Amor Prohibido 🌹 (EN EDICIÓN)

Capítulo 43

Rancis sin miedo llevo a Vanellope a la estación central. Pasaron por varios locales, saludando a varios personajes mientras que otros se inclinaban, esta les recordó que no están obligados, preferían que la saluden normalmente.
El corredor le dio varios presentes de varias tiendas. La entretuvo con varios Arcade vecinos.
Al salir de otro Arcade Vanellope se disculpó con Rancis ya que debía de hacer sus necesidades, este aceptó para decile en que la esperaba, al irse y dejarlo solo por un rato vio un local vendiendo todo tipo de flores, queriendo demostrar su amor por ella fue para comprarle unas Rosas, quería dársela frente a toda la estación central. Al pagar y salir de la tienda miro sin querer el Arcade De Félix, sus ojos vieron como el demoledor salía del juego acompañado de otra mujer. Su ira se hacía presente, el era consciente de que Vanellope aún sufría por Ralph, el entendía que Vanellope aún estaba enamorada de aquel villano aunque no se lo dijera. Un llamado a su nombre lo hizo  desviarlo, era Vanellope que lo llamaban desde lejos. Temia a que viera a Ralph, su celos yacían presentes que rápidamente se acercó a ella para arrodillarse y así entregarle las Rosas. Todos los presentes en la estación estaban conmovidos por esa escena, aplaudían el detalle, Vanellope apenada y sonrojada aceptó el ramo.
Ralph salía de su Arcade abrazado a Antonella, esta no dejaba de decirle cuanto lo disfruto pero su mirada estaba puesta en los personajes reunidos aplaudiendo algo. Antonella le pidió ir ya que quería saber que pasaba, decía haber escuchado que en el medio habia una pareja muy enamorada. Este sin opción aceptó, mientras más se iban acercando no sabía si arrepentirse ya que pudo ver que aquella pareja enamorada eran Vanellope y Rancis, observaba cómo recibía el gran ramo de Rosas. Quería irse pero Antonella no se lo permitia. Rancis pudo ver cómo el demoledor observaba todo, ambos se miraron con odio, sintiéndose orgulloso de tener a la princesa la abrazo para después besarla frente a todos, quería hacerlo sentir miserable por hacerla sufrir, los personajes más aplaudian y alababa. Lo miraba victorioso, demostrando que el podía hacerla feliz sin tanto sufrimiento.
Cada personaje se acercaba a la pareja para felicitarlos y Antonella no era una excepción, se acercó a ambos para desearle lo mejor. Vanellope sintió aquella presencia familiar pero no sabía de donde era, tratando de evitarla pudo ver a lo lejos a Ralph, sintió aquel cosquilleo por todo su cuerpo. Este también la miraba muy desconcertado, —Vanellope— susurro, aquellas miradas decían todo. Sin importale nada Vanellope empezó a acercarse a Ralph, quería tenerlo frente a frente pero era difícil por la cantidad de los presentes. Por suerte ni Antonella ni Rancis se daban cuenta aún por el alboroto de los personajes.
Ralph noto cómo ella quería acercarse que también hizo la misma acción, pidiendo permiso cada rato de a poco iba llegando. Por su parte Vanellope ya solo empujaba a los que la estorbanan estando tan cerca, queriendo tomar su mano alguien más la abrazo, era Rancis.
Este tomó su mano para pedirle disculpas por la cantidad de jugadores que había, entendió que ya era sofocante estar entre tantos. Le recomendó volver a su hogar antes de que Bill se diera cuenta. Vanellope aceptó pero no dejaba de mirar a Ralph, ninguno de los dos desviaban sus ojos. A pesar todo no se podían odiar.
Antonella volvió con el demoledor notando que este miraba hacia un lugar fijo, al preguntarle este reaccionó algo asustado, el le mintió diciendo que era sorprendente ver a las nuevas parejas de nuevos juegos. Juntos decidieron volver a Tapper para poder charlar unos cuantos temas.

(...)

Camino al castillo Vanellope solo podía pensar en Ralph, más aun por que este había susurrado su nombre, sentía sus mejillas arder imaginando que hubiera pasado si se reunían. Rancis pregunto si estaba bien por que noto su silencio, ella respondió que aún no pensaba en la cantidad de jugadores que se reunieron este río y le dio un beso recordándole que haría lo que fuera por  verla feliz. Llegaron al castillo y fueron recibidos por Candy. Rancis se despidió de Vanellope para decirle que otro dia vendría a verla. Mientras el dúo de amiga se dirigía hacia la cocina Candy admiraba tal detalle que hizo el corredor, tomó el ramo para colocarlo en un jarrón con agua así se mantenían frescas.

—Por lo que veo te dejo conmovida la atención de Rancis.— comenta Candy mirando a su amiga pérdida en sus pensamientos.

—Ah... Si, am ¿Te molesta si vamos a mi cuarto? Hay un tema que me deja pensando y es sobre esto.

—Bueno, llevemos unas bebidas— respondió para llevar una pequeña bolsa con bebidas en lata y en su otra mano unos snacks. Ambas se dirigieron hasta la habitación, se acomodaron en la gran cama de la princesa para comer un poco.

—No se por donde comenzar Candy... Pero ocurrió algo más que salir con Rancis.

—Me tienes con la intriga Vane ¿Que pasó?

—Como sabes a Bill ya no le agrada mucho la idea de que salga por este tema de elegir a alguién, Rancis y yo nos fuimos para la estación central, el me entregó las flores frente a todos y fue un show porque al final todos se nos acercaron para felicitarnos.

—Entiendo tu miedo pero veamos el lado lindo, te dio un detalle que no muchos hacen, demostró que te ama frente a todos sin miedo a nada.

—Lo que sucede es que en medio del alboroto logre ver a Ralph y el me miraba a mi. No sabía que hacer...— con esas palabras Candy quedo sorprendida, llena de curiosidad.

—Oh Santo píxel pero ¿que paso? ¿Se fue?

—Creí que lo haría pero ambos nos miramos, pude escuchar como me nombraba de una manera muy desesperada...

—¿Rancis no se dio cuenta?

—No, había un personaje familiar que se nos acercó a felicitarnos, me molestaba su presencia por que recordé que ese personaje que se nos acercó era la novia de Ralph, cuando la ignore pude verlo.

—Que locura, pero no intentaste acercarte.

—Claro que si. Mis impulsos me ganaron, quería decirle mi verdad pero la cantidad de jugadores no me dejaban pasar, al poco tiempo el empezó a a hacer lo mismo, entendí que desea hablar conmigo.

—¿Llegaron a reunirse? ¿Se saludaron o algo?

—No lo logramos, empecé a estirar mi brazo así al menos el tomaba mi mano pero llegó Rancis preguntando por que me fui, le mentí diciendo que el alboroto me estaba hostigandl.— respondió Vanellope para acostarse y tapar su rostro un una almohada —Quiero verlo Candy...

—Al parecer el tampoco te olvido Vanellope, sino no hubiera intentado acercarse a vos...

—Maldita sea la hora que Félix decidio unirlo con alguien más. Si tan sólo hubiera podido decirle que necesitaba irme...— aclaró Vanellope sin moverse de la cama.

—Esperemos otra oportunidad, te aseguró que cuando vuelvan a encontrarse podrán resolver todo.

—Ya no quiero esperar... Necesito verlo y correre los riesgos por ello ahora te pediré un enorme favor...— aclaró para tomar asiento y tomar un buen trago de su bebida.