Cap. 21 "Ven"

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  -Punto de vista de Hannah- 

Salgo de los vestuarios directa a la pista de atletismo. La profesora de gimnasia y algunas alumnas ya están esperando. Calentamos mientras la profesora Moore nos indica los objetivos que tenemos que conseguir en este entrenamiento. En total somos quince chicas, pero cuando hacemos carreras, para caber todas en la pista, corremos de cinco en cinco. 

Las primeras diez ya han corrido, y es mi turno. Me coloco en la línea de salida de mi carril y me preparo para la carrera. A mi lado aparece Grace, una gran zorra, y su otra amiga, nunca me acuerdo de su nombre.

- Amy, mira a las gradas- le dice Grace a su amiga-.
- Jo.der. Qué bueno está.

- Ya lo sé. Me lo pienso tirar.
- Buah, si te lo tiras serás mi ídola.

- Pues ve preparándote pósters con mi cara.
- Tía, tía, que está mirando hacia aquí.
- ¡Ah! Ya se ha dejado llevar por mis encantos- dice riendo y llevándose las manos a las tetas-. 

Muy sutil.

- ¿Nos estará mirando?
- No si te parece mira a ésta- bromea señalándome a mí-. 

Se ríen como idiotas. Me giro y la miro frunciendo el ceño.

- ¿Qué?¿Piensas que ese pibón te va a mirar a ti?

Me da la risa. Ella señala a las gradas. Miro por primera vez desde que están hablando, y mi sonrisa desaparece cuando veo a Harry sentado en ellas. 

Está jodidamente sexy con su pelo echado hacia atrás, los brazos en sus rodillas y sus manos enlazadas. 

No hemos vuelto a coincidir desde primera hora en clase de dibujo. Él me ve y me saluda levemente con la mano. La estúpida de Grace le saluda "seductoramente", yo la miro cabreada y Harry empieza a reírse. 

- ¿Listas, chicas?- grita Moore-. 


  -Punto de vista de Harry- 

Las clases ya se habían acabado. Recibí un mensaje de mi madre diciéndome que no iba a estar en casa hasta la noche. Me acordé de que Hannah tenía atletismo hoy y, sin siquiera entender por qué, salí al patio y me senté en las gradas. 

En lo único en lo que he pensado en todo el día ha sido en las ganas que tenía de salir de aquí, y en Hannah, en la clase que hemos tenido juntos, en toda esta mierda. El caso es que cuando por fin llega la hora y se acaban las clases, aquí estoy sentado en las gradas dentro de esta puta cárcel para... ¿para qué?

- Hola...

Una voz me saca de mis pensamientos. Siento una ligera decepción cuando no es la voz que esperaba, ni la cara con la que quería encontrarme. 

- Hola- digo seco-.

Ignoro a la chica que parece tener intenciones de sentarse a mi lado y empezar una conversación, mientras, busco a Hannah por la pista de atletismo. 

- Grace.

Me extiende la mano. La miro unos segundos pero no se la doy. Como ya esperaba, se sienta a mi lado.

- ¿Y tú como te llamas?

Me guiña el ojo.

- Harry- respondo con mi mirada puesta en la pista-.
- Encantada de conocerte, Harry- me dice con una voz seductora, o un intento de ello-. 

Me sigue hablando sobre algo a lo que no presto atención. Más que nunca, necesito ver a Hannah y salir de ahí. La voz de la chica suena de fondo en mi cabeza, cuando de repente su cara aparece ante mis ojos. Por fin la encuentro. Está en los bancos bebiendo agua. Ya se ha cambiado y lleva de nuevo la falda y la camisa del instituto. La entrenadora le está dando la mano como felicitándola. Sin pensarlo me levanto y bajo los escalones de las gradas hacia ella.

No me pidas que te ameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora