Aura©

Capítulo 27 (Pt. 1)

HECHICERA

Le era impresionante el cambio que había sufrido aquella mujer. Tiempo atrás había visto el máximo poder que poseía la hechicera, el cual no superaba en mucho al que poseía su hermano. Loki siempre había sido el hechicero más fuerte en toda la ciudad dorada, era por eso que Amora siempre había estado al servicio de él. Pero ahora, tras haberla visto pelear con aquel asombroso poder, sabía que la mujer era capaz de mucho mas, incluso de superar a su hermano. Tal y como lo había hecho ahora.

Era por eso que ahora su hermano se encontraba bajo su posesión. La batalla había sido tan intensa que ni él mismo había podido aguantar el ritmo de la mujer, y Loki había sucumbido ante su poder, el cual en vez de disminuir parecía ir en aumento, dejando al pobre moreno en unas pésimas condiciones y a él en un estado deplorable, donde ni siquiera podía sostenerse unos minutos en pie sin tambalearse y caer.

Sophia y Sigyn estaban a su lado sosteniéndolo, mientras que la última luchaba por mantenerlo estable y restaurar su tan gastada energía. No sabía que la mujer tuviera aquellas habilidades, mas era algo que no iba a cuestionar, puesto que todo en ese día había sido fuera de lo común. De hecho, aun no lograba entender, o siquiera creer, el que su madre estuviera muerta, a pesar de que aquello ya era algo trascendente.

Se fue deslizando por la pared en la que estaba recargado mientras soltaba un pronunciado suspiro. Posó sus ojos sobre la castaña mujer, quien no dejaba de ver hacia el suelo. Llevó una de sus manos hasta posarla hacia donde estaba la de la mujer. Podía entender lo que ella estaba sintiendo en esos momentos. La ansiedad y el desconocimiento de la situación de Loki eran algo que ambos les preocupaba y mucho, así que por ello intentó reconfortarla.

— Encontrare a mi hermano, te lo juro — le dijo en tono suave mientras apretaba su mano en son de compresión.

En el rostro de la mujer se dibujó una suave sonrisa que apenas logró mover algunos músculos de su cara, más aun así, no hubo un gran cambio.

—Tengo un mal presentimiento de todo esto — murmuró su preocupación mientras se soltaba del agarre del rubio y se cruzaba de brazos. — Es como si hubiera algo escondido, algo que no estuviera bien...

— ¿Cómo qué? — se apuró a cuestionar mientras sentía como su fuerza volvía, al igual que su vitalidad, más el dolor de las heridas seguía presente.

La mujer chasqueó la lengua y dio unos pocos pasos lejos de él para luego volver a encararlo. Los ojos de Thor no se apartaron de ella en ningún momento, podía leer su ansiedad y angustia como si se tratara de su propio reflejo, más aun así no podía descubrir el verdadero por qué de ello. Sabía que parte de su estado se debía a Loki, pero la otra parte simulaba ser por algo más.

— ¿Acaso sabes algo que nosotros no, Sophia? — preguntó sin rodeos mientras la castaña se mordía el labio y la diosa terminaba su trabajo y posaba su vista sobre la mortal.

— Como sabes, estoy vinculada a Loki — planteó tras unos segundos de silencio. Thor asintió en señal de que prosiguiera. — Antes de que nos apartáramos de él, mandó a su guardián a que nos cuidara a mí y a... — guardó silencio con algo de dolor, para después tragar saliva y proseguir — a Frigga. Pero al hacer eso... — sus ojos se desviaron por un momento hacia su costado, observando el suelo con algo de indecisión, después, volvió su vista hacia el rubio y, tras haber dado un ligero suspiro, reanudo su plática. — Loki quedó sin mucha de su magia.

Thor se incorporó, dejando de lado a la rubia mujer. Su rostro era reflejo de un profundo enojo. ¿Cómo era posible que su hermano hubiera sido tan inconsciente de dejar de lado parte de su magia en un momento tan crucial como lo era este? Ahora era una emergencia, debía de ir tras la hechicera y golpearla hasta que esta agonizara, lamentándose de todo lo que había hecho, para después liberar a su hermano y reprenderlo por la gran estupidez que había hecho. No quiere decir que Thor pensaba que el proteger a Sophia y a Frigga con parte de su magia era algo malo, de hecho lo veía como un acto que le decía que su hermano no estaba perdido del todo, que aún existía algo de sentimiento puro en él, que aún le importaba proteger lo que él quiere. Pero aun así le parecía no muy sensato aquello.