Amor Prohibido 🌹 (EN EDICIÓN)

Capítulo 42

Otro dia transcurrió pero difícil para el Arcade de Félix ya que los inquilinos estaban preocupados de que Ralph no llegará, este solo les pidió que tomaran sus lugares, el nada más sabia donde estaba, yendo al hogar de su amigo entró para buscarlo por cada rincón, al final lo encontró en su habitación, pudo ver cómo su amigo apreciaba una foto de la princesa con el, los dos abrazados a punto de besarse. El reparador animado se acercó hasta el, necesitaba ánimos para el nuevo día, para reunirse con Vanellope.

—Amigo, vamos no puedes estar así...

—¡Félix! ¿Que haces aquí?— dijo exaltado.

—Al parecer soy el único que te conoce de nuestro juego, vine a darte animos.

—No lo necesito, por favor dejame solo.— respondio para volver a su cama.

—Vamos Ralph, el día esta empezando y nostros no estamos dando la imagen.

—Dentro de un rato iré pero más que eso no haré...— aclaró sin mirarlo.

—¿En serio lo dices? Después de todo tu solo te metiste en esto por enamorarte de ella aún estando prohibido.

—No lo hice queriendo, el tiempo hizo lo suyo, ella con su esencia me volvieron loco. Ahora no puedo sacarla de mi mente por más que lo intente.

—Este no es momento para discutir, primero terminemos este día. No queremos preocupar a todos.

—Basta Félix, si no vas a ser paciente te pido que te retire.

—No. Me vas a escuchar.— aclaró para saltar sobre el y darle una bofetada. Ralph quedo sin palabras no pensó que su amigo se enojaria.

—Si estuviera en tu lugar no me importaría quien la este pretendiendo. Iris tras ella para buscarla y decirle que jamás renunciare a su amor.

—Ella va rechazarme y eso hará que desee desaparecer.

—Te aseguró que ella no te va a rechazar, no sabes como anhela tu presencia.

—Entonces comencemos el día, hay que acabarlo rapido— expresó animado para salir de la cama e ir hacia la salida de su jugar pero algo lo detuvo, una duda que aún le costaba creer.

—¿En serio aceptas esto? Pensé que estarías muy molesto.

—Se que estoy rompiendo las reglas aceptando tu amor hacía ella. Pero ahora no eres el único. Prometo hacer todo lo posible por su bien, aunque ello me cueste el nombre de mi padre...

—Félix...

—Tranquilo, no hay muchas posibilidades pero quiero que sepas que esto será una gran responsabilidad.

—Gracias por por todo...

—Lo único que espero y deseo de ustedes es que cumplan con esta responsabilidad y estén siempre uno para el otro.— aclaró Félix para ir a la salida con Ralph, este lleno de alegria comenzo el día con una gran paciencia. Al llegar la noche el Arcade ya cerraba sus puertas.
Ralph sabía que debía de ir a ver a Antonella porque no la fue a ver la anterior noche. Félix al escuchar esas palabras, quería decirle la verdad pero decidió guardarlo, solo le deseo suerte. Al poco tiempo que se fue el demoledor llegaron Calhoun y Ada, juntos se fueron para Sugar Rush.

Vanellope terminando su última carrera no podía dejar de pensar en cómo haría para hablar a Ralph, varias ideas pasaban por su mente pero ninguno la convencía. Bajando de su vehículo noto que Bill ya la estaba esperando, ambos fueron las castillo y al entrar ella noto que Rancis ya la estaba esperando acompañado de Candy.

—Debes de distraerte un poco Vanellope, por eso le pedí a Rancis que venga por ti.

—Pero...— susurro para mirar como el corredor la esperaba muy animado —Esta bién solo lo haré por ti.— respondió Vanellope a Bill. Se despidió de ambos y se retiró del Castillo.
Agrio Bill con Candy se encontraban en la cocina preparando algo para comer, se sintió el timbre y Candy fue a atender, eran Calhoun Félix y Ada, la pequeña se fue rápidamente a jugar con los guardias mientras que sus padres trataban el tema de como reunir a Ralph y Vanellope. Una idea loca paso por la mente de Bill, emocionado les pidio a todos que prestaran atención.

—Podemos hacer una nueva fiesta. Pero que sea una disfraces, las cuales podrán ir muchos más personajes. Con tantos invitados nadie prestará atención a Ralph y Vanellope.

—Pero... ¿No va en contra de su sistema?— pregunta Félix

—Puedo ir al sistema e ingresar que se hará una fiesta con la escusa de hacer nuevas alianzas.

—Es una gran idea, y si la fiesta tiene variedad de invitados no sabrán el verdadero propósito— expresa Candy muy animada.

—Es muy cursi pero también se puede hacer otro vals, quizás ellos se crucen y terminen bailando.— dice Calhoun, Félix conmovido tomó su mano.

—Entonces hay que hacerlo. ¿Que dicen?— pregunta Bill.

Todos felices aceptaron pero sabia que llevaría sus días, nuevamente debían hacer las invitaciones, acomodar el Salón del Castillo y además de adornar nuevamente todo. Acordaron que para tener todo listo mínimo un mes podrían dar el anuncio. Bill sin esperar fue hacia el sistema del juego para dar la notificación lo cual el juego no lo rechazó, era un alivio. Volviendo al salón principal escucho como Félix advertía que había que estar atento con Ralph ya que sabían que Antonella lo engañaba, su miedo era que esta le diera la noticia de que sería padre cuando hay más posibilidades de que no sea suyo.
Mientras tanto Ralph ya se encontraba con Antonella, tomando varías bebidas, de poco la tensión iba subiendo, Antonella tomó la mano del demoledor para llevarlo a su juego. Al llegar esta no tuvo paciencia y deseaba entregarse a Ralph, este aceptó pero tomando la precaución de protegerse.

(...)

Rancis y Vanellope caminaban de la mano por todo sugar Rush observando el paisaje y comiendo unas pequeñas delicias echa por los habitantes.

—Ahora que estamos solos y tranquilos. ¿Puedo saber que te dijo Bill?

—¿Sobre eso? No debes preocuparte preciosa. Me dejó en claro mis límites después de entender lo que sucedió ayer.

—En serio perdon Rancis. Nunca crei que Bill lo tomaría así. Debi dejar que te vallas...

—No lo digas Vanellope. El solo desea tu bien. Si no pasaba ayer seguro sería otro dia. Nos tentamos y es normal.
Pero también hay que entender que necesitas traer un hijo dentro de un matrimonio...

—Odio decirlo pero ya no quiero ser reina...

—¿Por que Vane?

—Esto de buscar a alguien ya me canso, no puedo hacer nada. Tenía libertad de salir a donde sea. Si hacia una locura nadie podía cuestionarme. Ahora Sólo puedo, seguir el Protocolo que dice Bill. Culpa de esta actualización perdí a muchos amigos...

—En esos amigos esta Ralph ¿no?

—Creo que si. No lo volvi a ver desde que llegamos. Tengo entendido que no quiere saber nada de mi.

—Hay que dejarlo, el tiempo lo hará perdonar. Hasta eso trata de divertirte.

—¿Divertirme? Hace mucho deseo salir de Sugar Rush para disfrutar los Juegos vecino pero Bill dice que es peligroso.

—¿Quieres arriesgarte? Vamos, después de todo yo responderé por ti Vane. Necesitas liberarte un poco.

—Ammm...