Capitulo 45.-

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Llegamos hasta un parque que estaba a unas cuadras, seguí a Max hasta el centro del parque donde había una fuente, caminamos hasta una banca y nos sentamos.

-Y bien –hable- ¿que es lo que me querías decir?

-Paso algo... -se giro a verme- prometes no matarme.

-¿Que hiciste? –rodee los ojos – sin rodeos dilo ya.

-Ok, sabes que yo a veces salgo y pues conocí... conocí a alguien.

-Bien- asentí para que siguiera.

-Y me gusta.

-Que mas Max –dije- oh por dios, -reí ante lo que diría- ¿eres gay? –vi su cara de confusión sin dejarlo responder hable- no te preocupes- puse mi mano en su hombro- yo te apoyo.

-¡Joder ____ no!... eres tonta.

-Gracias, tu igual –me burle- ya dime.

-La conocí me gusto le guste nos acostamos y ahora esta embarazada.

-¿Que?- hable mas fuerte y mi risa se fue- eres idiota acaso no sabes que existen los condones

-Tranquila.

-¿Tranquila?... de verdad eres el mayor idiota –hable mas fuerte haciendo que dos personas que caminaban por ahí nos voltearan a ver- digo si se acostó contigo a la primera –me levante de un salto- es probable que si quiera sea tuyo.

-Lo se no soy idota pedí una prueba de paternidad.

-Bjen –solté aire- ¿cuanto tiene? –pregunte después de unos minutos de silencio.

-Un mes –podía ver la tensión en los hombros de Max.

-¿Y te gusta?

-Un poco.

-Ok –suspire- y crees estar listo para ser padre y eso.

-No –negó- pero tendré que aprender si es mío.

-Piensas , ¿casarte?

-No lo se –frunció el ceño- estoy conociéndola si las cosas funcionan talvez, si no pues solo me hare cargo del bebe.

-Ok –solté el aire tratando de calmarme y me senté- entonces puede que sea tía –sonreí- ¡oh por dios! –hable mas fuerte- puede que sea tía.

-Si, si –sonrió y me abraso- serás tía ya estas vieja.

-Oh cállate –reí- ¿y cuanto tiene que lo sabes? –dije separándome un poco para verlo.

-Una semana.

-¿Que?, tiene una semana y hasta ahora me dices.

-Lo siento, y tu eres la primera en saberlo.

-Bien –fruncí el ceño y me separe por completo- mas te vale.

*********

Buscaba las llaves en mi bolso para entrar en mi casa, eran apenas las 8 de la noche, fruncí el ceño y seguí buscando a tientas en mi bolso hasta que por fin las encontré, abrí la puerta y entre la cerré y fui hasta la lámpara para prender la luz. Se ilumino toda la sala y joder ahí estaba, di un pequeño jadeo, mierda ahí estaba el.

-Maldita sea, con que derecho entras a mi casa- dije mientras pasaba una mano por mi cabello.

-Que significa esto –dijo tomando unos papeles y los puso en la mesa de centro.

Trate de normalizar mi respiración y camine hacia él y las vi eran fotos de mi y Max esta mañana, abrasándonos y gritándole y caminando, ¿acaso me había estado siguiendo?

-¡Que mierda te pasa! ¿por qué me seguiste?- grite mas que enojada- estas enfermo no tienes ningún derecho a seguirme – seguí gritando, no espere una respuesta solo me di la vuelta necesitaba calmarme.

Fui directo a la cocina y prendí la luz, fui a el refrigerador y me serví agua.

-Pensé que eras diferente –dijo Justin a mis espalda.

Rodee los ojos sin comprender y voltee hacia el.

-De que mierda hablas.

-Que engañas a Chris  con él – dijo enseñándome nuevamente las fotos.

-Eres estúpido –reí sarcásticamente- yo no lo engaño..

y por que me sigues.

-Yo no te sigo... lo hace Nathan.

-Oh eso cambia las cosas –dije con sarcasmo alzando mis cejas – tu no me sigues solo mandas a un matón a seguirme.

-Lo hago por tu seguridad por Alexander.

-Que tiene que ver el en esto.

-Pienso que te sigue por que yo no le dije a nadie que tu y yo nos veíamos, es por tu seguridad –dijo señalándome- ahora dime por que estabas con el.

-Bien idiota el es mi mejor amigo es como mi hermano y me dijo que iba a tener un hijo.

-Oh- fue lo que dijo mientras cambiaba su cara de enojo.

-No me vuelvas a hablar así –dije después de unos minutos de silencio- tu no eres nadie, ¿entiendes?, no eres mi papa ni hermano o siquiera mi amigo y si quiero salir y hablar con hombres lo are.

-¿Que no soy nadie?, hemos pasado estas noches durmiendo juntos y nos besamos.

-Eso no te da el derecho –dije y volví a tomar agua- acaso yo te impido que andes con una y otra cualquiera por ahí –dije levantando mis cejas.

Él negó.

-Bien, así que no tienes nada que reprochar.

-Tienes novio –dijo alzando las cejas- ¿no lo respetas?.

-Oh no te enteraste, no me pusiste algo para oír cada palabra que diga –dije irónica- el y yo terminamos esta mañana.

-¿Que? –dijo viéndome con su ceño fruncido.

-Aparte de estúpido, idota, ¿sordo?-dije girando mis ojos y lo vi sonreír.

-Tu me quieres tanto –dijo sarcástico mientras se acercaba- no entiendo por que terminaste si ayer le dijiste que lo amabas.

-Lo dije por impulso y remordimiento, pero hoy termine con él –dije y solté un suspiro cansado mientras tomaba toda mi agua.

******

Llegamos al lunes, Justin y yo estuvimos juntos todo el fin de semana no la pasábamos peleando cada cinco segundos por cualquier idotes pero al final alguno de los dos doblaba su orgullo y pedía perdón, estaba no con el Diablo sino con Justin eso sonaba estúpido pero era verdad, el hombre con el que pasaba tiempo viendo la tele y con el que dormía no se parecía a el estúpido creído que me secuestro, el es gracioso y mas romántico de lo que hubiera imaginado. Él estaba conmigo en la mañana y dormía conmigo en la noche, no sabia que iba a pasar pero al parecer Justin no pensaba alejarse... no aun pero sabia que lo haria, no me hacia ilusiones.

Llegue del trabajo ese lunes, el próximo viernes seria el aniversario de la muerte de mis padres y dejando de lado eso estaba bien con Justin pero Chris siquiera me dirigía la palabra o una mirada, trate de hablar con el pero me rechazo y yo no le rogaría ese no era mi problema, Max ya le había dicho del embarazo a Jay y el estaba enojado conmigo y Max, al menos no lidiaba yo sola con su enojo.

La Amante Del Diablo (Justin Bieber y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora