Cassidy. - [TERMINADA]

36. Fue un placer...

Cassidy pov's

Le marco y él contesta.

— ¿Hola?.— Con sólo poder escuchar su voz, me da un vuelco en el estómago. No sé que me hizo... ¿Brujería? Sí, eso puede ser.

— ¡Aaron! ¡Por favor, no cuelgues y no me interrumpas! Sé que debes estar odiándome en este momento pero te lo puedo explicar. No cuelgues. Debes estar asombrado, temeroso y... No lo sé, pero todo tiene una puta explicación... Bueno, en realidad, no porque no la he descubierto, ¡pero lo haré!. No quiero que le digas a Alex ni a nadie que sigo con vida porque arruinaría todos mis planes. Sólo quiero que me escuches y que no me discrimines a mí. Te llamé porque necesitaba hacerlo y poder quitarme parte de este peso que llevo y..— Digo todo muy rápido que ni sé si me entendió.— ¿Hola?.— Pregunto al no escuchar nada.

— Ca-Ca-Cassi...

— ¿Aaron?— No recibí respuesta.— ¡Aaron! ¡Responde!... ¡Eres un idiota!— Y le colgué.

Guardé mi celular y salí del cuarto con ganas de matar a medio mundo.

Llego a la cocina y me encuentro a Margaret, mi querida y mentirosa abuela. Busco un vaso y me sirvo agua.

— ¿Y Sal... mi padre?— Me corregí. Desde que desperté del accidente, le he dicho de esa forma y no puedo cambiarlo porque sospecharían.

— Salió.— Contestó acomodando un plato, asiento.

Ésta puede ser mi oportunidad.

Entrar al despacho y al sótano, buscar la jodida carta que me dejó Grace y quizás encuentre otra cosa de ayuda.

Salgo de la cocina y voy a mi habitación. Coloco música a todo volumen, busco la llave del cuarto y la cierro con seguro.

Bajo y me asomo en la cocina, Margaret sigue ahí.

Primer lugar; el despacho.

Entro con mucho cuidado y la cierro enseguida tratando de no hacer ruido.

El despacho es igual al del sueño o, mejor dicho, el recuerdo que se escondía en mi memoria.

Me dirijo al escritorio y comienzo a buscar.

Papeles, papeles y más papeles.

— ¿Por qué tiene tantos?— Murmuro leyendo algunos para, luego, tratar de dejar todo como estaba... Tratar.

Abro un cajón; está prácticamente vacío, sólo hay una fotografía. Una mujer...

Grace.

La reconocería en cualquier lugar.

¿Por qué tendría una foto de Grace? ¡Él la mató! Ya no se puede arrepentir de lo sucedido. Salvatore es un maldito hipócrita.

En en reverso de la fotografía, decía:

"A pesar de todo, te sigo y seguiré amando."

Ay, qué bonito... ¿Sarcasmo? ¡No!.

La caligrafía era muy bonita y sé que no es de Salvatore porque la reconozco muy bien. ¿Será de Grace antes de morir?.

Si pudiera preguntarle todo esto a Salvatore y me lo respondiera con la verdad, todo sería diferente y más tranquilo.

Dejo la foto en su lugar y cierro el cajón