Alicia: Guerrera Del País De Las Maravillas

Broma de una rubia

Todo se volvió extraño tras aquella pelea que fue encaminada desde el comedor real hasta las habitaciones del dúo en las cuales sus puertas fueron cerradas bruscamente. Tanto, que provocó emitir un estruendoso sonido proveniente de las puertas.

Mirana se sentía confundida. ¿Por qué tenían esa horrible conducta si ellos siempre eran tan unidos?

La muchacha de cabellera con una combinación de colores alusivos, se acercó a la extrañada reina nívea

-No es mi intención desesperarla ni mucho menos preocuparla Majestad, pero creo que esto se ha convertido en una pelea

-Sí. Alicia contra Tarrant

Afirmó la liebre elevando su peluda oreja izquierda. Una vez más, la preocupación domaba a la magnificencia.

Esa mañana, la rubia había despertado angelicalmente a pesar de la breve pelea con el Sombrerero la noche anterior. Se vistió y sin previo aviso una sorpresa estaba preparada tanto para ella como para él.

Casualmente ambos salieron de sus alcobas al mismo tiempo, quedando frente a frente. Obviamente persistían bastante molestos, sin decir una sola palabra ignoraron sus miradas y se dieron la media vuelta a continuar sus caminos.