreír de manera forzada... esa tarde se dio cuenta de que el pequeño ser en su vientre sería el motor en su vida y la única que podría darle felicidad completa
-¡Tío! - gritó Marinette en el mismo momento que puso un pie dentro del restaurante donde su tutor era el propietario.
-¿Qué pasó Marinette? -contestó alterado por los gritos de su sobrina-. Me asustaste, ¿Paso algo?
-¡Tío tu corazonada era cierta! - se movió llena de alegría provocando que el hombre mayor la
-No! -respondió incrédulo tomándola por los hombros para detenla de hacer movimientos bruscos.
-¡Siii!
-¡UNA NIÑA! -gritaron al unísono.
Wang cargó a su sobrina, abrazándola de manera tierna. Podía asegurar que con la llegada de esa pequeña vida, la relación familiar de ambos se había vuelto más unida, mas confidentes y por algina razón al hombre mayor lo hacía sentir joven, como si esa niña fuese su propia hija y la bebé la nieta que nunca tuvo.
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[Finalizada / Corrigiendo] Ahora la quiero de vuelta - AU[MLB]
FanfictionMarinette y Félix se encontraban viviendo temporalmente en Shangai cuando sus destinos se cruzaron, él estaba a un año de cumplir la mayoría de edad y a punto de ingresar a la universidad cuando ella aún era una niña de 14 cursando el colegio, su no...