[Finalizada / Corrigiendo] Ahora la quiero de vuelta - AU[MLB]

45. Peligro ✔️

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La ambulancia llegó pronto y Marinette fue trasladada a urgencias. Sus familiares estaban preocupados, aterrorizados, principalmente Adrien.

—Marinette ¿Sientes dolor?

—No siento dolor — gimoteó—. Marina por favor, salve a mi bebé —le rogó entre lágrimas. Se aferró a la bata blanca desesperada.

—Bien, que no sientas dolor es una buena señal, permíteme revisar si tienes dilatación —Marinette fijó los ojos acuosos a las blancas placas de yeso mientras sentía como las lágrimas bajaban humedecido la sábana, con los puños retorció la tela mientras la doctora revisaba su parte baja.

—No has dilatado, es buena señal de que no es un parto prematuro — gracias a las palabras de Marina permitieron que la joven recobrase las esperanzas.

—Ahora te haremos un examen de sangre y un ultrasonido para escuchar los latidos del bebé ¿Sí?

Ella asintió lista para cooperar con todo por el bien de su bebé.

Cuando Adrien llegó desesperado le explicaron que aparentemente por el momento su novia y su hijo estaban fuera de peligro. Aún recomendaron que Marinette debía pasar la noche en observación.

La presencia de Adrien fue conveniente para la doctora Marina pues ella necesitaba darle un llamado de atención a ambos.

—Adrien, ella debe parar, se está haciendo daño junto con el bebé — sugirió preocupada la doctora —. Aún no es tiempo, todavía tiene seis meses.

—¡Lo sé! —la voz de Adrien se quebró una vez más —. Lo sé y no puedo hacer que se deje de preocupar con esta situación —esta vez no pudo retener las lágrimas que intentaba aguantar para mostrar fortaleza frente a Marinette.

—Lamento decirte esto Adrien, sé que están pasando por un momento difícil y ahora con lo de tu novia y el bebé, los problemas los están golpeando seguido... pero— ella hizo una pausa para tomar aire —. Si esto sigue así, Marinette puede perder al bebé, o nacer antes de tiempo. Esto solo fue un aviso.

El rubio se tapó el rostro con ambas manos por unos minutos, cuando las lágrimas pararon un poco llevó sus dedos enredándolos por sus dorados cabellos quedando desarreglados.

—Desahógate, pero recuerda que debes mantenerte fuerte por ella y tus hijos— Marina le dio una sonrisa —. Mira, creo que esto te va a animar — la doctora le entregó una tira de fotografías de un eco —. En el ultrasonido descubrimos que será un varón.

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Cuando entró a la habitación de Marinette, ella seguía dormida, en sus venas estaba conectado un catéter que le administraba un suero. Verla en ese estado era una tortura para Adrien, en su mente no dejaba de escuchar las palabras de su hermano mayor y su padre cuando le recriminaban siendo aún un niño que su madre había muerto por su culpa en el parto. Tenía miedo que su peor pesadilla se hiciera realidad y que Marinette y su hijo murieran.

Entonces pensó lleno de rencor que si Félix no hubiera regresado de dónde se mantenía escondido, que el instinto paternal hipócrita que repentinamente había despertado en él no le hubiese impulsado a amenazarlos, su vida seguiría feliz como siempre.

Adrien apretó la mano de Marinette llorando en silencio atormentándose con los peores escenarios que su mente podía crear. También sentía correr por sus venas el odio hacia la sangre maldita que compraría con el desgraciado de Félix.