La Amante Del Diablo (Justin Bieber y tu)

Capitulo 12.-

-¿Que?- me estaba quedando sorda y alucinaba.

-¿Que si te gusto?

Sonreí.

-Tiene un día que te conozco- dije rodando los ojos.

-Lo se y no te estoy pidiendo amor eterno, solo dime si te gusto, de verdad me interesas y no se, quisiera intentarlo siendo mas que tu amigo.

-Ok... podemos ser amigos, pero creo que tu intentarías ser mas que amigo con cualquier mujer.

-No soy tan mujeriego como tu lo vez, ¿puede haber algo mas?

-Claro- susurre con sarcasmo -no se Chris –el estaba mal de la cabeza tenia unas horas que lo conocía y ya quería tener “algo mas”- necesito bajar.

-Solo responde.

Suspire, el no es feo, y cuando no es un completo idiota  me cae bien aunque a veces piense que es un presumido.

-Si Chris ‘puede haber algo’ –dije haciendo comillas con mis dedos, solamente quería salir del elevador.

El sonrió.

-Bien, mañana nos vemos.

Asentí y el presión el botón para que siguiera bajando, llegamos a la plata baja y salimos.

-Adiós-me sonrió- ten cuidado.

-Si claro- dije mientras rodaba los ojos los hombres y sus ganas de follar.

Asentí y camine hasta la salida encontrando justo a Demi.

-Hola-sonrió.

-Demi-sonreí y la abrase.

-¿Lista para ir a comprar toda la tienda?

Yo negué frunciendo el ceño y sintiéndome cansada de solo pensar en ir a recorrer esas tienda, me gustaba comprar mas no ir probándome ropa.

-Si pero iré en mi carro, o ¿quieres que lo valla a dejar?

-Dile a Adrián que venga por el, tiene una llave de repuesto ¿no?

-Si, pero al parecer el esta estudiando y ya no podrá ayudarme.

-Ok, entonces toma tu teléfono y pregúntale si puede venir por el.

Busque mi teléfono en mi bolso, lo saque y marque el numero de mi casa después de dos tonos Yolanda respondió.

-Hola Yolanda.

-Hola ¿Que necesitas?

-Le puedes decir a Adrián que venga a recoger mi auto, esta en el estacionamiento de mi trabajo fila 5 lugar 23.

-Ok yo le digo.

-Gracias, adiós.

Colgué y guarde mi teléfono.

-Bien vámonos de compras -sonreí.

Ella dio un pequeño brinco y nos dirigimos a su auto, entre y ella también, arranco como siempre excediéndose el limite de velocidad.

-Y si vamos por un trago cuando terminemos de comprar.

-Demi, tengo trabajo mañana.

-Por favor, solo un rato te lo prometo.

-Esta bien- siempre cedía fácilmente con ella.

Ella siguió manejando por la calles en dirección al centro de la ciudad donde había muchas tiendas y clubs nocturnos, llegamos después de media hora ella aparco enfrente de una gran tienda y bajamos, me jalo adentro y empezamos a buscar primero en la sección de ropa interior compre 3 trajes de baño, uno azul otro negro y uno morado con adornos azules, después fuimos a sección de vestidos compre uno negro que tenia la espalda descubierta y  uno color dorado que tenia un gran escote, Demi compro 5 trajes de baño y 3 vestidos, sonreí.