49. ¡Al pendejo no lo tocas!

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Caminé por los pasillos enojada hasta llegar a la cafetería, tomé un poco de comida y me senté en una mesa sola.

Al rato, llegaron Alex y Aaron junto a Cristal. Vanessa estaba en una mesa sola intentando comer aunque se veía que no tenía hambre. Lily también comía sola pero fulminando con la mirada a todo el mundo.

— Esto es una mierda.— Comenta Cristal comiendo un bocado de su comida.— Y es tu culpa, Alex.

— Lo sé.— Suspiró él.

Ellos comenzaron a tener una pequeña discusión la cual ignoré.

Tengo que hablar con Lily. Alessandro está sufriendo. Vanessa está sufriendo. Cristal está sufriendo... Y yo sufro viéndolos.

Alex me dijo qué pasó y qué le dijo a Lily antes de salir de su habitación... Y lo golpeé terriblemente. ¿Cómo se le ocurre decirle eso sabiendo como está la situación? Es un idiota.

Lily lo sigue amando, lo sé porque Cristal me lo confirmó, y eso es un punto a favor.

Por otro lado, Vanessa no podría ser perdonada y no lo digo porque estoy del lado de Alex, sino porque es así.

Al hombre lo podrán perdonar mil veces. En cambio, a la mujer no. Ella queda como la peor de todas y aunque haga cosas para arreglarlo, no será igual. No se olvida.

Pero soy Cassidy Marie, podré con esto.

— ¡Vanessa!— La llamo. Ella levanta la cabeza y me mira. Le hago una seña para que se siente con nosotros. Ella viene a paso lento y se siente frente a Alex.— Hablen.— Me levanté. Cuatro pares de ojos me observan con confusión.— Yo iré con Lily.— Y me fui dejándolo aún más confundidos.

— ¿Qué?— Escuché a Alex.

Dejo mi bandeja frente a Lily y me siento. Ella levanta una ceja un poco sorprendida.

— ¿Qué quieres?— Pregunta cruzándose de brazos.

— ¿Vas a tratar así de mal a tu prima?— Interrogué dándole otra mordida a mi sandwich.

— Si te mandó Alessandro o Vanessa, lárgate.— Reí y le dí un trago a mi bebida. Lily me miró raro.

— Ellos no me mandaron, creo que están más confundidos que tú del por qué estoy aquí.— Entrelacé mis dedos sobre la mesa.

— Habla.— Sonreí.

— Sabes que el cumpleaños de Cristal se acerca y no está del mejor ánimos por los problemas a su alrededor.— Asiente.— Me gustaría hacerle algo y que TODOS— Recalqueé esa palabra.— estuvieran presentes y sin peleas.

— Me niego.— Responde negando reiteradas veces.

— Házlo por tu única prima con la cual has estado toda tu vida.— Lily me miraba con seria y yo a ella con una sonrisa compasiva.— Además, no tienes que hablar con ellos.— Me encojo de hombros.— Aquí la principal es Cristal.— Lily lo piensa mientras termino de comer.— No tienes que responderme ahora pero sí unos días antes.— Me levanté de la mesa tomando la bandeja bajo la mirada de Lily.

Comienzo a caminar.

— Lo haré.— Me detuve un segundo y sonreí siguiendo mi camino.

Bien, tengo a la más difícil, de los demás no me preocupo.

El día siguió su curso, todo tranquilo, todo bonito.

Matilda no me volvió a molestar y milagrosamente, las Materazzi no lo hicieron.

Hablé con Vanessa y traté de sacarle una sonrisa... No fueron muchas.

Le conté que pensaba hacerle algo a Cristal y ella aceptó de inmediato con la condición de que no haya alcohol y acepté. Además de que le dije que Lily asistirá, ella sonrió de la manera más pura que pude ver en mi misera vida y hasta se podría decir que está feliz por ello. Creo que piensa que tiene una mínima oportunidad con Lily y para ser sincera, yo también lo espero.

Cassidy. - [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora