Prohibido dejarte sola #brase |Terminada|

12.Me has salvado la vida

BREE POV'S
Cuando ya todos nos hemos duchado después de la piscina bajamos a comer.

-Hacía tiempo que no me lo pasaba así de bien en la piscina.-dice Chase mientras come los macarrones (hechos por mí, ya que estos hombres se les da de pena cocinar) y mirándome. El pobre aún lleva la venda en su mano.

-Y también hacía mucho tiempo que no me había cansado tanto jugando.-dice ahora Leo también comiendo.

-Pero si casi no hemos jugado...-me quejo. Los chicos me miran mal.-¿Hoy podríais enseñarme el pueblo? Es que llevo varios días aquí y aún no he visto nada...-pregunto cambiando de tema.

-Claro, además ahora son las fiestas de verano por lo que todas las tiendas de ropa estarán abiertas.-dice Adam.

-No me gusta ir de compras.-digo jugando con el tenedor en el plato. Los chicos excepto mi tito se quedan con la boca abierta. Hago una mueca de asco al ver que se les ve la comida masticada.-Cerrad la boca, guarros. Se os ve toda la comida.-añado cerrando los ojos.

-¿A qué chica no le gusta ir de compras?-pregunta Leo asombrado. Yo levanto el brazo en signo de presencia.-Cada vez me caes mejor...-añade asintiendo con la cabeza. Yo sonrío y apoyo el mentón en la mano.

-Es que pasarme horas y horas escogiendo y probándome ropa me agobia, y aún más si hay mucha gente.-añado. Los 4 asienten con la cabeza.-Mi mejor amiga siempre me obliga a ir con ella, es ese día cuando me paso todos los niveles de los juegos y me tengo que descargar más.-explico. Ellos me escuchan atentamente y ríen por lo de los juegos.

En ese instante suena el reloj del tito. Se le ilumina la pantalla y pone ALERTA en rojo.

-Parece que hay una misión. Alguien está intentando hacer explotar la estación con químicos. Debéis intervenir. Vamos al sótano.-avisa el tito Donnie. Sí, ahora lo llamaré tito Donnie. Me levanto del taburete y cojo mi plato para dejarlo en la cocina y lavarlo.-Bree, no has comido absolutamente nada así que mientras explico, comes.-añade fastidiándome.

-Pero si no estabas mirando... ¿Cómo te has...-empiezo, pero entonces veo a Chase aguantándose la risa.-Tú...-digo señalándolo. Él sonríe.

-No te enfades, chica sexy. Tienes que comer.-dice ahora más serio, sobre todo con la última frase. Yo bufo y me alejo. Él me sigue.-Te dejas el plato y el tenedor.-añade entregandomelos. Me sonríe divertido y yo le sonrío falsamente. Cojo el plato y el tenedor y lo aparto con la mano. Escucho sus carcajadas detrás de mí.

Bajo al sótano por ascensor, que lamentablemente tengo que bajar con Chase porque los demás ya han bajado. Chase intenta que hable pero yo no le contesto.-¿No me vas a hablar? Joder, lo he hecho porque tienes que comer.-dice Chase metiendose las manos en los bolsillos.

-Un consejito, jamás me obligues a comer porque sino aún como menos.-digo antes de que se abran las puertas. Una vez salimos del ascensor veo a los demás.

Chase se mantiene callado a mi lado mientras nos explican el plan y reparten las armas. Después salimos de casa para ir a la estación.

-Bree, ¿sigues enfadada?-pregunta Chase, que va sentado detrás, conmigo.

-No, al fin y al cabo he dejado el bol de macarrones en el laboratorio.-digo feliz. Él me mira serio. Yo le sonrío y le doy un beso en la mejilla.-No seas viejo cascarrabias.-añado, a lo que Chase me mira ofendido.

-No soy cascarrabias y mucho menos viejo. Vamos a ver, ¿cuando naciste?-pregunta Chase.

-El 2 de noviembre de hace 16 años. ¿Y tú, cascarrabias?-pregunto sonriendo.

-El 26 de agosto de hace 16 años. Soy mayor que tú.-responde orgulloso.

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Ya hemos llegado a la estación y ahora estaos decidiendo todo.

-Bree, tu te quedas en el coche por tu seguridad.-dice Chase tan tranquilo. Yo lo miro alucinada.

-¿Perdona? Eso no te lo crees ni tú.-le suelto yo. Él se acerca a mí y se coloca delante para imponer autoridad. aunque conmigo no funciona.

-¿Por qué eres tan rebelde?-pregunta desafiándome con la mirada.

-Mira, solo obedezco a 3 hombres, y tú no estás en la lista. -le respondo sonriendo victoriosa. Dicho eso me doy la vuelta y empiezo a escalar la pared rocosa.

-¿Se puede saber que haces, chica sexy?-pregunta Adam. Yo bufo y salto para caer de pie en el suelo.

-A ver, genios, ellos esperan que ataquemos desde abajo, ¿no?-empiezo. Ellos asienten.-Pues es mejor atacar por arriba porque no se lo esperan.-explico. Se quedan pensativos unos segundos y luego asienten.

-Buena idea.-dice Leo.-Pero yo no sé si seré capaz de escalar esa gran pared. Solo tengo una mano biónica.-explica.

-Es que habría que ceñirse al plan-dice Chase apretando fuerte sus labios.

-Pues ceñíos vosotros.-digo escalando la pared.

-No podemos dejar que te vayas. Y mucho menos que te hagan daño...-dice Chase mirándome triste.

-Está bien, me ceñiré al plan.-me rindo yo al ver que Chase baja la mirada hacia el suelo. Es entonces cuando alguien habla.

-Pero mira quién ha venido...-dice la voz que más miedo me da al escucharla. Me giro y ahí está mi mayor temor, Cody Williams. Está a unos 5 metros de mí. Mi cuerpo empieza a temblar.-Pero si es la dulce Bree. ¿Creías que te irías de NY y yo no te perseguiría? Estabas muy equivocada. Ya te lo demostré cuando te visité a tu nueva habitación. Que penita cómo llorabas cuando entré.-habla Cody.

-Bree, ¿quién es? ¿Es Cody?-pregunta Chase. Estoy inmóvil y con la respiración acelerada. Noto que una mano se entrelaza con la mía.-Tranquila, no permitiré que te haga daño.-añade.

-¿Ya tienes novio? Wow, eres muy zorra.-dice Cody acercándose.-Vamos muéstrale a tu novio lo que eres en realidad.-dice dándome un golpe en la cara.

-¡No la toques!-grita Chase. Me suelta la mano y empieza a pelear con Cody. Adam y Leo pelean con los demás y yo con un chico que se lanza a por mí pero yo me deshago de él fácilmente. Chase y Cody están en las vías del tren. Cuando escucho la bocina de un tren me entra el pánico.

-¡CHASE!-grito lo más fuerte que puedo. Cody se sale de las vías pero Chase aún no. El tren está a escasos metros de él. Utilizo mi habilidad biónica de la rapidez y me tiro sobre él así empujándolo hacia el otro lado de la vía. Al saltar sobre él me he quedado sentada en su cintura, con una pierna por cada lado. Él me ha agarrado al caer al suelo, por lo que tengo sus manos agarrándome por la cintura.-¿Te he hecho daño?-pregunto levantándome de encima de él.

-No, al revés, me has salvado la vida.-contesta Chase.

-No podía dejar que te hiciesen daño.-digo dándole la mano para ayudarle a levantarse, la coge y estira de ella tan fuerte que me tira sobre él.

-Gracias.-me susurra al oído y me besa el cuello. Eso hace que me retuerza sobre él, que me tiene sujetada por la cintura pegándome a él. Paso mis brazos por detrás de su cuello y acaricio su nuca. Eso provoca que se le erizan los pelillos de esa zona. Chase me acaricia toda la espalda. Y yo la arqueo. Aprovecha ese movimiento para meter la mano por debajo de mi camiseta. Gimo cuando noto su mano caliente sobre mi piel fría.-Jamás me cansaré de oír ese sonido.-dice volviendo a besar mi cuello y mis hombros. A todo esto el tren, al ser tan largo, aún está pasando por nuestro lado. Cuando ya queda poco para que se acabe el tren me susurra.-Luego me pasaré a verte por tu habitación. Así podré besarte tranquilamente.-dice antes de besarme en los labios. Cuando el tren acaba de pasar, Cody ya ha desaparecido, así que nos levantamos y terminamos la misión.