Advertencia: Contenido sexual
-Punto de vista de Harry-
Me tumbo en la cama de nuevo intentando recobrar el aliento, la chica a mi lado está igual. Se gira y me sonríe, acurrucándose en mi pecho pasando mi brazo por sus hombros. Mi mirada perdida en el techo, había conseguido olvidarme de la mierda que soy por un rato, pero el sentimiento volvía y esta vez peor. El efecto del alcohol empieza a desaparecer y el éxtasis del orgasmo que acabo de tener se pasa. Y de nuevo la mierda vuelve.
Me levanto de la cama bruscamente, tirando la sábana encima de la chica. Ella se tapa, sigue desnuda, igual que yo. No recuerdo su nombre. Me pongo los boxers negros que había dejado por el suelo antes y me dirijo a la puerta.
- ¿Adónde vas?- grita la chica detrás de mi-.
Bajo las escaleras directo a la cocina. Abro todos los armarios hasta encontrar una botella de whiskey. Ya llevo unas cuantas copas, demasiadas, pero necesito más. Tomo tres tragos de la botella y vuelvo a subir. Entro de nuevo en la habitación y la chica, que estaba sentada mirando su móvil, me sonríe seductoramente, mordiendo su labio inferior.
Pego otro trago a la botella y se la ofrezco. Mientras ella bebe tiro de la sábana que la cubría y ella se ríe. Deja la botella sobre la mesita de noche y se acerca a mí a gatas. Se queda de rodillas al borde de la cama, coloca una mano a cada lado de mi cintura y comienza a dejar pequeños besos por todo mi pecho, baja besando mis costillas, llega al ombligo. Su boca nunca dejando mi piel. Sus besos cada vez más húmedos, pasando su lengua de vez en cuando. Sus manos van bajando a ambos lados de mi torso mientras dibuja círculos imaginarios con sus pulgares. Sigue por la línea de vello que baja desde mi ombligo y desaparece por la goma elástica de los boxers. Con sus finos dedos comienza a bajarlos muy poco a poco, antes de seguir bajando levanta la cabeza y me mira con deseo, la misma sonrisa de antes mordiendo su labio inferior, yo muerdo mi labio también y recojo su pelo con las dos manos, en una coleta alta. Paso mi pulgar por su labio mordido lentamente y ella saca la lengua lamiendo mi dedo.
Me inclino para besarle en los labios un momento antes de separarme de ella de nuevo. Baja mis calzoncillos lo suficiente para sacar mi pene ya erecto. Comienza a masajearlo, muy lentamente.
- Más- digo en un suspiro-, más rápido.
Ella aumenta la velocidad. Cierro los ojos, de repente noto como su lengua acaricia mi punta y sus labios me rodean. Con mi mano hago presión en su cabeza para entrar más en ella, mientras, con su mano masajea lo que no puede meter en su boca, su lengua golpeando y rodeando mi pene. Tras un tiempo así me voy correr ya, pero quiero más.
Cojo su cabeza con mis dos manos y la alejo un poco, ella me mira confundida. La empujo de los hombros para que quede tumbada en la cama, ella se echa hacia atrás para dejarme espacio. Subo de rodillas, agarro las suyas y las separo Me agacho, besando su cuello, me apoyo en mi codo izquierdo mientras la otra mano se centra en su teta y mi boca en la otra. Mi mano sigue bajando por su cintura y bajo de su ombligo, sigo bajando más despacio y comienzo a masajear su clítoris. Ella deja escapar un gemido, lo que me hace aumentar la velocidad. Introduzco un dedo sin avisar y ella gime más. Comienzo a besar sus labios fuertemente. Meto otro dedo más, y suelta otro gemido en mi boca. Yo gruño en la suya y ella busca mi lengua con la suya, y le respondo.
- Ya, por favor- me pide en un susurro-.
Asiento mirándola a los ojos. Saco mi mano, aparto más sus muslos para dejarme más espacio. Cojo su pierna derecha y la paso por encima de mi hombro, y entro en ella.
Me despierto con el sonido de la puta alarma.
Mierda, mi cabeza da muchas vueltas. Cuando mis ojos se acostumbran a la luz miro a mi alrededor, y veo a la chica de ayer de espaldas a mí, durmiendo. La sábana le llega por la cintura y puedo ver que no lleva sujetador. Levanto un poco la sábana y tampoco lleva bragas. Vale, empiezo a recordar. Me giro a la mesita de noche para apagar la alarma de mierda que sigue sonando, y casi tiro una botella de whiskey, vacía. Joder. Me siento en el borde de la cama y entierro la cara en mis manos.
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No me pidas que te ame
FanfictionCuando Harry Styles se muda con su madre al pequeño pueblo de Bradford para poder dejar atrás su pasado, no espera encontrarse envuelto en el de un grupo de cuatro amigos de su misma edad, Zayn Malik, Louis Tomlinson, Niall Horan y Hannah Johnson. T...