Con él no tendría miedo.

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Narra Rubén.



Podría ahora ver su mano enlazarse a la mía. 

Tendría miedo por las veces que sonreiré y  recordaré este momento. Ansiedad al saber que debo recurrir a este recuerdo al sentir la mano lejos de la de él, es que es tan cruel saber que debo buscar un recuerdo para estar cuerdo y feliz en esta vida en la que siento esta incorrecto.
Aunque papá me destruya no dejaré  de ser así  con Samuel.
-Ven aquí.
Lograba moverme a su compás.
Nos metimos en la parte de las escaleras eléctricas de un centro comercial para sentir como nuevamente me besaba.
Odiaba reconocer su olor,  odiaba el tener que aferrarme al momento pues mas tarde todo lo recordaré.
La noche acababa no sin antes decirle lo mucho que disfruté este día. Callando lo que me hará falta mas tarde, teniendo todo esto en los sueños en los que se aparecerá.
Él se ofreció a llevarme en su moto,  claro es que rechacé.
Papá se infartaría.
-Dame una esperanza.
Básicamente sonó a súplica mis palabras al ver como se dio aquel último beso.
-Eres tú la esperanza.  Anda ve a tu casa.
Fue así como empecé a odiar eso de él. 
Por qué se preocupaba de mi primera vez?
El domingo llegó con la noticia que papá no ha llegado a casa por sus asuntos en la iglesia.
Sin embargo esto no me libraría de ir muy temprano a la iglesia.
Al salir de la misma papá pondría un oficio.
Ahora debía ayudar a un chico de mi edad a lidiar con las dudas que se cree de él.
Esperé a conocerlo.
Su nombre era William.
Iría a su casa.
Todo muy ordenado.
Todo era muy calmado.
Sin embargo no es que él quiera que se metan en su vida,  comprendía porque lo hace.  Ahora por lo que vivo tampoco quisiera que papá se inmiscuya en mi vida.
Escuchaba de su música mientras él me ignoraba.  Ni quería estar aquí y debía averiguar lo que esconde William.
-Si quieres vete que si tu padre pregunta le diré cualquier cosa.
Diría William de manera normal.
Pero quería una cuartada perfecta por lo que en vez de arreglarlo lo necesitaría compartiendo un secreto con él.
-Quieres acompañarme?
Su momento para responder fue gracioso.
Él y yo de cierta forma nos parecemos pero no lograba ver en que.
-Ok.
Nos marchamos aprovechando que sus padres confían en mí y a su vez saliendo ya que Samuel quiere verme pero no se como decir que no puedo.
Salimos tomando ventaja al ir en carro y estar allá en menos de media hora.
Al llegar noté en que era en lo que me parecía a William.
Su expresión al ver que Samuel me besaría sería notoria a excepción que a él no le iban los tatuajes.
A William se le fueron los ojos por Samuel y en segundo al verlos juntos noté que si no estuviera conmigo, ellos también harían una pareja complicada. Pero quizá eso solo lo pensaría yo, quien mas podría pensar esto?

Rompe mis alas. /RubegettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora