ONE WORD: DESTINY ★ |S.M| |TERMINADA| |EDITANDO|

Capítulo 2

Hoy era domingo, pero para mí era algo que no tenía demasiada relevancia, todos los días de vacaciones son como domingo. Todos en casa nos levantamos tarde, alrededor de las once y doce del medio día, aprovechando lo más que podíamos de la cómoda cama hasta que el calor no se podía soportar por más tiempo, y también cuando Noel comienza a hacer mucho más ruido en todas las habitaciones, impaciente porque alguien se levante a jugar con él. En ese momento sabemos que debemos salir de nuestras cuevas y hacer un esfuerzo por tener la misma energía que mi hermano pequeño.

Después de comer algo ligero como desayuno, mamá se pone a cocinar para el almuerzo, papá sale a comprar algún pastel para el postre, mientras que Ryan y yo jugamos con Noel y su cochecitos.

-¿Quieres manejar mi autito rojo?-pregunta Noel levantando hacia mí el coche rojo de cuatro puertas, el más nuevo de los que tiene

-Espera, iré a ver a mamá-digo poniéndome de pie

Ryan abre los ojos al ver que lo dejaré solo, pero no tiene de otra, ya he llegado a la cocina antes de que pueda protestar.

-Mamá, ¿Puedo bajar a la playa un rato?

-¿Ahora? El almuerzo no tardará en estar listo

-En lo que terminas de hacerlo, iré a leer un rato, estaré justo debajo de la cabaña, te lo prometo

-Está bien, sube cuando haya pasado media hora

Asiento con la cabeza sonriente y me voy corriendo a coger un libro cualquiera de mi maleta, en estos momentos me daba igual qué iba a leer, todos eran nuevos para mí. También agarro la cámara y salgo por la ventana de la habitación. Ajá, como una delincuente. Pero era la única manera de salir sin que Ryan o Noel me siguieran, además me ahorraba el caminar por alrededor de la casa hacia las escalinatas que conducen a la playa.

Me dejo caer justo debajo de la cabaña, como le había prometido a mamá, de manera que si ella se asoma por la ventana de la cocina podrá verme perfectamente.

En la playa hay más personas que la tarde pasada, pero están bastante alejados de mí, tanto que ni siquiera podría analizar sus rostros si tuviera la intención. Afirmo mis codos sobre las rodillas y admiro la vista frente a mí, el sol está en su punto más alto, iluminando y calentando tanto como puede, el mar está tranquilo y transparente y nuevamente no puedo oír el usual ruido de las olas, solo el de las gaviotas que pasan de vez en cuando.

Hago un par de fotos con la cámara a todo lo que se me cruza por delante, el mar, la arena, el cerro saliente hacia el mar, una pareja que está muy lejos, y hasta a los pájaros que se detienen en la orilla de la arena húmeda.

Me gustaba la fotografía pero no era una experta ni mucho menos, solo era una aficionada de vez en cuando, no iba tomando fotos de todo lo que veía en cada momento, ni tampoco haciendo arte y subiéndolo en blogs, solo disfrutaba de capturar algunos momentos y sentir ese orgullo en el pecho porque ha salido como quería. Seguramente no tengo la mejor técnica y a veces me tiembla la mano, pero realmente no me importa, disfruto de tomar fotos porque sí y ya está.

Dejo la cámara a un lado y abro el libro que he cogido. Las sagas de libros como Los Juegos del Hambre o Divergente nunca han llamado mucho mi atención, he intentado leerlos y fracasé completamente, pero una saga que últimamente estaba siendo famosa gracias a la serie era Juego de Tronos, y claramente no me podía quedar atrás con los libros. Y ahora había agarrado el primer tomo que ha estado guardado en mi estantería por un par de meses, indecisa de leerlo porque no quería sentirme decepcionada al leer las primes diez páginas.

Poco a poco voy entrando en la trama del libro, hay muchas palabras que no entiendo y que luego tendré que buscar en un diccionario o preguntarle a mi padre, pero es bueno, realmente lo es. Incluso me atrevo a decir que es mejor que la serie.