❝Estoy muy cerca pero este sentimiento se siente tan bien, supongo qué lo amo más de lo que debería; tu piel en mi piel no ayuda a la forma en que me siento, pero no puedes saber qué no hay lugar donde prefiera estar.❞
Claro que le había parecido extraño no escucharlo alterado por el atuendo que usaría; fue la razón por la que subió a verlo. No era la gran cosa cómo el vento de bienvenida de hacía dos semanas, se trataba de algo mucho más informal, pero tratándose de Alonso, el estrés de tener el ouftit perfecto siempre estaba presente y la verdad era que en toda ocasión estaba impecable aunque, aquella noche, se dedicó a arreglarse en completo silencio, desde esa famosa tregua con Jos, Bertha lo había notado más serio, callado, a veces ausente.
—Me parece a mí o, ¿No tiene muchas ganas de ir a esa fiesta? —le preguntó la nana al asomarse por la puerta. Finalmente había salido a la luz el número de Rose Ville de Julio. Había sido un éxito total, por lo cual se decidió organizar una fiesta. Era una ironía que, Alonso, odiará todas esas reuniones que su abuela acostumbraba a hacer porqué se fue a meter en un mundo en el que, a casi diario había un evento, eventos a los que prácticamente se veía obligado a asistir por ser quien era: bueno, tal vez iba a terminar hallandole el gusto. Alonso se había adentrado a ese mundo de reuniones, pero sería un mundo dónde crearía sus propias amistades y contactos que, en su mayoría, rondaban su edad.
—Por supuesto que no, qué cosas dices —le respondió con leve sonrisa, negando un poco mientras observaba su reflejo en ese espejo de cuerpo completo.
—Es que ya está listo y estuvo muy callado; no se moleste, pero sabe que suele hacer un gran alboroto cada vez que se va a arreglar, incluso para salir al parque —se le acercó, colocándosele detrás, siendo capaz de observarse el rostro.
Alonso rió bajito—. No es el super evento, ni siquiera es formal cómo el de la otra noche: es una fiesta con personas que rondan mi edad y todos estos chicos y chicas de la élite de Manhattan son bastante alocados.
—A pesar de que no sea la gran reunión, se ve muy bien. Me cuesta admitirlo, pero ya no es el mismo niño bonito y caprichoso que vi crecer: se ha convertido en un joven hombre, atractivo, exitoso y de buen corazón —le sonrió con esa calidez maternal que a Alonso le gustaba.
—Tal vez —le devolvió una sonrisa de lado a través del espejo—, pero con Jos —suspiró—, no puedo evitar sentirme tan indefenso cómo un niño. Él me hizo vulnerable, me destrozó —perdió la mirada en el espejo, recordando todo el dolor que le había provocado el ojimiel, como ese último beso con Daniel en su presencia—, pero también me hizo más feliz de lo que nunca he sido —suspiró con una sonrisita, teniendo en mente todos aquellos momentos en los que Canela provocaba que casi se le saliera el corazón, incluso cuando estaba siendo molesto al llenarlo de tantos mimos.
—Me imagino lo difícil que es: yo lo vi enamorarse y decepcionarse del joven Canela. No lo ha visto desde esa noche, ¿verdad? Y por lo que recuerdo, me dijó usted que él también asistiría a la fiesta de hoy por aparecer en la revista, ¿ya sabe cómo va a actuar después de esa tregua que hicieron?
—Será espontáneo —se encogió de hombros—. Por supuesto que no espero que llegue al club y me felicite con unas flores en la mano.
—Ojalá no le parezca una pregunta imprudente pero: si él, en un futuro, le llegase a pedir qué volvieran a estar juntos, ¿aceptaría?
El príncipe resopló y giró a verla.
—No lo sé, porqué no todo tendría que ser un discurso de palabras bonitas, tendría que hacer cosas que me demuestren que realmente me quiere de vuelta, ya sabes, hechos y no palabras.
ESTÁS LEYENDO
castle walls ♕ j. v.
Fiksi PenggemarTodos piensan que lo tengo todo, pero es tan vacío vivir detrás de los muros de este castillo. -Fuiste directo a mi corazón y me sacaste de la oscuridad. • Obra inspirada en Blair Waldorf y Ámbar Smith. Esta historia contiene situaciones y comporta...