6- La Organización

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─Necesito la historia clínica de Fabrizzio Mutti.
─¿Qué pasa con Mutti? Es muy popular...
─¿Por qué lo decís Álvarez?
─La doctora Baron me la pidió también.
─¿Cass? ¿Cuándo?
─Ayer... está saliendo con el paciente o algo así creo.

Máximo frunce el ceño.

─¿Se la llevó?
─Por supuesto que no. Solo la revisó unos momentos aquí en la oficina.

El doctor Costa toma la historia clínica y se va al laboratorio. Está preocupado. Lo único que falta es que Cass meta sus narices donde no debe.
Máximo Costa es un prometedor hematólogo a cargo del Centro de hemodinamia del Hospital Central. Con treinta años se convirtió en el director más joven del área. Todo gracias a su padre, un eminente hematólogo de fama internacional.
Lo que el mundo no sabe son las oscuras experimentaciones que hacen en nombre de la ciencia pero por amor al dinero.
Hace tres años comenzó donde su padre había dejado. Una investigación de casi diez años. Como parte de un selecto grupo que cuenta con los hombres más poderosos del mundo, sea por dinero o por posición todos tienen una gran influencia en varios ámbitos por los que han alcanzado cierta impunidad para cometer los más atroces actos en pos del bien de unos pocos.
Uno de los descendientes directos de los socios fundadores de esta logia, padece una extraña enfermedad en la sangre. Para su cura necesitan
aislar una proteína que sólo puede hacerse a partir de una mutación genética. Está muy cerca de lograrlo y no querría tener que tomar medidas drásticas justo con Cass. La joven de verdad le gusta, pero sabe que no tiene muchas opciones a la hora de proteger "La Organización".
¿Desde cuándo Cass tiene novio? Cuando el tipo estuvo internado ella no lo conocía. Jamás se acercó a verlo. De eso está completamente seguro.
Hay varios puntos que no concuerdan. Tendrá que averiguar, pero él nunca ensucia sus manos. Deberá enviar a sus muchachos.
Tal vez una advertencia sea suficiente.

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Cassandra

Me dirijo a fiscalía para averiguar como sigue la investigación del accidente de Fabrizzio.
Después de rebotar de un escritorio a otro me dijeron que no existía ninguna causa. Esto es demasiado extraño. No me dicen que es una causa cerrada, sino que no existe tal causa.
Me informó el doctor Álvarez que la comisaria cuarta se ocupó de las primeras investigaciones del caso antes de llegar a fiscalía. Allí me dirijo.
Como temía, en la comisaría no hay registro de lo que pasó esa noche. Ya no me asombra. Acá hay algo demasiado oscuro.

No puedo simplemente decirle que no me fue posible averiguar algo de esa noche... lo destruiría. Puse en él esperanzas que no tenía y ahora no soy capaz de quitárselas nuevamente de un plumazo.
Algo se me tiene que ocurrir.

Llego al hospital y reviso en la grilla del mes los turnos de esa noche. Tomo nota de cada médico, enfermero, camillero, hasta el personal de las ambulancias.
Ahí me detengo especialmente, ya que ellos fueron los primeros en llegar al lugar.
El chofer era Fernando, los paramédicos Diego y Sergio, Valeria fue la enfermera que recibió la urgencia hasta que fue atendido por el doctor Gallego, residente en emergencias.
Voy a hablar con cada uno de ellos.

Me cruzo con Máximo y aprovecho para hablar también con él. Es el jefe de Hemodinamia. Debería saber algo.
Cuando le doy las referencias de lo sucedido esa noche para conocer su opinión sobre el caso me dice que no se cruzó con ese paciente.
- Habrá estado a cargo de Luisa.- Se desentiende.
Me extraña porque como director al menos debería verificar todos los casos que se atienden en su área.

Termina mi guardia y sólo he podido ubicar a la enfermera que lo recibió. El residente de emergencias tiene otro horario esta semana, igual que el camillero. Lo más extraño es la licencia de los paramédicos y el chofer de la ambulancia. Cada vez estoy más convencida que detrás de todo esto hay algo demasiado grande y oscuro.

Un pacto "Amor Y Sangre"  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora