Amor Prohibido 🌹 (EN EDICIÓN)

Capitulo 3

—Bueno, cada vez falta menos para llegar al Castillo. No tengo mucho tiempo.— dice la Princesa subida en su auto.
Sentía paz al saber que llegó a su hogar pero a la vez un pequeño vacío dentro suyo. Aun la atormentaba aquel momento. Para no tardas más, decidió dejar su auto en la pista e ir solo por sus prendas en su cuarto.

Vanellope P.O.V

—Ya está todo listo. Otra vez con este tonto vestido, aunque también puedo ir sin el.— dije mientras me miraba en el espejo de mi cuarto —¿Que me falta?— susurre —Cierto cierto, poner el auto en posición de la salida de la carrera.
—¡Ay no!— Grite sin pensarlo mientras agarraba mi cabello recien adornado. —Agrio Bill me esperaba para ver cómo andaban todos los jugadores.— me mire al espejo sin razón alguna —¿Que me esta pasando? Está no soy yo. Nerviosa me acercaba al espejo, sentía culpa.

—Ahora que lo pienso, olvide todo lo que tenía que hacer por estar con Ralph...— toque mis labios —Casi nos besamos— mumure, me senté sobre este reflejo, sentía como mis mejillas tomaban calor con aquel recuerdo. ¿Por qué?, ¿Por un reto?, ¿Un juego?, ¿En serio quiere esto conmigo? Me tiene tan confundida, soy su amiga de hace muchos años, ¿Sera que el también me gusta? Pensar eso hizo que sacuda mi cabeza. No lo había visto de esa manera. Capaz que fue solo un desliz, pero mi pobre mente no me dejaba tranquila, sentía que debía preguntarle pero ¿Como? ¿y si me equívoco y se burla?. El miedo se apoderaba de mi. Nunca lidie con estos temas, ya que por primera vez vivo tal experiencia. Primero lo primero, debo averiguar por qué quiso besarme. Solo espero que no halla sido por un reto sino eso rompería nuestra amistad. Suspire para ponerme de pie nuevamente, acomode mi vestidos y me dirigí hacía la salida de la carrera.

—Suficiente de tanta incertidumbre, mejor voy con Agrio Bill, el de seguro tiene  todo listo en el arcade ya que entro en función.
Pasaron unos segundos y escuche como las puertas del Castillo se habrían queda esperar para ver quién era, Agrio Bill apuraba sus pasos para llegar pero como siempre serio y decaído.

—Señorita Von Shweetz debe de ir a con su auto a la pista de carrera, los jugadores pueden elegirla a usted está vez.— comentó dando una pequeña reverencia.

—Gracias Agrio Bill, en seguida y antes de ir quisiera hablar algo con vos y es importante que lo hablemos.— respondí acercándome a el e intentar animarlo.

—¿Que paso señorita Von?, ¿Es delicado?— miro curioso.

—No me gusta verte desanimado, triste la mayor parte del tiempo. Y tengo una idea algo loca, ¿Que dices?, Seguro deseas tener una compañera la cual puedas amar.

Agrio Bill al escuchar mí noticia sus ojos caídos se abrieron por completo. —¿En serio lo dice princesa Von?, ¿Cómo puede conseguir una novia para mí? Casi todo el pueblo tienen su pareja. Y yo... Solo soy un agrio caramelo.

—No digas eso, sabes que no es cierto, pero piénsalo hace un tiempo fui hacíael programador del arcade, con el conocimiento que llevo eh estado creando una novia para ti, mañana estara lista. Claro mientras aceptes tal regalo.— En ese instante pude ver una pequeña sonrisa en Bill qué alegró mí día. —Oh... De verdad no sabe de agradecido que estoy con usted. Gracias. No se imagina la felicidad que me ah dado.

—Tranquilo— Sonreí mientras tomaba su mano —Todo sea por verte feliz, pero a cambio quiero pedirte algo. No es necesario que me trates de "Usted" simplemente dime Von o Vanellope.— este me miro un poco confundido, era algo nuevo para el.

—Es que... siempre respete su altura del poder señorita Von  me costará mucho decirle por ese nombre. Discúlpeme​.— respondió apenado.

—Bueno, dejemos esto para después. Hay que irAgrio Bill sino será tarde.— aclare para tomar su pequeña mano en ir hacía la pista de carrera.

(...)

Ralph P.O.V.

Sentía como sería de largo este día por tal frustración pero había algo más que me preocupaba y era como explicarle a Félix que estoy enamorado de Vanellope. Estoy seguro que se enojara y en más es capaz de decirle a vanellope, ella se enojara conmigo y no me hablara más y lo que menos quiero es perderla no lo soportaría.

—¡Ay!... —grite mirando hacia el cielo. —Que hare... como le explicó a Vanellope que quería besarla por lo qué siento.— dije medio desanimado. —Tendré qué negar todo por nuestra amistad, se que ella me ve solo como su amigo y tendré que vivir con eso, no quisiera perderla por un sentimiento no correspondido.— Recordaba su rostro sonrojado, su presencia arriba mio, cerrando mis ojos mientras mordía mis labios inferiores —Bueno es hora que comienza el día, ojalá pase rápido.

—¿Ralph, pasa algo?, ¿Por qué hablas solo?— escuche la voz de Félix preocupado, estaba a unos metros de mi. ¿Ahora?.

—Para ser sinceros, es algo que quiero hablar con vos Félix. Esta noche no me reuniré con Vanellope. Quisiera aclarar algunas cosas, es mejor que no halla dudas entre los dos.—  Comenté rascando mí nuca ya que no sabía cuál sería la respuesta del enano.

—Está bien Ralph, me encargaré de decirle Vanellope de por que no puedes ir y vuelvo para que hablemos del asunto y creo que pensamos lo mismo en el tema.— Dijo seriamente aunque no me importaba. —Pero primero hagamos nuestro trabajo. Evitemos un problema.— termino de decir alegremente para levantar los ánimos en un abrir y cerrar de ojo.

—Si si... Vamos Félix— Apenas respondi mí mente hablo por si sola. —Niña, tu presencia y tu ser hacen estremecer mi cuerpo y desesperar a mi corazón.

(Editado.)