Keyra en las nubes (fanfic n.h)

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Me paso toda la tarde del martes inmerso del estudio. El exámen de álgebra no fue la gran cosa, ahora voy por filosofía. Para el jueves y viernes debo estudiar historia y física respectivamente. No será una semana fácil, pero puedo sobrevivir a las horas de esfuerzo intelectual.

Harry se ha ido a la cafetería con Brandy, y el silencio que reina en mi habitación es tal, que me sorprendo al desconcentrarme con el ínfimo sonido de un papel deslizarse bajo la ranura de la puerta.

Cuando abro la puerta, como es de esperarse, el corredor está vacío. Levanto el papel de la alfombra. No es más que un trozo de hoja cuadriculada, cortada sin cuidado y un pequeño mensaje escrito con tinta rosa: «Lo siento. Espero que Keyra esté bien.»

Es Megan.

Al día siguiente es su cumpleaños y el mío también. Megan no vuelve a acercarse, pero logro hacerle comprender que todo está bien con una sonrisa lejana por la mañana en el salón.

Después de clases lo más cercano que tenemos a una celebración de mi cumpleaños es una sesión grupal de estudio para el exámen de historia universal. Juntamos un montón de mesas de la cafetería y nos sentamos todos juntos, rodeados de paquetes extragrandes de papas fritas y una botella de gaseosa para cada quién, mientras discutimos sobre la Guerra Mundial II y bromeamos. Es un cumpleaños agradable.

Llega el viernes y los chicos me tratan de convencer de ir a jugar bowling para tener una verdadera celebración. Me niego un millón de veces, porque no estoy de ánimos. Rendir el exámen de física a primera hora de la mañana me ha dado tiempo suficiente para pensar más de lo necesario sobre la situación de Keyra. Creo que es la segunda vez en toda mi vida que entro a la biblioteca del instituto, pues quiero encontrar más información sobre esa leucemia mieloide aguda.

Bien, esto puede sonar tonto, pero después de una hora leyendo libros gordos de medicina, en donde logro comprender sólo la mitad de los términos técnicos que utilizan, caigo en la cuenta de que no es información lo que estoy buscando, sino soluciones, formas de actuar. Sólo quisiera encontrar un libro sobre los pasos a seguir cuando mi novia tiene cáncer. Necesito algo o alguien que me diga qué hacer exactamente, cómo sobrellevar el miedo a verla sufrir. Apenas está comenzando con todo esto y siento que todo va demasiado tranquilo para ser cierto. Necesito saber qué viene después, ¿todo va a explotar de pronto, acaso?

Mi teléfono vibra por séptima vez desde que entré en la biblioteca y el hombre tras el mostrador vuelve a darme esa mirada de apaga-esa-cosa-o-largate. Harry y Louis se han encargado de mensajearme durante toda la tarde para averiguar dónde estoy y llevarme a rastras hasta el centro comercial para tener una tarde de bowling forzoso.

«Tomamos a tu novia de rehén, más vale que vengas al bowling con nosotros. Keyra tambien está de acuerdo.»

Vibra una vez más.

«Sabes que no dejaremos de insistir, ¿no es así?»

Cierro el mensaje y trato de concentrarme en el libro nuevamente. Pero comprendo cada vez menos y la lectura es tediosa y somnolienta.

—Aquí estás—dice alguien detrás de mi hombro. Zayn. —¡Aquí está, Liam!

Cuatro manos se encargan de mis brazos y me arrastran hacia atrás.

—Oh, por favor, amigos.

—¡Hey! ¡Ustedes! —Exclama el bibliotecario poniéndose de pie tras el mostrador. Qué puedo decir, sería un santo si después de esto no quisiera matarnos. —¡Si no salen de aquí en este instante llamaré a un inspector de pasillo!

—Corre, Zayn, corre—susurra Liam y ambos tiran de mí, obligándome a correr con ellos fuera del lugar.

En media hora nos encontramos teniendo una partida de bowling recién comenzada. Y no puedo quejarme, mi mente cambió por completo en cuanto se encendió la luz al fondo de la pista para lanzar los bolos, haciéndome sentir esa familiar sensación que obtenía cada viernes al venir con los chicos, hace un par de años atrás. Cambiar un libro de medicina por una tarde de distracciones junto a mi novia y mis mejores amigos ha sido bueno, sobre todo por las risas que me proporcionan ahora.