110. Maratón p.1 Braindead

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Hola mis criaturitas:) Como dije en mi perfil, no iba a escribir hasta la vuelta al instituto, pero como son muchos días, pues he descansado un poco de estudiar (Si, tengo que hacer un examen de recuperación de Ciencias de la Tierra y del Medio Ambiente el primer día de la vuelta al instituto) y me he puesto a escribir para vosotros. Después de este capítulo ya tendréis que esperar hasta el día ocho, que es cuando volveré a tener internet, ya que me iré a mi pueblo el día uno y ahí no tengo internet:( Pero bueno, espero que disfrutéis de este capítulo y muchas gracias a todos los que me felicitasteis por mi cumpleaños^^ Y no, no tengo cuenta en YouTube como me preguntabais:’) Y otra cosa más, no tengo mucho sueño, así que hare otro capítulo para vuestro body:$

Like y fap<3

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*Narra ____*

Hoy por fin es el día, hoy iré a buscar a Sandra a la estación. Tengo bastantes ganas de volver a verla, se quedara en casa con Lucia y conmigo, en principio se iba a quedar solo cuatro días, pero ya que en noviembre será mi cumpleaños la hemos convencido que se quede hasta entonces, aunque nos ha costado lo nuestro convencerla. Cuando este aquí en casa ya intentaremos convencerla para que se quede hasta fin de año, lo hemos hablado con Lucia y a las dos nos parece bien.

Lucia: ¿Pero tú has visto la hora que es?

____: No, ¿por qué?

Lucia: Queda un cuarto de hora para que Sandra llegue a la estación, yo que tú me daría prisa.

____: Mierda, gracias Lucia, hasta ahora. – Salí por la puerta a toda prisa poniéndome el abrigo como pude a la vez que me echaba a correr camino a la estación. Y ahí estaba yo, corriendo como una loca por las calles de Madrid sin mirar muy bien a la pobre gente a la que le daba un codazo y me llevaba por delante, me sentía como Leónidas. Aunque hubo a uno que no lo derrumbe, fui yo la que se cayó al suelo.

Rubius: ¿Estás bien? - ¿Qué es esto? ¿Qué es esta sensación de déjà vu? Como si ya hubiera estado en una situación parecida. Se me vienen unas imágenes muy raras a la cabeza, no puedo distinguir nada, pero se me hacen muy cálidas. No paraba de tocarme la cabeza, tanta intriga me estaba matando. – Si que te has dado fuerte en la cabeza, lo siento de verdad. ¿Quieres que llame a una ambulancia o algo?

____: ¿Tan débil parezco? – Me levante como pude haciéndome la fuerte.

Rubius: Claro que no jajajaja. ¿Dónde ibas con tanta prisa?

____: Pues iba… ¡OH MIERDA! – Volví a correr en dirección a la estación. – Ya hablaremos Rubius. – Le grite mientras corría. Al fine llegue a la estación y se ve que el tren ya había llegado hace un buen rato. Vi a varia gente en la estación, pero solo una persona que me miraba en la distancia con cara de asesina planeando mentalmente como matarme lenta y dolorosamente. Me acerque a Sandra antes de que me lanzara un machete imaginario o algo así. - ¡Sandra! ¡Cuánto tiempo! Me alegro mucho de verte. – Nos abrazamos como los teletubbies que mirábamos de pequeñas juntas y su cara de asesina en serie paso a ser una de carnicera con pocas ganas de trabajar aguantando los cotilleos de las viejas teniendo a su disposición peligrosos cuchillos afilados para cortar la carne.

Sandra: ¿Se puede saber dónde estabas? ¿Qué ha pasado con la legendaria puntualidad de la famosa youtuber ____?

____: Famosa, lo que se dice famosa no lo soy mucho jajajaja. Ahora hace MUCHO tiempo que no hago ningún video, si te soy sincera no me acuerdo de cuando los hacía, soy así de genial.

Sandra: Ay, es verdad, lo del accidente… - Ahora su cara era la de un conejito al que estaban a punto de degollar.

____: Tranquila mujer, lo llevo bien. La ventaja es que no me acuerdo de nada, así que no tengo de que ponerme triste.

Sandra: ¿De dónde sacas esa fuerza interior?

____: A veces has de ser tu propio héroe para seguir adelante. Bueno, no hablemos de cosas tristes. ¡Que estas en Madrid!

Sandra: ¡Lo sé! AAAAAAAAAH. – Después de hacer un poco el gilipollas para la gente de la estación nos fuimos hacia mi casa. Esta vez con calma, porque de la emoción había olvidado que ya no sentía las piernas de tanto correr. Mi móvil empezó a sonar y en la pantalla vi el nombre de Rubius.

*Conversación Telefonica*

Rubius: ¿Dónde ibas con tanta prisa muyaya?

____: Iba a buscar a Sandra a la estación, que llegaba tarde. Por cierto, de camino a mi casa hemos ido hablando y le parece genial que quedemos hoy los cuatro para una cena, aunque no quiero dejar a Lucia sola en casa, así que hemos pensado que podrías venir vosotros dos a casa. ¿Qué te parece?

Rubius: Me parece perfecto, ahora se lo diré a Mangel. ¿A que hora os viene bien?

____: A las nueve más o menos si te va bien.

Rubius: Va bien, pues hasta la nueve. Por cierto, ¿estás mejor del golpe? Te he notado como mareado y me he preocupado.

____: Si, estoy bien, tranquilo. Gracias por preocuparte. Hasta la noche.

Rubius: Hasta la noche.

*Fin Conversación Telefonica*

Sandra: ¿Quién era?

____: Rubius.

Sandra: ¿Y porque le has dicho que estabas bien y que no se preocupara? ¿Es que te ha pasado algo?

____: Como he venido corriendo a la estación, de camino me he chocado con él y me he dado un golpe en la cabeza. Por eso me ha llamado, para saber cómo estaba.

Sandra: Que bonito, yo también que alguien se preocupe por mí.

____: Puede que esta noche se cumplan tus deseos.

Sandra: Ya veremos jajajaja.

*Narra Rubius*

Llamé a Mangel y se lo conté todo, habíamos quedado un poco antes de las nueve en su piso para hablar un poco, ya que ella vive justo arriba y tendríamos tiempo. No me lo creía ni yo, pero estaba muy nervioso. Cuando faltaba media hora para las nueve me fui de camino a casa de Mangel para ver si me relajaba un poco de una vez. Llamé al timbre y me abrió.

Mangel: ¡RUBIUS! Que hoy mojamos los dos eh.

Rubius: No seas tonto Mangel, tu puede que si, pero yo aun lo tengo muy verde con ____.

Mangel: No estés nervioso anda, si el que tendría que estarlo soy yo, no tu jajajajaja.

Rubius: Tienes razón. ¿Subimos ya?

Mangel: Si. – Y eso hicimos, subimos las escaleras y en menos de un minuto estábamos delante de su puerta y llamando al timbre. A mí solo me faltaba cogerle la mano a Mangel para apretujarle y relajarme un poco, aunque creo que no solo fue un pensamiento.

____: Pero mira que monos, si hasta vienen cogiditos de la mano, creo que hoy Sandra se va a quedar a dos velas jajajaja. – Buena forma de empezar la cena.

Meet the Rubius IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora