ONE WORD: DESTINY ★ |S.M| |TERMINADA| |EDITANDO|

Capítulo 42

En cuanto las palabras salen de mi boca me arrepiento de haberlas dejado salir.

El canadiense abre los ojos de la sorpresa, probablemente no imaginaba que iba a preguntarle eso, y yo tampoco estaba segura del todo de preguntarlo. Sus mejillas, como las mías, se encienden de un rojo intenso y baja ligeramente la cabeza, seguramente cohibido. Intento no parecer muy afectada con mi propia pregunta, pero el calor que sentía en el rostro me dejaba en evidencia, como también mi constante mordisqueo a mi labio inferior.

—Mmh, yo...—apenas balbucea dos palabras volviendo la vista al frente y presiona los labios en una línea—.Yo creo qué...

—¿Sabes qué? Olvídalo, yo no pregunté eso—digo haciendo un raro gesto con la mano e intento pegarme más a la ventana—.Creo que mejor entro

—¡No! No—se apresura a decir antes de que pueda hacer el intento de abrir la ventana—.Espera

—Pero...

—Te besé porque creo que me gustas—dice rápidamente, atropellándose con sus propias palabras

—¿Crees que te gusto?

—Si...Quiero decir...apenas nos conocemos hace una semana—encoje los hombros intentando quitarle importancia—.No estoy seguro de lo que siento. Me atraes pero...

—Shawn yo...

Las palabras no salen de mi boca, no podía terminar la oración porque no estaba asegura de qué era lo que quería decir y qué no. El silencio reina en el momento más incómodo de la noche. Sostengo la mirada en sus ojos, al igual que él en los míos.

—No tienes que decir nada—murmura dando el último paso hasta estar demasiado cerca—.No espero que respondas

—Es que yo...

Una vez más las palabras quedan colgadas, pero esta vez no nos quedamos parados como estúpidos. En un impulso choco mi boca a la suya con más fuerza de la necesaria, siento a Shawn respirar hondo y luego estamos besándonos, lento, sin prisas por nada. Aunque, al igual que en la biblioteca, no soy capaz de continuar besándolo por mucho tiempo. Me separo un poco, lo suficiente para poder mirarlo. Medio sonrío al mismo tiempo que él.

No tenía idea de qué demonios estaba haciendo pero sin pensarlo dos veces para no arrepentirme, lo besó rápidamente y me doy la vuelta para abrir la ventana y cruzar a mi habitación casi volando.

—¡Eso me lo debes!-exclama el chico soltando una carcajada

—Vete—digo riendo. Me recargo en el marco de la ventana—.Adiós, Shawn

—Descansa, americana

Asiento con la cabeza y cierro la ventana antes de querer seguir conversando con Shawn. Sonríe y se da la media vuelta para esta vez, irse definitivamente.

Dejo caer mi cuerpo en la cama como si estuviese demasiado agotada. Cierro los ojos soltando el suspiro más largo y dramático de la noche, hasta que recuerdo que dejé mi cámara en el departamento de Shawn.

Menuda estúpida. Tendría que pasar por ella hasta pasado mañana, si es que me acordaba de hacerlo.

(...)

Hace un par de días me había burlado de papá por dormir bajo el sol, y ahora era su turno de burlarse de mí. No supe en qué momento me quedé dormida sobre la toalla y fuera del quitasol con las gafas puestas, lo único que sabía era que desperté y la cara me ardía como si me hubiese echado agua caliente, y no era para menos. Después de un buen rato de burlas, mamá me mandó a la cabaña a buscar un gel para las quemaduras antes de que ardiera peor, aunque estaba segura de que no podría doler más.