Cassidy. - [TERMINADA]

60. Soy el diablo.

Cassidy pov's

Llegamos a Chicago con un poco de retraso, con eso quiero decir que llegamos a media noche. Y Pietro quiso que me quedara para descansar e irme en la mañana a terminar el trabajo.

Conocí a su familia; al principio eran muy serio, después de que tomaron confianza, eran relajados. Al decir mi nombre, hizo que me tomaran más cariño y decían que Salvatore era muy buena persona... Si supieran lo que hizo, ya no lo sería.

No me he contactado con Alex ni con los demás porque no quiero que me hagan preguntas ni me fastidien mientras trabajo. Sólo espero que estén bien.

Estoy en el avión de ida Nueva York, ya localicé a las Materazzi y sufrirán la peor agonía que pudieron imaginar.

Bajo y camino tranquilamente con una pequeña mochila con mi genial y nueva ropa blanca.

Paro un taxi y les doy la dirección hacia donde pienso torturar a las gemelas favoritas.

El lugar está abandonado y polvoriento, lleno de telarañas y con un olor a viejo. Está un poco alejado de la ciudad.

Lo único que me falta es un auto y sé donde obtenerlo.

Dejo mis pertenencias en el edificio y salgo de nuevo... Camino a la mansión Morelli.

Dakota pov's

Despierto con un terrible dolor de cabeza, no sé dónde estoy ni como llegué aquí.

La habitación es negra, no puedo distinguir nada.

Escucho un resoplo y me pongo alerta. Frunzo el ceño y trato de adaptar mi visión aunque no sirve de nada.

— ¿Quién está allí?— Me siento como la típica chica tonta de las películas de terror.

— ¿Dakota?— Escucho a Aaron.

Las luces se encienden sin previo aviso haciendo que cierre los ojos. Poco a poco los fui abriendo y pude ver a mi alrededor.

Abro los ojos como platos al ver a Trent desmayando, amarrado en una silla como Aaron y yo.

Aaron se veía mal, con sangre brotando de su cabeza y una línea seca salir de su nariz y boca, además de que se le notaban varios moretones en el cuerpo.

— ¿No te dije que traería personas para que te acompañaran?— Sonrió ampliamente. Giré violentamente la cabeza al escuchar la voz, fruncí el ceño y le miré mal.

— ¿Qué quieres?— Espeté con rabia mientras caminaba lentamente hacia mí. Se detuvo y me miró.

— Venganza.— Se encogió de hombros. Le miré con gracia y una ceja levantada.

— ¿Más?— Se acercó más y tomó mi barbilla con un dedo.

— Si, más.— Sonrió, quité mi rostro de sus dedos y le escupí.— No me tientes que si me da la gana, no espero a que tu hija llegue.— Sonrió con cinismo y se fue caminando tranquilamente. Un celular suena y contesta.— ¿Qué?— Hace una mueca y luego sonríe, nos mira y cuelga.— Su salvadora vendrá pronto.

Cassidy pov's

Conduzco el auto a toda velocidad mientras algunos de los guardias me persiguen... Como me encantan las persecuciones.

Cruzo en una calle, cruzo en otra, disparo como puedo, choco algunos autos pero no me importan, sólo quiero escapar de los pendejos.

Luego de unos minutos, los pierdo y puedo hacer mi captura.

Son las seis de la tarde, el día ha pasado rápido y considero que esta es la hora perfecta para hacerles una visita.

Detengo el auto y espero.