Narra Harry
Cuando llegue a casa lo primero que hice fue preguntar por el perro, tenia entendido que Juana lo había sacado a pasear mejor que no se haya escapado por que eso podría afectar un poco el ambiente.
El canino se encontraba mordisqueando algo entre los arbustos del jardín, solté un suspiro y me acerque al el, tan pronto lo hice este me gruño y salio corriendo, lo que me faltaba.
Cogí la correa que estaba detrás de la puerta en la cocina lo iba amarrar junto al poste de su pequeña casa, lo seguí a paso lento para no asustarlo, cuando estaba muy cerca volvió a escaparse, bufe y esta vez corrí detrás suyo.
Escuche un silbido y voltee, Juana sostenía un silbato en la boca, el can corrió hacia ella y movió el rabo, asentí hacia Juana y logre amarrarlo, es solo prevención.
No estaba dispuesto a que se escapase por la noche y para mañana cuando Miley venga se complique las cosas, tengo que hacerlo todo bien.
Narra Miley
Al despertar tenia todas mis cosas listas, había tomado una decisión, me regresaría a vivir con Harry.
Miranda estaba de acuerdo conmigo pero su hermano no del todo, el seguía dudando de Harry, pero con la conversación que tuvimos anoche dijo que iba a apoyarme en todo lo que me haga sentir feliz, y bueno esto me hacia feliz?
Baje las escaleras acomodando mis cosas a un lado de la puerta, cruce el pasillo hasta la cocina, aun era un poco temprano así que decidí hacerme un poco de café, encendí la televisión y espere un momento a que se haga.
Suspire y observe la taza vacía, por que me había levantado tan temprano? podría ir a la casa de Harry a la hora que quisiera, era una tonta. Miranda bajo las escaleras con uno de sus pequeños en brazo, me sonrió y se metió a la cocina, avise que había hecho un poco de café y me lo agradeció, la ayude con el desayuno y conversamos un rato.
- te has levantado muy pronto
asentí
- estas nerviosa o ansiosa?
- no se, es un poco raro volver allí
- sabes que si no estas segura con esto puedes cambiar de decisión, esta casa siempre estará con las puertas abiertas para ti
- estoy bien y gracias por todo lo que has hecho por mi, por permitirme quedar todos estos días aquí no se como podría..
- hey no te preocupes, puedes ir conmigo a unas clases de baile como recompensa
- pero no se bailar
- iras para que te enseñen no a que tu lo hagas
- no hay otra opción?
- jugar ajedrez con el vecino de enfrente, es un vegete y le encanta el ajedrez.
- cuando es el baile?
Rió y me uní a ella, al rato nos despedimos y subí al coche, ya era hora de volver a mi antigua vida de casada espero que esta bien todo vaya bien.
Cuando llegue a la mansión Styles Juana me recibió con un gran abrazo y caí al suelo por la sorpresa de Babas, arrastre mis cosas hasta el salón principal y observe a Harry bajar las escaleras, me sonrió y tuve que bajar la cabeza para que se percatare de mis mejillas sonrojadas.
- Hola
- Hola
Estaba hermoso, sus ojos brillaban y ss sonrisa con perfecta dentadura no se había borrado en ningún segundo
- Espero que no hayas desayunado aun, el desayuno esta servido
- que bueno porque solo tome un poco de café
cogió mi mano y mi pulso se acelero
- gracias por aceptar venir, esta vez todo sera diferente lo prometo
Beso mi mano y nos dirigimos a la cocina, todo se veía tan esquisto y elegante, en realidad era mucho para dos personas, mi estomago gruño y note a Harry aguantar la risa, apreté su mano en regaño y baje la cabeza avergonzada, que bochorno.
Al acabar un agradable desayuno, Harry me dirigió a lo que seria mi habitación, pero creía que iba a dormir en la misma que el, me agrado ese detalle, teníamos que ir lentos como si nos hubiéramos casado por primera vez, pensar en eso me trajo recuerdos que los encontré muy gracioso, quien lo diría, solía odiar a este chico y ahora estoy colgando de un hilo por lo complicado que estaba siendo todo.
Harry informo que hoy tenia un día libre de la empresa así que tenia todo el día con el, conversamos sobre lo que había pasado, el cuerpo de Jassmine yacía en un sepulcro digno, no dio información a los padres de esta porque según no tenia contacto con ellos, porque lo odiaban, y era cierto.
Babas correteo por el jardín feliz, mi presencia lo había alegrado mucho, también lo había extraño, Harry se situó a mi lado en el césped y paso un brazo por sobre mis hombros acercándome a el, aspire su aroma varonil y bese su mejilla apoyando me cabeza con la suya.
Esto se sentía tan bien, tal vez ahora si las cosas funcionarían bien, nosotros funcionaremos bien.
vota y comenta
xx