Amor Prohibido 🌹 (EN EDICIÓN)

Capítulo 33

—Bueno princesa te daré un regalo especial ya que es esencial en estos momentos.— expresó Calhoun para sacar de su espalda un objeto que llevaba como mochila. Separó en dos el artefacto para que estos se activarán, dos aero deslizadores estaban esperando a ser usados —Si puedes manejar un auto a tal velocidad esto debe ser un juego.

—Esto, esto es maravilloso Calhoun... Muchas gracias, con esto llegaremos a tiempo.

—Entonces vamos, Ada ira en mis brazos solo hasta que te acostumbres.

Narradora

Juntas y emocionadas llegaron al local donde se encontraba la modista, miraban cada vestido, uno más hermoso que otro. Indecisas, la pequeña Ada decidio curosiar unos armarios que se encontraban al fondo del lugar. Calhoun noto la falta de su pequeña que empezó a llamarla muy asustada, Vanellope empezó a hacer lo mismo ya que el local era muy grande.
La modista sabia como eran los niños con su curiosidad, tranquila fue buscando a la pequeña en los armarios, la pequeña se había quedado encerrada en uno, ella ya tenía un pequeño vestido puesto que le había gustado mientras se había aferrado a otros vestidos muy llamativos. Tanto como Vanellope y Calhoun quedaron sorprendidas, ambas tomaron cada prenda para probarlos. Por otro lado la pequeña Ada ya no quería sacarse el vestido que llevaba puesto. Al estar decididas las tres se dirigieron para pagar, aunque Calhoun insistía en pagar Vanellope término haciéndolo pues quería darles un detalle por haberla ayudado en un momento decisivo. Salían felices por la compra hasta que se toparon con algo que no pensarían ver. A lo lejos las dos personajes veían a Ralph acompañado de su pareja. Estos se encontraban tomados de la mano.

—Vanellope, ¿No piensas hablarlo?

—¿Para que? Ambas estamos viendo lo feliz que es. No existo en su vida.

—Puedes intentarlo, al parecer se están despidiendo.

—De seguro solo va a comprar algo y vuelve con ella.

—No te insistiré. Volvamos a tu Arcade, de seguro Félix no aguanto las ganas y ya empezó a adornar el lugar.

—De acuerdo— respondió la princesa, en el camino esta se dio cuenta de que olvido el regalo que le hizo su amiga en el local. Se disculpó e insistió en ir mientras que la sargento se adelante con la pequeña Ada.

—Cualquier cosa que necesites llama princesa.— aclaró Calhoun sacando su Aero deslizador y tomando a la pequeña en sus brazos.

—Entendido, hasta eso busco unos adornos para mi cabello. Nos vemos allá.

Vanellope al volver al local de la modista pregunto por su Aero deslizador, se alegró de saber que se lo habian guardado. Al salir nuevamente e ir a otro pequeño negocio para ver los adornos que llevaría en su cabello pudo notar como el demoledor realmente se despidió de su pareja. Curiosa observo a donde se dirigía cada uno, mientras que Ralph se iba para el Arcade de Pac-Man veía como su pareja se dirigía hacia un lugar que no era su juego. Sin pensarlo empezó a seguirla y pudo ver que entraba hacia Tapper. Al entrar esta no quería levantar sospechas, se puso su capucha además miraba para abajo.
Al tomar asiento Tapper se acercó a ella ya que debía ofrecerle algo para tomar. Ambos se asustaron de verse.

—Increíble verte por aquí niña...— susurró entregándole una bebida —Ver mujeres como vos por aquí es peligroso.

—Gracias por no gritar... La verdad que no pensaba venir pero es que algo llamo mi atención...— respondió de la misma manera.

—Lo único que puedo hacer por ti es distraer a los hombres de este lugar. Como sabrás se emocionaran de verte ya que muchos vieron tu anuncio pero fuiste alguien exigente.

—Estaré muy agradecida amigo. Nos vemos después...— respondió por último Vanellope, tomó rápido su trago y tomó el camino por donde fue Anto.
Tapper mientras tanto distraía lo más que podía a los jugadores la princesa veía como esta se metía hacia una habitación con el cartel de "Cosas pérdidas". —Al parecer solo se Vido algo, que tonta...— susurro para sí misma, cuando estaba dando la vuelta para retirarse alguien paso por su lado muy apurado, casi la hace caer. Pensaba reclamarle pero se detuvo cuando presenció que este se dirigía hacia la personaje Antonella. Sus ojos no podían creer lo que veía. Estos entraron juntos a la habitación muy coquetos, con beso entre caricias. Vanellope sintió mucha ira. Ella le había quitado la persona que ama y ahora estaba con alguien más a escondidas, pensaba actuar y reclamarle pero inesperadamente su celular empezó a sonar desde su bolsillo. Alterada salió corriendo del pasillo aún pensando como alguien sería capaz de eso. Pensando que ella jamás sería capaz de hacerlo. Al volver hacia Tapper trataba de tomar aire.

—Princesa debes irte, hay varios que murmuran la llegada de una mujer muy hermosa.— susurro Tapper dándole otra bebida.

—Solo quiero que aclares una duda y me retiro. No quiero mortificarte más.

—Digame princesa.

—¿Por que no hay remordimientos cuando alguien decide engañar a su pareja?

—Por ahora solo puedo decirte que no hay remordimientos. A veces no es intencional, ya sabes por el exceso de bebidas por eso hoy en día se piensa dos veces si deseas estar con alguien que es capaz de fallarte. ¿Por que esta pregunta?

—Te lo diré en otro momento, estamos llamando mucho la atención— susurro para que este se diera cuenta como eran observados. Al despedirse no notó que alguien la había visto, unos de los integrantes del juego Pac-Man la miraba sorprendido, no quería creer lo que veía, la princesa de Sugar Rush había vuelto. Los rumores eran ciertos.
Al salir y dirigirse a su arcade vio como su amiga la buscaba muy preocupada.

—Santos pixeles Vanellope. No regresabas y peor aún rechazabas mis llamadas.

—Pero estoy bien, solo me distraje con otros locales. Cuando me di cuenta de la hora también pude ver que me habías llamado.

—Solo no lo vuelvas a hacer... En serio me preocupaste.

—Lo prometo, perdón por tenerte así.

—Bueno vamos, Félix con los demás propusieron buenas ideas solo debes de aprobar una así enviamos las cartas de invitación, debemos de avisar antes o ninguno irá.

—Está bién, esta fiesta llevará su tiempo. De paso tengo que ver un peinado para la ceremonia.

—Eso déjalo para después Vane esto es más importante, tiene que estar todo perfecto si sale algo mal acabara todo.

—Si si... Tienes razón mi buena amiga.