Hola mis criaturitas:) Y por fin la segunda parte de la maratón y ultima pero no os preocupéis que mañana habrá un capítulo normal, de los largos:’) Se que siempre cuelgo los capítulos muy tarde y quiero disculparme por ello ya que a veces si que es porque me estoy mucho rato para escribirlo pero a veces es porque he quedado, como hoy y tardo más en escribirlo, sorry vv’. Y ahora si os dejo con el capítulo que espero que lo disfrutéis y que os guste.
Like y fap<3
______________________________________________________________________________________
*Narra Rubius*
Mangel: Venga Rubius que nos están esperando.
Rubius: ¡Que ya voy!
Salí corriendo de mi piso en el cual aun había varias cosas de ____, las cuales no tenía el valor de tocar. En la puerta me estaba esperando Mangel el cual al verme me cogió del brazo y me llevó hasta el portal en el cual nos esperaban Alex y Cheeto des de hacia ya un buen rato.
Rubius: Siento llegar tarde chicos.
Alex: No pasa nada. ¿Nos vamos?
Rubius: Si.
Seguimos el camino a una disco y una vez adentro yo estuve la mayor parte del tiempo sentado en la barra bebiendo. Hasta que vino él.
Wismichu: ¿Cómo es que no estás con ____? – Me gire y al verlo me entraron ganas de partirle la cara, cosa que no hice.
Rubius: No tengo ninguna gana de hablar contigo, así que por favor lárgate.
Wismichu: ¿Te ha dejado verdad? Jajaja.
Rubius: ¿Por qué lo dices?
Wismichu: Y si no que estás haciendo aquí a estas horas cuando podrías estar con ella perfectamente.
Rubius: No me ha dejado…
Wismichu: Mucho ha aguantado.
Mangel: ¿Algún problema? – Supongo que Wismichu se acojono cuando vino Mangel junto con Cheeto y Alex a ver que pasaba y se fue sin decir nada.
Alex: ¿Estás bien? – Entre que yo ya iba un poco pasado de vueltas con la bebida y no me aguantaba en pie, casi no se me entendía cuando de pronto empecé a recordar a ____ y llorar en medio de la disco.
Mangel: Vamos a fuera. – Entre los tres me llevaron a fuera y una vez ahí entre todos me intentaron animar.
Alex: ¿Seguro que estas bien? Si quieres te podemos ayudar.
Rubius: Solo estoy un poco deprimido, no tengo ganas de hablar de ello.
Cheeto: Tranquilo tío, lo importante es que no te pongas triste. Sea lo que sea no será tan grave, no hay nada que no se pueda arreglar.
Rubius: No se yo…
Alex: ¿Quieres que te acompañemos a casa?
Rubius: Si por favor.
Los tres me acompañaron a casa y una vez ahí cada uno se fue hacia la suya. Creo que les amargue la noche. Me quedé en mi habitación tumbado en la cama mirando el techo sin nada más que hacer que pensar, cosa que en ese momento no me iba muy bien. De pronto recibí un mensaje en el móvil.
*Whatsapp*
Mangel: Mañana ven, te he de contar una cosa.
Rubius: ¿Qué pasa? – No tardó mucho en responder.
Mangel: Será mejor que lo veas tu mismo.
Rubius: Esta bien, mañana vengo.
*Fin Whatsapp*
No sé si fue por el efecto del alcohol o por la manca de energía que tenía en ese momento, pero lo único que sé es que me dormí en un abrir y cerrar de ojos, nunca mejor dicho.
*
Me levanté y miré la hora, las doce y cuarto de la mañana. No tenía ni ganas de levantarme de la cama así que lo único que hice fue coger el móvil y mirar el twitter. Tenía muchos twits de mis seguidores preguntándome porque no subía videos des de hace días, con lo que yo contestaba la típica excusa, “estoy enfermo”. Me sabía mal por ellos pero sabía que si hacia un video se me iba a notar que me pasaba algo y claramente no era que estaba enfermo.
Mirando mi twitter me vino la genial idea de mirar el twitter de ____, y digo genial porque lo que vi me alegro mucho. Había muchos comentarios que le preguntaban cuando subiría videos y tal pero había de otros que le preguntaban si lo habíamos dejado porque ya no nos veían juntos en ningún lado, a lo que ella les contestaba, “Que va, yo le quiero mucho y nunca voy a dejar de hacerlo”. En parte me alegraba mucho pero por otro lado me recordaba lo idiota que fui.
No sé cómo pero me pase dos horas mirando los twits de ____, en cuál de ellos decía nada malo de mí. Como no tenía hambre me dirigí a casa de Mangel para ver que me tenía que enseñar. Llegué al portal de su casa y justo delante había un camión de mudanzas con hombres que subían cajas. No puede ser… Había vuelto.
Subí corriendo hasta el piso de ____ ignorando el de Mangel. Llamé el timbre con desespero hasta que se abrió.
